Tres detenidos

Indagados por secuestro extorsivo

 

De la Redacción de El Litoral

El juez de Instrucción Séptima, Diego Andrés De la Torre, indagó la semana pasada a dos de los tres detenidos, vinculados al “secuestro extorsivo”, cometido contra el hijo de un empresario santotomesino, el 29 de diciembre de 2008. Además, se realizaron allanamientos en busca de un cuarto miembro de la banda, que se encuentra prófugo.

Personal de las Tropas de operaciones Especiales detuvo a un joven de 21 años y una mujer de 40, en una casa de Lisandro de La Torre al 2900 de Santa Fe; y en otra de barrio Las Delicias, en Sauce Viejo, respectivamente. Ambos habían sido los primeros en ser llamados a declarar el año pasado, cuando el delito que no fue denunciado por la familia, comenzó a investigarse de oficio.

Como entonces no había elementos suficientes para retenerlos, fueron dejados en libertad, mientras los investigadores continuaron trabajando para descubrir a los autores.

Oficina NN

El caso pasó de la órbita de la Justicia Federal a la provincia. Un expediente se abrió en la Ofician de Causas con Imputados No Individualizados, que dirige la Dra. María del Carmen Bertone. Allí se hicieron algunas diligencias que permitieron identificar a los supuestos responsables del secuestro y el caso pasó a Instrucción Séptima.

Este verano, el juez De la Torre mandó detener a un muchacho de 26 años, un conocido de la familia de la víctima que habría orquestado la maniobra delictiva. El joven prestó declaración indagatoria el 12 de febrero y ésta semana continuaba privado de su libertad. Igual situación atraviesan los otros dos detenidos la semana pasada.

Los tres están acusados por el supuesto delito de “secuestro extorsivo”, por el que la familia de la víctima pagó una suma que ronda los $100.000.

Un prófugo

El cuarto integrante del clan se encuentra prófugo ya que el jueves pasado la Justicia libró oficios para realizar allanamientos en Entre Ríos, cuyos resultados fueron negativos.

La víctima, un joven de 21 años, fue sorprendido por tres hombres que le cerraron el paso cuando circulaba en el BMW de su padre, en inmediaciones de Ruta Nº 11, a la salida de Santo Tomé. Entre la noche del 29 y la madrugada del 30 de diciembre de 2008, la banda negoció por vía telefónica con uno de los miembros de la familia. Esas mismas llamadas fueron las que le permitieron a los especialistas reconstruir el camino que los llevó hasta los sospechosos. La banda utilizó cuatro líneas de celulares, una de las cuales los habría dejado en evidencia.

El botín fue arrojado en un descampado de Sauce Viejo, el auto apareció en el camping municipal de Santo Tomé y el chico fue liberado un rato más tarde de cerrada la operación.