Una molesta compañía

Es frecuente que los niños en edad escolar sufran de pediculosis. Algunas medidas simples permiten prevenir esta afección o disminuir el contagio.

TEXTOS. REVISTA NOSOTROS. FOTO. EL LITORAL.

El piojo es un insecto dotado de un aparato bucal poderoso, que usa para picar y succionar la sangre de la persona afectada. La hembra del piojo puede poner unos 200 huevos (liendres) durante su vida adulta. En el término de 3 semanas estas larvas se transformarán en insectos adultos. Poseen patas preparadas para asirse con fuerza al pelo. Cuando pican, inyectan una toxina en la piel antes de succionar la sangre, lo cual produce una intensa picazón en especial en la nuca y detrás de las orejas.

La pediculosis se contagia por contacto directo con personas parasitadas o elementos de uso personal como peine, ropas o almohadas.

UN DIAGNÓSTICO OPORTUNO Ante el síntoma de picor o picazón de la cabeza no se debe subestimar la posibilidad de sufrir pediculosis. Muchos creen que esta parasitosis sólo afecta a algunos sectores de la comunidad, lo cual no es cierto. Cualquiera que esté en contacto con una persona parasitada, puede contagiarse.

La manera de descubrir una pediculosis es revisar concienzudamente el cuero cabelludo y el nacimiento del pelo. Este examen debe ser hecho en forma ordenada, mechón por mechón. Puede usarse una lupa para ayudarse en esta búsqueda.

Las liendres son fácilmente reconocibles. Tienen la forma de pequeños conos invertidos de color blanco perlado, y se encuentran adheridas al pelo muy cerca de la raíz.

El tratamiento más sencillo para eliminar tanto a los piojos como a su cría consiste en la utilización de piojicidas que se venden en el mercado en forma de lociones o champús. Están fabricados por lo general a base de piretrinas, permetrinas y otros principios activos. Si bien su venta es -en general- libre en las farmacias y mercados, es aconsejable consultar con un profesional para que indique cuál es el más apropiado, ya que pueden provocar algún efecto secundario.

Para eliminar las liendres es necesario ablandar la capa de quitina que las envuelve y por la cual se encuentran adheridas al pelo. Los productos en venta son eficaces para después poder eliminarlas con un peine especial, con una luz muy pequeña entre diente y diente, en lo posible metálico.

Para que el tratamiento sea efectivo, se deben eliminar los piojos que puedan existir en los objetos personales. El agua caliente a 50 grados centígrados es suficiente para matarlos.

CUIDAR LA HIGIENE

El pelo corto en los varones y atado en las niñas disminuye la temperatura de la nuca, lo cual hace que los piojos no encuentren un ámbito muy propicio para habitar y reproducirse.

Existen lociones y cremas de enjuague que cambian el PH del pelo, lo cual ahuyenta a estos insectos. Es habitual que en los hogares se use para este fin el vinagre blanco luego del lavado del cabello, pero muchos niños rechazan el aroma característico que éste produce.

Otra forma de prevenir el crecimiento de piojos consiste en el uso frecuente del peine fino metálico, eficaz para eliminar no sólo los piojos adultos, sino también las liendres, y evitando el tener que usar productos químicos que pueden provocar rechazo.

Fuentes consultadas:

- www.latinsalud.com

- www.sap.org.ar (Sociedad Argentina de Pediatría)

- www.sospiojos.com.ar

EL ENTORNO

Es importante no descuidar el tratamiento de los objetos que constituyen nuestro entorno y que puedan actuar como sitio de reinfestación. Los piojos pueden sobrevivir fuera de la cabeza humana por 48 horas y las liendres permanecer viables diez días después del tratamiento con permetrina. Por eso se recomienda lavar la ropa

de uso personal y de cama con agua bien caliente, plancharla y pasar la aspiradora por muebles y alfombras. No es conveniente utilizar venenos en aerosol porque pueden generar una intoxicación colectiva del grupo familiar, además de causar otros impactos sobre el ambiente. Otra medida a tener en cuenta es el uso obligatorio de gorras de baño en piletas de natación.