En Santa Fe circulan desde 1932
Se conmemora el Día del Colectivo
Al mando de la unidad de la Línea 2, Susana Salas se abre paso en un ambiente al que califica como “machista”.
Foto: Guillermo Di Salvatore
Hace 82 años apareció uno de los inventos nacionales más reconocidos. Hoy, en todas las ciudades, es un servicio fundamental.
De la Redacción de El Litoral
El 24 de septiembre de 1928 irrumpe en escena de la ciudad autónoma de Buenos Aires el invento argento con trascendencia mundial: el colectivo. Cuatro años más tarde, desde la plaza España de Santa Fe, estrenaba el servicio público.
Susana Salas es rubia, usa gafas para sol enormes y tiene los labios pintados de rosa. No es la “diva de los teléfonos”, sino que maneja desde hace 13 años un coche de la Línea 2. Seguramente, en alguna etapa de su recorrido se cruza con Sergio Gómez, colectivero de la Línea 8. Ambos coinciden en que andar en colectivo por Santa Fe no es una tarea sencilla.
“En todo este tiempo la calle cambió mucho, sobre todo la cantidad de tránsito; hay que estar con mil ojos acá arriba porque la gente se cruza, y las motos y las bicicletas son un peligro. Sin duda se maneja peor”, cuenta Susana, mientras estaciona la unidad después de ocho horas de labor. De su trabajo rescata el vínculo con la gente: “Mi pasaje es muy amable, sobre todo el del barrio (El Pozo donde está la parada) que me conocen desde hace muchos años”.
Sergio abre la puerta del coche de la Línea 8 y mira con desconfianza la cámara. A las 8.30 el colectivo circulaba atestado de pasajeros por calle Pedro Vittori.
“Hace 25 años que hago esto; me gusta pero no es fácil. En tanto tiempo la calidad del trabajo y el servicio mejoró muchísimo. Lo que es complicado es el tráfico de la ciudad”, contó Sergio.
En el tiempo
En Santa Fe, las primeras unidades comenzaron a circular en 1932, desde plaza España y hasta la localidad de San José del Rincón. En 1935 se inauguró la “Línea G”, y el transporte público por colectivos se volvió la única alternativa masiva en la ciudad, el 30 de abril de 1961, cuando dejaron de circular los tranvías eléctricos.
Desde las empresas prestadoras del servicio -Transporte San Gerónimo, Empresa Recreo y Línea 18- recordaron para la ocasión que, en sus comienzos, los colectivos “llevaban cinco pasajeros, salían cada 4 minutos y no se entregaba boleto, se pagaba al bajar, como en el taxi. El recorrido estaba pintado en un simple tablero de madera sobre el parabrisas”.
