Segundo triunfo al hilo para River Plate

Cerró el año con victorias

El Millonario pisó fuerte en cancha ajena y venció a Tigre por 2 a 0. El elenco azul y rojo despidió a su exitoso entrenador, Diego Cagna, tras varias temporadas, un ascenso y dos subcampeonatos en Primera.

Redacción El Litoral

Agencia Télam

River Plate venció a Tigre por 2 a 0, en Victoria, en el último partido de ambos en el torneo Apertura, que también marcó el final del ciclo de Diego Cagna como entrenador del equipo local.

Los goles del conjunto dirigido por Leonardo Astrada fueron convertidos por el juvenil Gabriel Funes Mori y Diego Buonanotte, uno en cada tiempo. Este triunfo se sumó al obtenido la fecha anterior ante Racing, por lo que por primera vez en este torneo, el conjunto de la banda ganó dos partidos de manera consecutiva.

Paridad

La etapa inicial estuvo signada por un equilibrio en el juego, que rompió Funes Mori con un cabezazo sobre el final del primer período, que hizo inútil la estirada del arquero Daniel Islas.

La ventaja aclaró el panorama para los Millonarios en el segundo tiempo, que aumentaron por medio de Diego Buonanotte, con un preciso tiro libre al ángulo a los 14 minutos.

Así, River intenta comenzar a dejar atrás un torneo absolutamente irregular, que comenzó bajo la dirección técnica de Néstor Gorosito y terminó con una leve mejoría de la mano de Leonardo Astrada, además de la asunción de Daniel Passarella como presidente de la institución de Núñez.

Emoción

Hubo muchas banderas y cánticos como homenaje para Diego Cagna, que dirigió su ultimo partido en el Matador, con un gran recuerdo en la mejor etapa de la historia de Tigre. Por eso, la última posición que ocupó en este Apertura 2009 (la peor campaña desde que volvió a Primera) no representó nada para los hinchas de Victoria, que en el último lustro festejaron primero el ascenso a la máxima categoría, y luego dos subcampeonatos en ella.

Cagna terminó el partido a los abrazos con la gente de Tigre, le dieron el micrófono y tiró unas frases de despedida. Luego fue invitado a dar una especie de vuelta olímpica y recorrió el campo de juego con los brazos en alto y el aliento de la parcialidad tigrense.

Estaba vestido para la ocasión Cagna, quien se enfundó en una remera blanca con la leyenda “Por siempre gracias, Matador”. Le devolvieron gentilezas desde la tribuna con una bandera con el rostro del técnico que se va y a su lado la frase “hijo “e Tigre”.

Es que Cagna llevó al inédito subcampeonato en el Apertura 2007 que ganó Lanús, y al partido decisivo en la extensión del Apertura 2008 cuando se quedó sin el título pese a ganarle a Boca 1-0 en Avellaneda.

Ídolo igual. Cagna llevó al Matador a vivir situaciones inéditas en su historia. Quedará grabado a fuego en Victoria.

Foto: Agencia Télam