Fundó Teatro Arena

Murió Ricardo Gandini, un militante del teatro

 

La noticia de la muerte del actor y director teatral Ricardo Gandini ha causado fuerte conmoción en el ambiente cultural santafesino. Profundo conocedor del arte teatral, tuvo también una amplia participación en diversas manifestaciones del quehacer cultural en la ciudad que tanto amaba. Fue un hombre de teatro a ultranza. Trabajó siempre por el teatro mismo porque su corazón estaba en ese quehacer.

Grandes y prestigiosos nombres de la escena argentina se contaron entre sus maestros. Realizó estudios con Oscar Fessler, Juan Carlos Gené, Patricia Stockoe y Luis Diego Pedreira, por citar sólo algunos. Participó como actor y/o director en el montaje de innumerable cantidad de obras teatrales y en varias películas filmadas en la ciudad y tuvo asimismo destacada actividad como dramaturgo. En 1968 debutó como director en “La extraña tarde del Dr. Burke”, la puesta en escena que obtuvo en el Festival de Teatro de Córdoba relevantes distinciones.

Mucho son los títulos que integran la historia teatral en la vida de Ricardo Gandini. Debe recordarse especialmente la puesta en escena de “El organito”, en 1978, que se transformó con el paso del tiempo en uno de los montajes emblemáticos del teatro santafesino. Así, con el transcurso de los años fue cimentando una carrera caracterizada por su pasión por el hecho teatral.

Pero sin duda alguna, en la historia personal y artística de Ricardo Gandini hay un hecho que transformó su vida y también la calidad escénica durante muchos años. Creó en 1977 el Teatro Arena, una sala especialmente cálida en calle 25 de Mayo 2638 junto a Raúl Venturini, Hugo Ferrero, Juan José Ruffineto, Jorge Lecroq y Susana Squeff. Luego, en 1980, es el mismo Gandini quien funda la Escuela de Actores de Teatro Arena, adonde se formaron varias generaciones de actores locales, con quienes realizó trabajos escénicos para todos los gustos y con un interesante abanico de autores de la dramaturgia local, nacional e internacional. El “Arena”, como se conoció en la ciudad, se mantuvo en plena actividad por varios años. En el mismo ámbito, el bar Talía fue punto de encuentro no sólo de teatristas sino también de protagonistas del quehacer cultural santafesino.

Hace algunos años, cumplió el sueño de crear y dirigir un radioteatro, que junto a un vasto elenco de actores santafesinos concretó en LRA 14 Radio Nacional Santa Fe.

Siempre tuvo pasión para escribir, actuar y dirigir teatro. Pero también era consciente de los cambios en los modos de producción del hecho artístico. Decía que la sociedad cambió mucho en cuanto a sus costumbres y su idiosincrasia y que mucha gente se alejaba del acontecimiento teatral. Crítico de sus pares, sostenía que era notable la falta de compromiso con el teatro de la gente que transita sus caminos. “Se inician por distintos motivos -dijo en una entrevista concedida a El Litoral-, y eso es natural. Pero luego no abrazan el teatro como un modo de vida, como se abraza una religión, como una bandera. Por supuesto que hay gente en esta ciudad que sí lo ha hecho, y todos sabemos quiénes son. A ellos los siento mis hermanos aunque nunca hayamos hecho nada juntos”. Su particular voz seguirá presente en la memoria emotiva de quienes lo conocieron y admiraron.