Opiniones cruzadas

Franetovich pidió consideración

El ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Ariel Franetovich, se dirigió a los dirigentes de la FAA, quienes anunciaron que realizarán asambleas y tractorazos desde la semana próxima en Santa Fe y en la terminal portuaria bonaerense de Quequén.

 

DyN

El ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Ariel Franetovich, pidió “consideración” a los dirigentes de la Federación Agraria Argentina, quienes anunciaron ayer que realizarán asambleas y tractorazos desde la semana próxima en Santa Fe y en la terminal portuaria bonaerense de Quequén. “Habría que tener un poco más de consideración y entender que estamos en una situación muy especial que se da con el trigo”, expresó el funcionario hoy, en respuesta a los anuncios del titular de la entidad federada, Eduardo Buzzi, quien anticipó que la primera protesta será el martes próximo, en la localidad santafecina de Chabás; mientras que la segunda tendrá lugar el viernes 26 en el puerto de Quequén. Ambas medidas son para reclamar por la situación que soportan los productores del campo frente a la imposibilidad de comercializar el trigo cosechado hacia fines de 2009, así como para expresar su rechazo a las políticas del gobierno para con el sector rural. Frente a esta situación, el ministro explicó que “existe un stock de trigo muy limitado” y recordó que “tenemos muy poco margen exportable; primero hay que abastecer el mercado interno y después exportar”. Franetovich agregó: “Pero como el cupo es escaso, cuesta reanimar el mercado”. Para el funcionario, “hay que sacar el trigo de forma prudente porque no se puede liberar todo” y recordó que la semana pasada el Ministerio de Agricultura de la Nación se comprometió a dar créditos para la zona centro oeste de la provincia y liberar un millón de toneladas de trigo para la exportación. No obstante, la conducción central del agrarismo se encargó de remarcar ayer que la comercialización del trigo nuevo está paralizada, debido a la falta de compradores y el “desinterés de la exportación”, por adquirir el cereal en esta época del año.

Deudas

En otro orden, el ministro provincial destacó el alcance del convenio que habilita al gobierno de Buenos Aires para asumir deudas de 2.155 productores morosos con el Banco Nación, contraídas con anterioridad a la crisis financiera de 2001/2002, así como a “todos los que por ser su saldo contable menor a 25 mil pesos, se transfirió la mora a la cartera de Nación Fideicomisos entre 2003 y 2009”, subrayó. “Se trata de 280 millones que asumirá la provincia sumado al 70 por ciento que resigna el Banco Nación para recuperar a más de dos mil productores que habían quedado afuera del sistema y ponerlos nuevamente en actividad”, explicó. También justificó el aumento en los precios de la carne vacuna al expresar que “tuvimos una sequía sin precedentes en la provincia y casi todo el país, que provocó que nos hayamos tenido que desprender de muchos animales que salieron a la exportación”. Explicó que “no se venden los terneros hasta fines de febrero y durante marzo, época en que se los separa de la vaca”, sumado a que los ganaderos “quieren dejar en engorde a la producción porque ya habían perdido bastante. Sin embargo, la solución definitiva es que la Argentina no puede seguir consumiendo 70 kilos promedio de carne; tenemos que imponer el consumo de carnes alternativas”, concluyó.

“existe un stock de trigo muy limitado” y recordó que “tenemos muy poco margen exportable”.

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Ayuda. El ex intendente de Chivilcoy anunció ayudas concretas para los productores endeudados.

Foto: Archivo

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“Narrativa apocalíptica”

El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, sostuvo hoy que “no es bueno que todo sea una narrativa apocalíptica”, en dirección a las críticas de la dirigencia ruralista, y consideró que “si hay problemas, deben aparecer los aportes constructivos que permitan resolverlos”. Domínguez subrayó que la caída en la oferta de carne, que llevó a un aumento en el precio del producto, se debió a que “el año pasado no hubo pasto en los campos porque no llovía”, y remarcó que “el productor se vio en la necesidad de desprenderse de la mayor cantidad de cabezas de ganado”. El ministro destacó a radio Continental que 2009 “fue el año de mayor exportación, con 600 mil toneladas de carne”. En consecuencia sostuvo que “si hay problemas, se tienen que encontrar aportes constructivos para resolverlos. Lo primero en que habría que ponerse de acuerdo, para alcanzar un consenso nacional en la Argentina, es que cada uno puede tener su visión para resolver los problemas pero no es bueno que todo sea una narrativa apocalíptica de que estamos en el final de los tiempos”, afirmó Domínguez. Puntualizó que “hoy después de la lluvia, el productor está ganando volumen en el campo para ganar rentabilidad”, y puso de relieve que “nadie está culpando a los productores, la Presidenta (Cristina Fernández) hizo una explicación de lo que está pasando”. De esta manera, se refirió a los dichos de la jefa de Estado, quien dijo que la oferta de carne bajó por que las fuertes lluvias impidieron a los productores enviar la hacienda al mercado. “Hoy las condiciones climáticas favorecen, se está recuperando volumen y la ganadería. Por lo tanto, el ganadero no quiere desprenderse tan fácilmente de su ganado”, explicó el funcionario, y señaló que “lo que nos pedían a gritos es que el productor pudiera tener una mejor relación entre la producción y el esfuerzo que hace.