En Zenón Pereyra

Copan comisaría pero fracasan en el banco

Encerraron a los agentes en un calabozo y se llevaron el patrullero, pero el plan de asaltar el banco fracasó porque se apoderaron de las llaves equivocadas.

Copan comisaría pero fracasan en el banco

La comisaría copada por la banda que esta mañana fracasó en el intento de robar una sucursal bancaria en Zenón Pereyra.

Foto: Agencia Rafaela

 

 

Redacción de El Litoral

Una banda delictiva en la que formaban no menos de cuatro hombres enmascarados sorprendió esta madrugada al policía que estaba a cargo de la comisaría de Zenón Pereyra, desarmándolo y encerrándolo en el calabozo, amordazado y atado de pies y manos.

Los delincuentes que redujeron al policía, cuando regresaba de una recorrida nocturna a las 5.30, hicieron otro tanto, un poco más tarde, con el agente que llegaba para custodiar al cajero de la sucursal del banco Bisel Macro, institución que abre puertas al público a las siete de la mañana.

La audaz acción cerró en la comisaría cuando a las 6.30 se presentó el funcionario del banco, quien también fue a parar al calabozo. Dueños de la situación y creyéndose en posesión de las llaves del banco la banda trepó a un patrullero llevándose con ellos armas y uniformes policiales.

Sin embargo, la acción delictiva se abortaría segundos más tarde cuando los malvivientes advirtieron que los errores cometidos por ellos ya no se podían remediar. Entonces pusieron rumbo al este y en un camino rural abandonaron el móvil policial, una escopeta Itaka, una pistola ametralladora y los uniformes policiales.

Los errores, propios de recién llegados al mundo del delito, consistieron en dejar abiertos los equipos de radio con lo cual, en la Jefatura del departamento Castellanos y comisarías cercanas a Zenón Pereyra, otros policías advirtieron que nadie respondía a los llamados y dedujeron que algo del todo anormal estaba ocurriendo.

En tanto tras la llegada de un policía del escalafón administrativo a la comisaría asaltada, los cautivos fueron liberados y difundieron un llamado de alerta general.

Posiblemente, eso ocurrió antes o después de que los bandidos descubrieran que las llaves que arrebataron al cajero no abrían las puertas del banco. Las llaves en cuestión sólo abrían una caja fuerte que en la comisaría guardan las llaves del tesoro.

Ahora, la policía santafesina busca a los frustrados asaltantes que se habrían alejado de la región a bordo de dos vehículos, un Fiat 147 blanco y una camioneta Ford Ranger de color rojo. Propio de principiantes, opinó una de las fuentes consultadas, aunque después agregó que las edades de los bandidos rondaban los treinta años.