Entre el presente y el tesoro

Más allá de estas variantes, las opciones son tantas como la imaginación lo permita. Las mujeres (y, por tanto, las mamás) son como las flores: cada una distinta y hermosa. La diferencia reside en el detalle, en ese pequeño gusto que enciende su magia, su sonrisa, y hace de un regalo el disparador de un momento feliz.

TEXTOS REVISTA NOSOTROS / FOTOS EL LITORAL

Deditos pintados (diminutos), en azul. Una franja del mismo color, oblicua, que cubre gran parte de la superficie de madera que le da sustento. Líneas negras enmarañadas, sobre otro círculo más pequeño, y la mancha naranja que le confiere identidad. “Es un pirata -dice ella, con la emotiva sonrisa de siempre-. En realidad, es un posa pava con cara de pirata”, corrige, pero no hay necesidad de decir nada más. Junto a la ventana de la cocina, en la desteñida pared que supo contener un reloj de agujas, el trozo de madera se exhibe cual trofeo. Nunca cumplió su cometido, no fue base de ninguna pava -“hubiese perdido color”, se excusa-, pero alcanzó un rango mayor: hoy, casi dos década después, es el trofeo que le recuerda a su hijo como el niño que siempre será a sus ojos. Su misión puede considerarse más que cumplida: la leyenda, que desea un “Feliz día mamá!”, la hace feliz cada vez que lo mira, no uno sino (casi) todos los días.

Con mucho esmero él -su hijo-, intenta volver a causar ese efecto, pero no hubo monto, caja ni moño que pudiese lograrlo.

Para quienes han superado la edad (o las ganas) de incursionar en las artesanías, la fórmula del éxito parece ser más que sencilla: este Día de la Madre, no regalar lo que primero se ofrezca a nuestros ojos, sino intentar pensar en ella un día, como ella piensa en nosotros la mayoría.

En estas mujeres que -tal como se narra en la pantalla chica- nunca tienen tiempo para nada pero se hacen tiempo para todo, bastará prestar atención para descubrir su secreto, aquello que remueva las cosquillas y le cause una alegría. Quienes se aventuren en su busca podrán hallar el efecto deseado aún sin gastar demasiado: desde una foto revelada (desde 2,50 pesos cada una, para las se quejan que “con las camaritas nuevas al final no tenemos ninguna”) con su portarreratos (desde 6 pesos) hasta un llamado de larga distancia (a tarifa reducida después de las 22) que le recuerde que está presente aún en quienes la tienen lejos.

Con infinidad de variantes que se dependen de la primera mujer de cada familia, las opciones serán tantas como lo permita el ingenio: un desayuno completo a domicilio (desde los 70 pesos) para que comience su día con una sonrisa, o incluso un almuerzo que, sin incurrir en gastos, será un regalo que la libere y agasaje, aún en su propia casa y la vajilla de siempre.

Recuerdos sonoros

En vidrieras, afiche y todo tipo de mensajes, las propuestas se multiplican. Un regalo clásico -pero no menos efectivo- es hacer presentes momentos pasados en la voz de quienes le pusieron música. Así, por ejemplo, entre las placas recomendadas por Adriana Nepote, de una reconocida disquería del centro, se encuentra “Más de mí”, de Estela Raval (26,90 pesos) con 13 clásicos en su voz. También, el último de Cacho Castaña “Yo seré el amor” (34 pesos) que se propone como un cd/DVD de 20 canciones. Le siguen “5º Piso” de Ricardo Arjona, (36,90 pesos) y hasta una entrada al show que el sábado 31 brindará en nuestra ciudad, y cuyo valor oscila entre los 90 y los 440 pesos según la ubicación.

Para las más clásicas, las placas de Il Divo, Rod Stewart, Marco Antonio Solís e incluso lo que sin dudas será una joya familiar: la discografía completa de The Beatles, 12 discos simples y 2 dobles, remasterizados en formato CD60 pesos cada uno, o 852 toda la colección) que incluye un documental y videoclip por CD. La colección completa se propone en dos presentaciones, un box set mono (2.400 pesos) que además de los discos incluye un libro con su historia, pósters y fotografías; y su par estéreo (1.700 pesos).

Para los amantes de la música nacional, la impronta en este rubro será “Cantora”, la última producción de Mercedes Sosa, que “la Negra” compartió con voces emblemáticas de diversos géneros. Se trata de un disco doble que vale 86 pesos, que también pueden adquirirse en forma individual, a 36.90 cada uno.

Históricamente, los más vendidos para estas fechas son clásicos de Joaquín Sabina, Serrat, el Club del Clan y compilados, cuyos valores parten de los 15 pesos, entre otros recomendados de las décadas del “70 y “80, compilados de boleros y clásicos. “La mamá no es como el papá, que busca jazz o tango, la mujer busca una gran variedad, las mujeres buscan desde música latina y boleros al jazz, la música flamenca y clásica” contó Adriana, y añadió un dato esencial: a diferencia de los hombres, la mujer generalmente viene a comprarse los discos que le gustan porque no se los regalan”.

Olorcito a mamá

Aún cuando el más tradicional de los regalos sean las flores (desde 70 pesos el ramo de rosas, según la florería), un buen perfume es también un buen presente, para todos los estilos y cualquier edad. Así es como la mayoría de los perfumes suman variantes en su packaging, y combinan sus fragancias con sobres de raso (como en el caso de la línea Carolina Herrera, desde 255 pesos y en varios pagos), bolsos, remeras o portacosméticos, entre otros.

A modo orientativo, las fragancias se ofrecen también en promociones especiales: Sunflowers de Elizabeth Arden se ofrece a 79 pesos en su presentación de 75 ml, el 5th Avenue en 129 pesos; e incluso en variantes mixtas: Lucy Anderson propone una fragancia junto a un gel y estuche a 48 pesos.

Más allá de estas variantes, las opciones son tantas como la imaginación lo permita. Alguien dijo alguna vez que las mujeres (y, por tanto, las mamás) son como las flores: cada una distinta y hermosa. La diferencia reside en el detalle, en ese pequeño gusto que enciende su magia, su sonrisa, y hace de un regalo el disparador de un momento feliz.

Aún cuando el más tradicional de los regalos sean las flores (desde 70 pesos el ramo de rosas, según la florería), un buen perfume es también un buen presente, para todos los estilos y cualquier edad. las fragancias se ofrecen también en promociones especiales.

INMERSAS EN PALABRAS

En el sillón, la cama o un lugar que se elige como propio, la lectura suele ser un espacio de refugio en el que muchas mujeres disfrutan de las historias.

En estas fechas, según comentó Alicia Arese, reconocida empresaria del sector, las novelas suelen liderar las listas de los libros más vendidos. En este sentido, Stieg Larsson y su obra policial “Los hombres que no amaban a las mujeres” encabeza la nómina de recomendación, con sus títulos “La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina” y “La reina en el palacio de las corrientes de aire”. Por su parte, la chilena Isabel Allende se reafirma como una de las favoritas con su última obra, “La isla bajo el mar”, seguida de “El corazón helado” de Almudena Grandes, “El sari rojo” de Javier Moro, “Cometas en el cielo” de Khaled Hosseini, “Las grietas de Jara” de Claudia Piñeiro y “La pregunta de sus ojos” de Eduardo Sachieri.

En cuanto a obras de actualidad y política, entre los más solicitados se encuentra el último de Nelson Castro, “La sorprendente historia de los vicepresidentes Argentinos”, “Celebrar la diferencia” de Sergio Bergman, “Las muchachas peronistas” de Jorge Halperin, “Pobre patria mía!” de Marcos Aguinis y “El diario íntimo de San Martín” de Rodolfo Terragno.

El tercer segmento que se impone entre los más pedidos para estas fechas son los libros de autoayuda y espirituales, en que se destacan “El Secreto” de Rhonda Byrne, “Emociones tóxicas” de Bernardo Stamateas, “Palabras cruzadas” de Gabriel Rolón y “Laboratorio del alma” de Estela Marusso, entre muchos otros.