Y VOS... ¿EN QUÉ ANDAS?

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Mario Florencio Vigo

Presidente del Santa Fe Lawn Tennis Club.

 

 

EN UN MERCEDES BENZ C 230 CUPÉ

—¿Lo adquirió por gusto o fue un buen negocio?

—Por las prestaciones que sabía que tiene y, además, por las condiciones excepcionales del leasing del año 2006.

—¿Qué es lo que más le gusta del vehículo?

—Lo que más me gusta es la música de los 6 cilindros en V cuando regula y más cuando se lo exige. Además, lo divertido de manejar con la caja de siete marchas con levas al volante y su estabilidad bajo cualquier condición.

—¿Tuvo alguna vez alguna anécdota curiosa, como dejar llaves adentro?

—Varias veces he olvidado dónde lo dejé estacionado, sobre todo en esas inmensas playas de estacionamiento del exterior donde uno está seguro que lo dejó guiado por alguna señal que luego se ve igual de varios lados.

—¿Cuál fue su primer auto?

—Un Fiat 600 modelo 1970, año en que me recibí.

—¿Alguna vez tuvo algún desperfecto que le generara ganas de deshacerse de él?

—Si el auto tiene hecho sus services en tiempo y forma por el concesionario oficial, no debería tener desperfectos y, si los tiene, considero que no hay que repetir esa marca.

—¿Le es fiel a la marca que utiliza ahora?

—Es la primera vez que tengo un auto de esta marca.

—¿Es de maltratarlo o lo cuida mucho?

—El vehículo está a mi servicio y recibe el tratamiento apropiado para ser vendido como bien cuidado.

—¿Qué consejo les daría a los automovilistas comunes para manejar en la calle?

—El número de autos vendidos en los últimos años impresiona realmente y vemos a diario cómo las calles cada vez se saturan más. Si a eso le sumamos la falta de respeto, de educación vial y de consideración a terceros de aquellos que estacionan en avenidas de tránsito rápido hasta en cuatro filas, en zonas prohibidas, arriba de las veredas, etcétera, generamos una anarquía que va a ser difícil de superar. La iniciativa municipal de controlar la velocidad es buena y los accidentes creo que van disminuyendo. Debería haber una presencia más activa y permanente de inspectores en zonas conflictivas para que el acatamiento que tiene el cinemómetro sea copiado en los rubros que señalo. Da la impresión de que la labor se limita sólo al control del estacionamiento medido o de la alcoholemia.