LLEGA LA PRIMAVERA Y TODOS QUIEREN HACER DEPORTE

Pasar del sedentarismo a la actividad física tiene sus riesgos

Los especialistas coinciden en la falta de prevención de mucha gente. La Costanera, el Parque del Sur y el Parque Garay son los lugares preferidos para caminar, andar en bicicleta y poner el cuerpo en movimiento.

Pasar del sedentarismo a la actividad física tiene sus riesgos

La actividad física mejora la calidad de vida: aumenta la resistencia a la fatiga e incrementa la capacidad para el trabajo físico y mental; ayuda a combatir la ansiedad, la depresión y el estrés mental; mejora la capacidad para conciliar el sueño; provee una manera sencilla para compartir actividades con amigos y familiares contribuyendo a mejorar aspectos sociales, entre otras ventajas.

 

Ignacio Andreychuk-Agustina Mai

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Cada año es igual. Con la llegada de la primavera, aquellos que no movieron el cuerpo durante meses se deciden a mejorar su condición física a través de la práctica deportiva. Pero muy pocos se cuidan y toman las precauciones necesarias. ¿El resultado?, la aparición de lesiones musculares, ligamentarias (entre las más comunes) y hasta el riesgo de encontrar un problema cardíaco grave.

Caminar y correr son las actividades más realizadas. Otros optan por salir en bicicleta o en rollers. Los más aventureros se animan a practicar deportes acuáticos, como kitesurf y remo, sobre todo los fines de semana.

Sin embargo, los especialistas advierten que el deporte no siempre significa salud. El sedentarismo, la falta de acostumbramiento al desempeño físico y el agobio diario son algunos de los factores que detonan la necesidad en las personas de hacer algo con su cuerpo. Sucede que una práctica, aunque sea recreativa, constituye un riesgo traumatológico o cardiovascular si no se realiza a conciencia.

El médico Eduardo Julio Wagner indicó al respecto que “muchos viven la llegada de la primavera como el comienzo de la cuenta regresiva hacia el verano y el remordimiento de haber descuidado el cuerpo durante los últimos nueve meses”.

Asimismo llamó a la reflexión: “Es muy importante para la salud y el bienestar personal realizar alguna actividad física, pero siempre hay que recordar que el objetivo es hacerla para estar mejor. Esto significa que en ciertos casos se debe realizar con un previo control médico”.

Por su parte, el profesor Jorge Fabián Defagot, licenciado en Kinesiología y Fisioterapia, reforzó la idea al explicar que “la mayoría de gente no hace una preparación previa para los deportes de fin de semana y no se entrena para esa práctica. Muchos creen que por jugar en un rato libre están haciendo algo saludable y, en realidad, eso no es salud sino todo lo contrario. La mayoría de las personas que hacen estos ejercicios aislados, sin la preparación adecuada, se lesionan las rodillas, aparecen con lumbalgia y muchas cosas más. Pero todos los casos resultan igual, por la misma causa”.

Riesgos en puerta

El kinesiólogo detalló las dos complicaciones que pueden presentarse ante un descuido de estas características. “Existen los riesgos de carácter traumatológico y cardiovascular. En lo primero, se ven más casos en las partes blandas, que son ligamentarias o musculares. Los casos más comunes son los desgarros, las afecciones ligamentarias y meniscos”, aseguró.

Pero pocos “deportistas golondrinas” toman los recaudos pertinentes para salir a hacer ejercicios. Arrancan la actividad con los primeros calorcitos de esta época, sin haber hecho nada constante durante el año.

“Este lunes, empezamos a salir a caminar. Estamos gordas y nos queremos poner bien para el verano. Aprovechamos la tarde, así de paso tomamos un poco de sol mientras hacemos ejercicio”, comentó Ana. “La idea es salir todos los días. Recién empezamos, pero esperamos poder mantener el ritmo”, acotó su amiga Julia. En estos casos, lógicamente que el riesgo no es alto.

La cuestión se agrava cuando aparece una competencia y aumenta la intensidad. “No entran bien en calor más allá de no realizar la actividad previa, como ir al gimnasio o un entrenamiento durante la semana para luego competir el fin de semana, porque en realidad la mayoría compite y no se lo toma con tanta tranquilidad”, indicó Defagot.

Otras desatenciones que comenten quienes empiezan una actividad física son la flexibilidad anterior y la elongación final, algo que hacen muy pocos. “Ésos son los principales métodos preventivos. Lo otro es lo invisible: son los entrenamientos sin la actividad propiamente dicha, es decir, el cuidado que hay que tener al momento de alimentarse, hacerse estudios e hidratarse correctamente. Los peligros como el sobrepeso y la presión, por ejemplo, forman parte de los riesgos cardiovasculares, que es lo más importante. Estas cuestiones están mucho más controladas en los deportes de alto rendimiento que en los recreativos; pocos tienen una prevención para realizar la actividad física”, precisó.

Destinos y testimonios

Si bien cualquier espacio verde es un buen lugar para poner el cuerpo en movimiento, hay tres puntos más concurridos: la Costanera, el Parque del Sur y el Parque Garay, aunque el primero parece ser el clásico de los santafesinos.

Pasado el mediodía, ya se pueden ver algunas personas haciendo ejercicio en la Costanera. La cantidad de gente va aumentando durante la tarde, hasta el anochecer.

Cristina aprovecha el paseo

/// BENEFICIOS

La Costanera

es uno de los lugares elegidos por los santafesinos para hacer ejercicio al aire libre.

Foto: Luis Cetraro

con su perra para ejercitarse un poco: “Vivo cerca, así que vengo a caminar tres veces por semana y al gimnasio dos veces”.

Susana y Robertina son madre e hija. Ellas salen a caminar bajo el cálido sol. “Vamos al gimnasio y caminamos cuando podemos, porque yo trabajo y ella estudia”, explicó la mamá. María Soledad y Jorge son jubilados. Para ellos, poner el cuerpo en movimiento es una cita obligada todos los días del año. “En invierno, venimos más temprano, después de la una del mediodía”, aclaró la mujer. “Vivimos en Las Flores II, pero todos los días agarramos el auto y nos venimos hasta la costa, porque es como el patio de nuestra casa”, se río él. En promedio, caminan unas 60 cuadras por día.

/// opinión

Hay que tomar precauciones

Dr. Adrián J. Modotti (*)

Los riesgos más frecuentes de la actividad física y los deportes están relacionados con las lesiones musculares, óseas y articulares. Estos eventos ocurren, por lo general, cuando el ejercicio es demasiado intenso para esa persona o bien cuando se comienza un deporte después de mucho tiempo de inactividad.

Es necesario tomar ciertas precauciones destinadas a la prevención de este tipo de lesiones. Uno de los puntos más importantes se relaciona con el período de calentamiento previo al inicio de la actividad y la “vuelta al frío” antes de suspenderla.

También es de suma importancia no imponerse metas demasiado exigentes para los primeros tiempos de la actividad. Esto lo llevaría a realizar ejercicios bruscos y muy intensos que pueden producir lesiones.

No es conveniente continuar con el ejercicio si existen dolores musculares o articulares. Lo mejor es suspender la actividad por lo menos hasta que un médico aconseje al respecto.

En cuanto a los síntomas que indican la presencia de una indisposición cardíaca, el dolor en el pecho, cuello, brazo u hombro izquierdo es uno de los más importantes; la palidez; transpiración fría; palpitaciones y la súbita debilidad o la falta de aire no deben ser ignoradas.

Ante la presencia de estos síntomas es necesario detener el ejercicio y consultar al médico.

(*) Médico de familia, medicina del deporte (mat. prof. 4407).

Recomendaciones

Examen. Hacer una consulta médica previa. Consta de tres partes: historia clínica y deportiva, la prueba física general y un electrocardiograma.

Programa. El comienzo de los ejercicios debe tener una intensidad que le permita mantener una conversación. Alternar días de trabajo prolongado con otros más suaves.

Nivel. No incrementar el esfuerzo a menos que note que ya no se fatiga con el que está realizando. Aumentar la duración del ejercicio en forma gradual, no más de 5 minutos por semana.

Sentidos. Escuchar al cuerpo y prestar atención a las propias sensaciones para no caer en un estado de fatiga crónica.

Períodos. Respetar los lapsos de recuperación o descanso, ya que forman parte del entrenamiento.

Nutricionista. Aquellos pacientes que tengan sobrepeso o una alimentación inadecuada deben realizar una consulta nutricional.

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