Será en reunión de comisión directiva...
Unión decide hoy si
Alí deja de ser el DT
El “martillo” lo bajarán el presidente y el vice. El secreto a voces es que no sigue.
La cúpula tatengue, con Spahn y Molina, será la que asumirá la decisión final respecto de la continuidad o no del Turco Alí.
Foto: Luis Cetraro
De la Redacción de El Litoral
Los dirigentes de Unión tomarán hoy la decisión respecto de la continuidad o no de Fernando Husef Alí como entrenador del plantel profesional. Será en la reunión de comisión directiva programada para alrededor de las 20 y en la que se tratará casi con exclusividad este tema.
De acuerdo con lo que El Litoral pudo indagar esta mañana, la “bajada de martillo” la darán el presidente Luis Spahn y el vicepresidente Jorge Molina, quienes, a su vez, asumirían la conducción del fútbol profesional rojiblanco junto a un grupo de colaboradores en el que continuaría la mayoría de los miembros de la subcomisión actual.
Aparentemente, sería mayoritaria la opinión a favor de la no continuidad de Alí. Más todavía, por lo que pudo averiguar El Litoral, el que estaba dudando hasta el cierre de nuestra edición era el presidente. Seguramente, Luis Spahn debe hacer un análisis amplio, cotejando las cosas positivas (que las hubo) de la gestión de Alí con las negativas (que se dieron en la segunda parte de la temporada). Además, se trata de un hombre muy querido en el club por su condición de ídolo y porque algunos entienden que se merecería una segunda oportunidad.
En la calle, la cosa está algo repartida. Como lo señaló El Litoral ayer, hasta hace unas semanas —aún con el equipo en condiciones de entrar en la Promoción pero ya en franca caída— el hincha rojiblanco opinaba a favor de la continuidad del Turco. En ellitoral.com, un 60 por ciento entendió que Alí debía seguir siendo el entrenador en la próxima temporada.
Los nombres
Ayer, El Litoral publicó una serie de nombres que, aparentemente, estarían en un listado de posibilidades. Esta mañana, un dirigente vinculado con el fútbol rojiblanco fue terminante: “Lo único que les puedo asegurar, es que nadie de la subcomisión de fútbol profesional habló con esos técnicos ni con ningún otro. Incluso, hay técnicos en esa lista de los que ni siquiera tenemos el teléfono”.
De todos modos, se sabe que en fútbol están los que se quieren y los que se ofrecen. Y además, no se descarta que, en el caso puntual de Cuffaro Russo, por ejemplo, haya habido algún directivo que no forme parte de la subcomisión y que tomó contacto con el ex entrenador de Rosario Central.
La otra pregunta es: ¿qué hará la dirigencia en el caso de que se decida el alejamiento de Alí?, ¿se seguirá con la receta de apuntar a alguien “de la casa” o con conocimiento del club o no será una condición excluyente?
A todo esto, lo que juega a favor de la dirigencia tatengue es el tiempo: Unión volverá al trabajo el lunes 7 de junio. Faltan 21 días para esa fecha y el torneo empieza el segundo fin de semana de agosto, o sea dentro de casi tres meses. Es mucho.
/// análisis
El arco caliente
Enrique Cruz (h)
Pasó el año pasado con Roberto Battión, libre de Unión por haber jugado dos años sin contrato y campeón con Banfield. En este semestre futbolero, ocurrió con Luis Ojeda e Ignacio Canuto, campeones con Argentinos Juniors. Y si hilamos fino, hay que sumarlo a Marcelo Mosset, campeón con Olimpo y a Emanuel Trípodi, ascendido con Quilmes. Todos fueron jugadores de Unión, supieron morder el polvo de la derrota, pero el fútbol les aguardó un destino de gloria fuera de la institución. En buena hora para ellos.
El caso de Ojeda es el fiel reflejo de cómo el fútbol le puede cambiar la vida a un jugador de un momento al otro. Hace menos de seis meses, Unión resolvía cederlo a Argentinos Juniors sin cargo, porque había algo que todos parecían tener en claro: no podía atajar más en Unión.
Cada pelota que caía sobre el área de Unión era un murmullo de desconfianza y reprobación de la gente. En un arco caliente como el tatengue, el pibe tenía que rendir exámenes todos los fines de semana ante una parcialidad exigente. Hasta que se tomó la decisión final de cederlo y de buscar a alguien curtido y de experiencia como Limia.
Sergio Torres, ex entrenador de arqueros de Unión, me escribió a fin de año una carta que hice pública sin que existiera, de su parte, la intención de que así fuese. Defendía a Ojeda y a todos los arqueros de Unión, en general. No estaba equivocado. Y estoy totalmente convencido de que la misma opinión debe haber sido la de Pumpido —que le ve un gran futuro al pibe Arce, por ejemplo, que ataja en una de las juveniles nacionales— y la de Alí. Pero las circunstancias negativas para Ojeda llevaron a todo Unión a decidir la llegada de un arquero de experiencia. Y su alejamiento del club.
Todo es relativo en fútbol. Nery fue el mejor arquero que dio Santa Fe en la historia; sin embargo le costó dos o tres años afianzarse en la primera de Unión y aprendió de la experiencia de arqueros que llegaron al club para ser titulares, como “Perico” Pérez, el “Mono” Irusta y Carlos Ángel Biassutto. Ojeda, con su inexperiencia y juventud, se fue de Unión para terminar atajando —es cierto, por lesión del titular— varios partidos en el Argentinos Juniors campeón de Primera División. Y lo hizo muy bien.
Es muy difícil, en fútbol, tener el don de la paciencia. Pero habrá que entender muy bien estos ejemplos que, es cierto, son individuales y hasta aislados, pero que marcan una tendencia: los jugadores se van de Unión, andan bien en otros clubes y hasta se dan el lujo de ser campeones.
