Furia homicida

Asesinó a su mujer, también a la suegra y un policía lo mató

Télam

El hijo del hombre que ayer tras matar a su ex esposa y a su ex suegra, fue ultimado a tiros por la policía en General Rodríguez, le había pedido por favor a su padre que no les hiciera nada a su madre y a su abuela, aunque el hombre igual cometió los ataques, informó hoy un familiar de las víctimas.

“El nene le pide por favor que no les haga nada; me contó que le había pedido al padre que no les haga nada pero igual pasó”, contó esta mañana a la prensa, Jorge, hermano e hijo de las mujeres asesinadas.

El hombre contó que su sobrino no quiere hablar de lo sucedido, que sólo le comentó eso y confirmó que el chico salió de la casa tras los ataques.

Según Jorge, su hermana se había ido a la casa de su madre tras discutir con su esposo.

“Mi hermana, al estar mal con él, se viene acá, a la casa de mi mamá y el viene”, recordó.

Según el familiar, el agresor, Mario Elizalde, de 49 años, tenía armas, aunque ignora si estaba autorizado para portarlas.

“Ataca a mi hermana y creo que también a mi mamá tal vez para no dejar evidencia, no sé”, añadió el Jorge conmocionado.

El hecho sucedió ayer pasadas las 20.30 cuando Elizalde, un ex empleado del Hospital Vicente López y Planes, ingresó armado a la casa de su ex suegra, Marta Peñalba (68), situada en Vuelan y Solanet, de General Rodríguez, donde se encontraban su ex esposa, Silvia Morañán (50) y su hijo de 12 años, ya que otro mayor no se hallaba en el lugar.

Según dijeron fuentes policiales a Télam, Elizalde saltó una reja y golpeó la puerta pidiéndole a su ex mujer que saliera a explicarle por qué “lo había engañado con otro hombre”.

Al no tener respuesta, Elizalde se fue y al poco tiempo regresó armado con una pistola calibre 11.25 (45).

Según los voceros, el hombre entró a la casa y atacó a balazos a su ex esposa y a su ex suegra, quienes cayeron muertas de al menos dos impactos en el rostro y en el abdomen cada una.

En la casa se encontraba el menor de los hijos de la pareja que, tras pedirle en vano a su padre que no hiciera nada, logró huir por una ventana y corrió hasta la casa de un vecino para pedir auxilio.

Tras cometer los asesinatos, Elizalde salió de la casa empuñando la pistola y al ser sorprendido por un móvil policial de la comisaría 1ra. intentó escapar efectuando disparos contra el policía.

Los efectivos también dispararon y mataron a Elizalde de dos tiros, según las fuentes consultadas.