Represión ilegal

Segunda audiencia por el

juicio a “Quique” Barcos

Mañana declaran tres testigos por el secuestro de Amalia Ricotti y su ex marido, Alberto Tur. El primer turno será para Adriana Arce, quien ya declaró en Rosario, en la llamada causa Guerrieri.

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

Tres testigos están citados para mañana en el segundo juicio por la represión ilegal, que

se lleva a cabo en la capital santafesina. Se trata de Adriana Arce, activista del gremio docente de Rosario; José Luis Pagés, amigo de José Alberto Tur y periodista de El Litoral, y Ricardo Omar Scholtus, director de la empresa en la que trabajaba Amalia Ricotti.

El juicio está enmarcado en el secuestro del matrimonio Tur-Ricotti, ocurrido entre el 16 y el 31 de mayo de 1978, y tiene como imputado por los delitos de “privación ilegítima de la libertad y tormentos” al personal civil de Inteligencia Horacio Américo Barcos.

En la primera audiencia, realizada el viernes pasado en el edificio del Tribunal Oral Federal de Santa Fe, se leyó el “requerimiento de elevación a juicio”. Luego declaró la víctima y querellante, Amalia Ricotti, quien, además de reconocer a “Quique” Barcos como uno de los miembros de la “patota”, lo acusó de ser el autor de innumerables vejámenes y abusos cometidos contra los cautivos. Alberto Tur, la otra víctima, falleció el 18 de septiembre de 2003.

Una sobreviviente

En continuidad con ese relato, los miembros del Tribunal integrado por los jueces José María Escobar Cello, María Ivón Vella y Daniel Laborde le tomarán declaración este jueves a la testigo Adriana Arce.

La mujer es una de las sobrevivientes del centro de detención clandestino reconocido como Fábrica Militar de Armas Domingo Matheu, ubicada en Rosario. Por su detención en mayo de 1978, ya declaró en la llamada causa Guerrieri. En esa época, Arce militaba en el Sindicato de Trabajadores de la Educación Rosario (Sinter) y era compañera de Tur.

A propósito, relató en el juicio de Rosario que “me preguntaron mucho por Alberto Tur, que fui a ver a Santa Fe el día que me secuestraron. Él tenía un hermano en México y entonces me acusaban de que junto a Alberto Tur me ocupaba de sacar a los cabecillas de la organización afuera del país”.

Según se cree, el secuestro de Ricotti y Tur se produjo luego de que la pareja acompañara a Arce a tomar el colectivo a la terminal de Santa Fe.

Labor docente

El año pasado recordaría que le preguntaron “por mucha gente del sindicato” y que “también demostraron tener registrados todos y cada uno de mis movimientos”, con referencia a los militares que la capturaron.

Luego de una visita del general Leopoldo Fortunato Galtieri, en la que el militar le dijo que iba a vivir porque se llamaba igual que su hija, Arce fue trasladada al Batallón 121 de Rosario y en febrero de 1979, al penal de Devoto.

Su testimonio de mañana será a pedido de los fiscales Martín Suárez Faisal y Patricio Longo -coadyuvante-, y la querella que representan Horacio Coutaz y Zulema Rivera.

Los otros dos testigos propuestos por la querella son: José Luis Pagés, que era amigo de Tur y más tarde como periodista escribió artículos referidos al tema, y Ricardo Scholtus, director de la empresa Meitar Aparatos, donde se desempeñaba Amalia Ricotti.

En cuanto a Barcos, quien se abstuvo de declarar el viernes, cuenta con la asistencia legal del penalista Néstor Oroño. En cuanto a los cargos en su contra, “Quique” Barcos habría formado parte de los llamados PCI (Personal Civil de Inteligencia), dependientes del Destacamento 122 del Ejército.