A 48 años del inicio de las obras del Túnel Subfluvial

Jaime Poklepovic Ramírez

Hace 52 años, Arturo Frondizi fue elegido por el voto del pueblo y el 1º de Mayo de 1958 asumía como presidente Constitucional de la Nación, realizando en tres años y tres meses su obra de gobierno, que fue y sigue siendo la base de nuestro desarrollo e integración nacional.

El proyecto desarrollista para la transformación de nuestro país se fundamentó en “la justicia social y la absoluta vida moral, la vigencia del Estado de Derecho, la seguridad jurídica, la seguridad individual y plena vigencia de los derechos humanos” y, como decía el presidente Frondizi, “la síntesis de la nacionalidad es que sin desarrollo nacional no hay bienestar ni progreso... Y no sólo sucumben la libertad y la democracia, sino que corre peligro la soberanía nacional”.

Bajo esas premisas condensadas en un proyecto nacional, el país vivió el 3 de febrero de 1962 la iniciación de las obras del Túnel Subfluvial que, por primera vez, en la historia unirían a las provincias de Entre Ríos, Corrientes y Misiones con el resto del territorio nacional, en un acto multitudinario, con la presencia de los gobernadores Dres. Sylvestre Begnis y Uranga, y del presidente de la Nación Dr. Frondizi, que pronunció su recordado “Discurso de Paraná” sobre la política exterior de la Nación.

La idea de hacer un túnel está en un decreto del año 1957, así como una primera licitación, fallida, del mismo año [Anales Legislación Argentina 1957, XVI, 702 ]. Al respecto, el Dr. Uranga, con relación al proyecto federal de 1957, sostenía que “no saben la fuerza del Paraná, se van a encontrar en el Delta con un chorizo de barro que va a ser el túnel tal cual lo proyectan”, u opiniones como las de Alvaro Alsogaray, que sostenía que era más barato seguir con balsas y lanchas.

El presidente de la Nación Arturo Frondizi tenía resuelto terminar con el aislamiento físico de las provincias de la Mesopotamia argentina y visualizó que la única forma era la realización de un túnel. Y con ello se provincializaba su realización, evitando las interferencias de las posiciones del Ejército y la injerencia directa del Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la Nación, de manera que fuesen las provincias las que decidieran lo más conveniente, considerando la tesis de que por debajo del cauce cesaba la jurisdicción federal. Y comprometió al Gobierno de la Nación con la financiación y garantías para la obra.

El 15 de junio de 1960, los entonces gobernadores de Santa Fe, Dr. Carlos Sylvestre Begnis, y de Entre Ríos, Dr. Raúl Uranga, firmaron el Acuerdo Interprovincial para la construcción del Túnel Subfluvial en el río Paraná.

El 20 de marzo de 1962, los golpistas de siempre, civiles y militares, destituyeron al presidente constitucional Dr. Frondizi y, un mes más tarde, lo hicieron con los gobernadores elegidos democráticamente, lo que provocó que los trabajos del Túnel Subfluvial sufrieran múltiples dificultades, perdiendo el ímpetu desarrollista y desordenando las cuentas provinciales. Progresivamente, las obras volvieron a manos de la Nación por vía de la asistencia financiera a las provincias; a pesar de todo, con notable retraso respecto del cronograma de obra original, en mayo de 1970, se inauguró el Túnel.

Si no hay un proyecto nacional, que defienda y realice los intereses nacionales, cualquier hecho o acto sirve como pretexto para no hacer. Si el presidente Frondizi no hubiera estado de acuerdo y no hubiera hecho lo que hizo, la fuerza de quienes se oponían habría sido suficiente para impedir la obra. El proyecto político de Frondizi y la acción de los gobernadores cambiaron la historia de la Mesopotamia.

Decía el presidente Frondizi, en su discurso ante la XVI Asamblea General de las Naciones Unidas, el 27/9/1961: “Sabemos que la soberanía no es una fórmula jurídica, sino una voluntad nacional de potencia y autodeterminación que no culmina, sino que comienza con el acto político de la emancipación. El subdesarrollo es tan enemigo de la verdadera soberanía de un pueblo como los factores externos y políticos que la restringen o anulan. Ningún país atrasado es plenamente independiente. Las luchas políticas, las deformaciones y los retrocesos institucionales que sufren las nuevas repúblicas democráticas desde el momento mismo en que proclaman su independencia no son fenómenos caprichosos ni casuales. Son consecuencia de la penuria económica y social y de la debilidad y el anacronismo de estructuras económicas que siguen siendo dependientes después del acto político de la emancipación. Los pueblos evolucionados y prósperos suelen juzgar con severidad y desde un ángulo académico las dificultades, las desviaciones y los abusos que registra la práctica de la democracia en las nuevas nacionalidades...”.

Lastima que al Dr. Arturo Frondizi no lo dejaron cambiar la historia de la nación.

A 48 años del inicio de las obras del Túnel Subfluvial

De derecha a izquierda: el gobernador de Entre Ríos, Dr. Raúl Uranga, el gobernador de Santa Fe, Dr. Carlos Silvestre Begnis y el ingeniero Vega recorriendo las obras en su primer etapa.

Foto: Colección Alberto P. Francioni