Hirió a un ladrón

Sargento liberado

De la Redacción de El Litoral

Un sargento 1º que se desempeña en la Seccional 5ta. de barrio Sargento Cabral recuperó la libertad tras permanecer algunos días a disposición de la Justicia. El policía está acusado de disparar con su arma reglamentaria contra un muchacho que le apuntó con un arma de utilería.

Rubén Darío G. quedó libre el viernes 4 de diciembre, cinco días después de protagonizar un confuso episodio, que involucró a dos presuntos delincuentes, uno de los cuales resultó herido.

El policía estaba en un bar de la Recoleta, acompañando a su hijo, que la noche del domingo 29 de noviembre tocaba con su grupo musical. Después del show se acerca un amigo del joven y le cuenta que acababa de ser asaltado mientras esperaba el colectivo, cerca de la ciclovía que atraviesa el Parque Federal.

Los tres salieron en busca de los delincuentes y mientras recorrían una zona oscura de la ciclovía, a la altura de calle Iturraspe, se toparon con dos personas que le salieron al cruce. Tras un breve diálogo uno de ellos hizo el ademán como quien desenfunda un arma, pero con más reflejos el policía apuntó con su pistola y disparó.

Un muchacho de 25 años resultó herido de bala, por lo que fue trasladado al hospital Cullen, donde se recuperaba de las lesiones provocadas. Según el amigo del hijo del policía el sujeto herido -Alejandro U.- sería el mismo que le robó el celular.

Tras ser indagado por el presunto delito de “tentativa de homicidio”, la defensa del sargento solicitó la libertad que fue finalmente concedida.

Del caso surgieron dos causas penales diferentes en el juzgado de Instrucción Séptima, de Diego Andrés De la Torre. Una es por “tentativa de homicidio” en la que se encuentra implicado el policía; y otra por “tentativa de robo”, en la que está implicado el herido, que escapa a la figura de “robo calificado” porque el arma utilizada era de utilería.

Fuentes tribunalicias indicaron que faltaba la declaración de los policías que intervinieron en el procedimiento y de la víctima, que aunque internado estaba en condición de hablar. También consta el testimonio de un remisero que pidió auxilio.