Un suizo en nuestras pampas

“Creo que la Argentina tiene mucho futuro”

Urs Rey, productor hortícola de la localidad de Birmenstorf (Suiza), realizó un diagnóstico de la actividad en Europa. Además habló sobre la potencialidad que tiene nuestro país para crecer y vender sus productos al mundo.

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Exelente calidad. Urs aseguró que en la finca se trabaja en los productos de segunda categoría como, rúcula, espinaca, perejil, rabanitos.

Foto: Mauricio Garín

 

José Zenclussen/Juan Ignacio Novak

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De visita en nuestro país, Urs Rey visitó El Litoral para contar su experiencia en el viejo continente. En dialogo con Campolitoral, el productor oriundo de la localidad suiza de Birmenstorf, analizó la realidad de la actividad hortícola en Europa Central, sus diferencias con nuestra región y las inmensas posibilidades que tiene la argentina para posicionarse en el mundo como proveedor de materias primas.

-¿Con que productos trabajan en la quinta?, ¿Cuál es la actualidad del sector?

-En nuestra quinta trabajamos en la producción de verduras como rúcula, pepinola, lechuga, espinaca, apio y ravanitos. No tenemos la posibilidad de exportar, toda nuestra producción se destina al mercado interno, que se vende en el Mercado Central de Zürich. Tenemos un nivel muy alto de calidad de nuestros productos.

En la quinta trabajamos 50 hectáreas de manera intensiva, no podemos comparar nuestras tierras con las que hay en la argentina. Aquí predominan las grandes extensiones, nosotros no podemos sembrar soja, maíz, porque necesitaríamos muchas más hectáreas. En Suiza un gran agricultor puede tener 100 hectáreas.

Con respecto a la actualidad, estamos un poco preocupados por que el Gobierno quiere abrir la frontera para que ingresen los productos del sur de Europa, que son más baratos. Este año va a ser un poco más duro.

-¿Es rentable la actividad?, ¿Continúan recibiendo subsidios del Estado?

-La producción hortícola es rentable, hace 50 años era mucho mejor, ahora es un poco más complicado. El tema de la apertura de frontera nos está inquietando un poco. En principio Suiza es el país que tiene el nivel más alto de salario, la ganancia es de 6 mil dólares en promedio. Los productores hortícolas no podemos exportar porque a nuestro alrededor (Francia, Italia, Alemania) las verduras son un 50% más baratas. El costo de vida (la comida) es apenas el 8% del salario, hace 40 años era el 40%, es uno de los niveles más bajos del mundo.

Al recortar los subsidios muchos agricultores se vuelcan a la producción de frutas y hortalizas y de esta forma hay un problema con los precios.

-¿Cuantos productores hay en Birmenstorf?

-En nuestra región hay 50 productores -que van desde las 20 a las 100 hectáreas- en un total de 2 mil hectáreas. El gobierno ayuda un poco pero no tanto. En Birmenstorf hay 5 empresas que trabajan en el procesamiento de las verduras. En nuestra zona hay muy poca agricultura porque el pueblo en superficie es muy chico.

-Volviendo a la producción, ¿Cuándo comienzas con las plantaciones?

-Las plantaciones comienzan a fines del mes de febrero y se empieza a cosechar de abril en adelante. Los meses de verano -junio a septiembre- son los más importantes. Las quintas son todas familiares, cuentan con muy pocos empleados. Nosotros en nuestra finca trabajamos especialmente con personal de Portugal, vienen por temporada por 4 meses y algunos se quedan hasta 10 meses y luego en invierno regresan a su país.

En Suiza hay varias zonas que trabajan en horticultura como la región de Verna, la Suiza-Francesa y sobre todo la zona de Zürich que es la más importante.

-En nuestro país hay problemas con los trabajadores golondrina, ¿Con qué legislación se trabaja en Europa?

-En años anteriores era complicado el tema de los contratos de trabajo, pero desde hace unos años con el tema de la Unión Europea es mucho más fácil. Es decir todos los países que pertenecen a la Unión pueden venir a trabajar a Suiza, solo necesitan un contrato de trabajo entre la firma y el empleado y luego la comuna pide el permiso a la provincia. Algunos años atrás se debía enviar toda la papelería a la oficina de inmigraciones. Los contratos se realizan con un mínimo de 4 meses.

-Por último, ¿Qué reflexión haces de nuestro país?

-Para mi este país es algo espectacular, hay kilómetros y kilómetros de campos, que producen gran cantidad de alimentos. Creo que la Argentina tiene mucho futuro sobre todo por la producción de soja, maíz y la gran demanda que hay en el mundo por estos productos. Pero no entendemos la política del Gobierno argentino de castigar a los productores, cuando se liberan las exportaciones en Suiza podemos disfrutar de la carne argentina. Últimamente como el Estado argentino cerró la exportación, Suiza debió volcarse a los mercados de Uruguay y de Brasil para satisfacer la demanda.


EN la actualidad, estamos un poco preocupados por que el Gobierno quiere abrir la frontera para que ingresen los productos del sur de Europa, que son más baratos.

Ganadería y lechería

En Suiza los productores ganaderos tienen el mismo problema que nosotros con el tema de la apertura de la frontera, hasta ahora están subvesionados por el Estado. En cuanto al precio, al productor ganadero se le paga por kilo vivo entre 6 y 8 dólares. El kilo de lomo cuesta en las carnicerías entre 60 y 70 dólares. Los productores tamberos perciben 0,70 centavos de dólar por litro de leche y el consumidor paga 1.95 dólares el litro.

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