Reclamo de la ONU

Piden a Estados Unidos que

investigue torturas en Irak

De la Redacción de El Litoral

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DPA

La alta comisaria de Naciones Unidas para Derechos Humanos, Navi Pillay, llamó a los gobiernos de Washington y Bagdad a investigar las acusaciones de torturas y asesinatos durante la guerra de Irak tras la publicación en la web Wikileaks de documentos clasificados sobre el conflicto.

En un comunicado colgado hoy en la página web de la ONU, Pillay afirmó que Estados Unidos tenía conocimiento de las torturas de presos a manos del Ejército de Irak, y aun así, puso a disposición de los iraquíes miles de prisioneros entre 2009 y 2010.

El fin de semana pasado Wikileaks publicó en su web casi 400.000 documentos sobre la guerra de Irak. De acuerdo con Pillay, las informaciones apuntan a una grave ruptura del derecho internacional y a que un gran número de civiles fueron ejecutados sin vacilar.

Tras la publicación de informaciones acerca de atrocidades cometidas contra civiles iraquíes, el gobierno de Estados Unidos calificó los incidentes de asunto interno de Irak.

El portavoz del Departamento de Estado norteamericano, Philip Crowley, dijo el lunes que si las revelaciones de Wikileaks hacen necesaria la apertura de investigaciones, el primero en explicar “qué trato dio a sus civiles” debería ser el gobierno iraquí. Aseguró asimismo que el asunto había sido abordado ya con el Ejecutivo en Bagdad.

La plataforma de revelaciones Wikileaks sacó a la luz casi 400.000 actas secretas estadounidenses sobre la guerra en Irak. Estas dejan entrever que las fuerzas de seguridad y policiales iraquíes cometieron masivamente crímenes de guerra como ejecuciones, torturas y otro tipo de maltratos. Algunos de los documentos permiten deducir también que las tropas estadounidenses sabían de las atrocidades.

En tanto, fuentes militares y de los servicios de inteligencia de Estados Unidos se mostraron escépticas respecto al éxito de la reciente ofensiva contra los talibanes en Afganistán, informa hoy el diario “The Washington Post”.

Varios oficiales citados por el rotativo consideran que ni siquiera las ofensivas a gran escala han conseguido golpear de forma considerable a la insurgencia.

La ampliación de los ataques aéreos y las operaciones de comandos especiales, por ejemplo, debilitaron sólo a grupos talibanes locales, que además se habrían recuperado rápidamente de los reveses.

Los líderes talibanes abatidos o capturados son sustituidos poco después. Los insurgentes, estima el rotativo, se repliegan temporalmente en caso de ataques y saben esperar al momento adecuado para volver a operar.