Empalado y con el cuero cabelludo arrancado

Un crimen monstruoso a la vera del Jockey Club

La víctima es un hombre de entre 30 a 45 años. Lo empalaron, le introdujeron una botella en el pecho y le arrancaron el cuero cabelludo.

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El cuerpo apareció flotando en aguas del reservorio ubicado a un costado de la avenida de Circunvalación Oeste.

Foto: Danilo Chiapello

 

Danilo Chiapello

dchiapello@ellitoral

“En 30 años de servicio jamás vi algo igual”. La frase corresponde a un veterano investigador que no salía de su asombro mientras observaba la truculenta escena.

El hecho quedó al descubierto hoy, poco antes del mediodía, cuando un vecino que caminaba en cercanías del campo de golf del Jockey Club advirtió algo anormal.

El cuerpo de un hombre flotaba sin vida en aguas de uno de los reservorios ubicados al fondo de calle Gorostiaga, al costado del hipódromo de Las Flores.

En cuestión de minutos el lugar se llenó de policías y patrulleros.

Odio y furia

Hasta aquí nada había sobresaltado la atención de los investigadores. Era un caso más de homicidio.

Sin embargo, al cabo de un rato, los rostros comenzaron a marcar muestras de asombro. Estaban ante un hecho de características monstruosas.

De la víctima se supo que es hombre, de entre 30 a 45 años. Tenía barba de unos cinco meses. También que antes de su muerte fue objeto de las más horrendas vejaciones. A saber: presentaba un profundo corte en medio del pecho, pero lo que es peor aún es que alguien le introdujo una botella dentro de la cavidad torácica. Además fue empalado vía anal. Su cuero cabelludo había sido arrancado desde la nuca hasta la frente.

Casi sin cabeza

La demencial faena incluyó además golpes, los que determinaron la pérdida de todas las piezas dentales.

Para dar una idea de lo que le significó semejante castigo podemos citar otra reflexión de uno de los pesquisas: fue golpeado tan duramente que parece que no tiene cabeza.

Semejante cuadro dificultó sobremanera cualquier intento de identificación.

El cuerpo fue encontrado flotando en aguas del reservorios. Estaba boca arriba y con sus brazos en cruz. Tenía puesta una especie de camperita de tela de avión, desprendida, color roja.

No se apreciaron heridas de arma de fuego como así tampoco de arma blanca.

Pesquisas que estaban en el lugar opinaron que para semejante acción fue necesaria la intervención de entre 3 a 4 personas.

Es de hacer notar que la zona donde fue encontrado el cadáver es de poco tránsito en horario nocturno. Mucho más durante la madrugada, que es cuando se cree que se concretó el homicidio.

A poco de observar el lugar, los investigadores arribaron a algunas conclusiones. Por ejemplo que en los instantes previos al final, la víctima fue sometida a un castigo atroz.

Lo arrastraron

Las prendas del infortunado quedaron tiradas en distintos sectores, todas bañadas en sangre. En los montículos de tierra había evidencias de que el cuerpo había sido arrastrado.

Como es de rigor, los policías tomaron contacto con los vecinos de la zona (los más cercanos se ubican a unos 50 metros) aunque, como suele ocurrir, “nadie vio ni escuchó nada”.

No obstante trascendió que los investigadores ya contarían con un valioso testimonio que dio cuenta sobre el movimiento de personas a la hora del suceso.

Dadas las características del caso, concurrieron los titulares de las distintas agrupaciones, junto a agentes de la 5a. Zona de Inspección; Policía Científica y los demás peritos especializados. Todos trabajaron de manera conjunta bajo la supervisión del jefe y el subjefe de la Unidad Regional I, comisarios José Troncoso y José Rodríguez, respectivamente, que llegaron al sitio.

Consultado al respecto uno de los pesquisas indicó que “jamás vi algo igual. Un hecho en que se haya actuado con tanta saña y alevosía”.

Pasado este mediodía, el cuerpo había sido llevado hasta la morgue judicial donde se realizaban las tareas para proceder a su identificación.


Un crimen monstruoso a la vera del Jockey Club

Gran cantidad de pesquisas recorrieron palmo a palmo el sector en busca de algún elemento que conduzca a los autores del hecho.

Foto: Danilo Chiapello

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Las prendas de la víctima fueron halladas en distintas partes, al igual que varias piezas dentales.

Foto: Danilo Chiapello