En 2012 se eliminaría la rabia en las Américas

Directores nacionales de rabia de 20 países de la región concluyeron, en Buenos Aires, que la enfermedad transmitida por el perro podría ser eliminada para 2012. El año pasado hubo 11 casos en humanos y se podría llegar a cero en dos años reforzando la vacunación masiva de perros.

TEXTOS. INFORMACIÓN PÚBLICA OPS/OMS EN ARGENTINA. foto, el litoral.

Once casos en 2009
 

Las Américas están a punto de lograr la eliminación de la rabia humana transmitida por el perro, una enfermedad que en el mundo causa alrededor de 55.000 muertes al año, consideraron recientemente en Buenos Aires expertos de 20 países de la región, al finalizar la 13º Reunión de Directores de Programas Nacionales de Rabia de Latinoamérica (Redipra 13).

Durante tres días, representantes de Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Uruguay, Venezuela, entre otros, analizaron estrategias para eliminar la rabia y la leishmaniasis canina en la región.

El encuentro fue organizado por la OPS/OMS, el Ministerio de Salud de Argentina, el Senasa, la Organización Mundial de Salud Animal (OIE), el Instituto de Zoonosis Luis Pasteur y la Asociación Argentina de Zoonosis.

“Los casos de Bolivia, El Salvador, Guatemala, Haití y la República Dominicana, que se caracterizaban por una incidencia de rabia canina y humana, están hoy superando enormes desafíos y lograron en 2010 alcanzar el logro que nos permite ver como realidad que en 2012 no haya más casos humanos de rabia transmitida por el perro”, afirmó Fernando Leanes, coordinador de Zoonosis en el Centro Panamericano de Fiebre Aftosa (Panaftosa), de la OPS/OMS.

Actualmente, todos los países de la región eliminaron la rabia humana o están ejecutando planes masivos de vacunación de perros y reforzando la atención de expuestos. “En 2010, por primera vez en la historia, se da la situación de que todos los Estados están en el camino de llegar a cero casos de rabia en corto plazo”, celebró el asesor en Salud Pública Veterinaria de la OPS/OMS, Celso Rodríguez.

Sin embargo, el desafío mayor será sostener el logro. “Es conocido que cuando no hay casos humanos de rabia los controles se relajan. Varios países vivieron esta amarga experiencia”, indicó Leanes. Y agregó: “Si hay rabia canina, en dos o tres años habrá un caso de rabia humana, según muestran nuestros registros. Es necesario trabajar en el control de la población canina, su tenencia y tránsito, y en comunicación y educación hacia la comunidad”, evaluó.

EN NUESTRO PAÍS

En Argentina, el último caso de rabia humana se registró en 2008 y las notificaciones de casos de rabia canina muestran una tendencia descendiente: 26 casos en 2008, 6 casos en 2009 y 1 caso en lo que va de 2010. Se registraron en las provincias de Jujuy (78,8% de los casos), Chaco y Formosa, además de casos accidentales relacionados con murciélagos en Buenos Aires y Córdoba.

Horacio Echenique, director de Epidemiología del Ministerio de Salud de la Nación y elegido presidente de la Redipra 13, señaló que “para eliminar la rabia en el país necesitamos 1,8 millones de dosis de vacunas entre 2010-2011 y apoyo técnico y financiero en campañas nacionales de vacunación”.

Para Charles Rupprecht, jefe del programa de rabias del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Atlanta, Estados Unidos, el éxito de la eliminación de la rabia en las Américas responde a la vacunación masiva y la profilaxis. “Esto es una lección de Latinoamérica al mundo”. África y Asia son los continentes más afectados por la enfermedad, con 45 mil de los 55 mil casos anuales registrados.

ACCIONES CONTINUAS

Según el documento Oportunidades para Invertir en la Eliminación de la Rabia Humana en las Américas, “la eliminación de la rabia transmitida por el perro se logra si se sostiene alta cobertura de vacunación de perros por dos años consecutivos, mediante campañas masivas de vacunación y revacunación, alerta en la población sobre el peligro de la rabia y adecuada atención de los expuestos”.

Consiste en la articulación de esfuerzos entre países, junto a los organismos internacionales y los donantes para lograr en el corto plazo el fortalecimiento institucional y de los recursos humanos para la ejecución efectiva de los programas nacionales de control de la rabia.

Se prevé el fortalecimiento de los mecanismos de aprovisionamiento de insumos esenciales (especialmente vacunas), de los programas nacionales, de la sostenibilidad y la comunicación de riesgo, y de la coordinación, el monitoreo y la investigación. La propuesta incluye apoyo para la provisión de vacunas a fin de cubrir el déficit en algunos países, que pueden obtenerse a través del Fondo Rotatorio de la OPS/OMS.

Los países buscarán ahora fortalecer sus capacidades para dar sostenibilidad al logro de la eliminación de la rabia humana transmitida por el perro, prevenir y vigilar la rabia transmitida por otras especies y, de manera transversal, establecer alianzas para controlar los riesgos para la salud pública producidos por el perro, como la leishmaniasis.

En Argentina, el último caso de rabia humana se registró en 2008.

En el mundo

Once casos en 2009

La rabia es una enfermedad fatal pero prevenible mediante vacunación. La rabia humana es transmitida por el perro, que es el principal transmisor y reservorio de esta enfermedad.

En 1983, cuando la OPS/OMS inició el programa de Eliminación de la Rabia Humana Transmitida por el Perro, “se registraban más de 300 casos de rabia humana y los sistemas de vigilancia y notificación eran débiles”, recordó el representante de la OPS/OMS en Argentina, José Antonio Pagés.

Sin embargo, advirtió que “gracias a la articulación y la cooperación técnica de la OPS/OMS y el Centro Panamericano de Zoonosis (CEPANZO), los países iniciaron campañas de vacunación que permitieron una sostenida reducción de la incidencia de casos de rabia humana y canina”. Y la disminución de casos fue notoria: en 2009 se registraron 11 casos de rabia humana transmitida por el perro.