¿Qué puedo regalar en Navidad?

Pedro Zukas

Si está pensando en el regalo perfecto, quizás le interese alguna de estas ideas. No cuestan dinero, son originales y dirán mucho de su generosidad.

Puede dedicar parte de su tiempo a acompañar a personas mayores, enfermos, niños hospitalizados. Como madre o familia sustituta.

¿Otra forma?

Eduardo se encontró un poco desganado sin fuerzas. Un simple análisis de laboratorio dio en la tecla: anemia, tenía menos glóbulos rojos que los necesarios para vivir bien. ¿La causa? Su fábrica de células de la sangre, la médula ósea, se había enfermado. No quería trabajar más. Había que reemplazarla por otra. Sana y compatible. La familia: varios hermanos. Gloria dijo presente y se produjo el reemplazo. Pasaron más de 13 años. Ambos gozan de muy buen salud.

¡Ah me olvidaba! Antes del trasplante Eduardo necesitó 40 transfusiones de sangre... sino, no llegaba.

Mamá donante

Cecilia se encontró con que una de sus hijas, Rocío, estaba como Eduardo, sin ganas de hacer nada, ni jugar, ni estudiar. También apareció en un análisis de sangre la causa de aquellos síntomas: anemia. Costó un poco encontrar la causa.

No era la médula ósea que fallaba. Estaba sana. Pero para fabricar los glóbulos rojos necesita una ayuda, un estímulo. Se llama eritropoyetina.

¿Quién la fabrica? Los riñones. Ellos estaban enfermos en Rocío. Pero muy enfermos. Iban a funcionar poco tiempo más.

Pensar en la diálisis ¿Y el trasplante? Ahí apareció mamá Cecilia dispuesta a donarle uno de sus riñones.

Se hicieron los estudios de Compatibilidad (Grupo Sanguíneo y HLA) el documento de identidad biológico, debe ser muy parecido.

Ya pasaron cinco años y ambas están muy bien.

“Dicen que esto nos mantendrá unidas toda la vida, que le di la vida dos veces. Lo volvería a hacer con los ojos cerrados si fuera necesario”.

Para los cristianos que festejamos en la Navidad el cumpleaños de Jesús, un regalo como los propuestos lo pondría muy contento: “Lo que le hagan a mis hermanos es como si me lo hicieran a mí”.