Sobre la avenida Mar Argentino

En julio, un puente peatonal unirá Centenario y Varadero Sarsotti

La obra comenzará a construirse en abril, y en cuatro meses estaría concluida. Dará más seguridad vial en una zona crítica por los accidentes de tránsito. Vinculará dos zonas de importante crecimiento poblacional.

De la redacción de El Litoral

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A partir de abril comenzará a construirse un nuevo puente peatonal sobre la avenida Circunvalación Mar Argentino, que unirá a dos barrios del oeste de la ciudad: Centenario y Varadero Sarsotti. La obra se construirá en cercanías del área conocida como el “rulo de Cilsa”, cerca de la rotonda que colecta a calle Rodríguez Peña (ver mapa), y para julio estaría concluida, según la estimación oficial. Permitirá un cruce seguro a los vecinos de la zona -quienes a diario atraviesan la vía a pie-, en una zona que se ha vuelto crítica por los frecuentes accidentes de tránsito.

El presupuesto oficial es de 1.793.576 pesos. Durante la licitación -realizada en enero- se presentó un solo oferente (Premoldeados San Luis S.A), que cotizó su oferta en 1.928.771 pesos, monto que se mantiene dentro de los márgenes previstos por ley para su adjudicación. “De no mediar inconvenientes y tras el proceso administrativo de adjudicación y evaluación, se firmaría el contrato. Desde abril y en un plazo de cuatro meses se ejecutaría el nuevo viaducto peatonal”, dijo a El Litoral el Ing. Rafael Pretto, Jefe del 7º Distrito de Vialidad Nacional.

Entre uno y otro extremo, el puente contará con una longitud de 178 metros; no tendrá escalones sino rampas de acceso, con lo cual se permitirá el paso de peatones con bicicletas y personas con discapacidad motriz. Incluirá barandas de protección, un tejido perimetral sobre el propio viaducto y un vallado especial que desaliente el cruce en el lugar sin utilizar el puente. Será una obra de rápida ejecución, porque se construirá “en seco”: salvo las bases de hormigón, vigas y columnas se hará en un obrador (premoldeado), y ya elaboradas se llevarán al lugar para el montaje final.

Seguridad

“Es una obra de seguridad vial y social. Pues tengamos en cuenta en Centenario hay entidades, una escuela, clubes, mucha actividad comercial. Este viaducto peatonal dará respuesta a una necesidad de los vecinos de ambos barrios”, dijo el funcionario. “El flujo de automóviles es muy importante y el área se ha vuelto un punto crítico por los accidentes de tránsito. Por esto la obra adquiere tanta relevancia: garantizará un cruce seguro a los peatones”, destacó el ingeniero.

¿La gente respeta el uso de los puentes peatonales? Pretto recordó la experiencia del puente del Walmart, “que no era utilizado para el cruce. Así se sucedieron muchos accidentes fatales. Hay una cuestión cultural que es difícil de revertir. Por eso se pondrán vallados que obliguen a que la gente a cruzar por el puente, por su propia seguridad”.

OTRA MIRADA /// ESPECIAL PARA EL LITORAL

Un sector marginado

Arq. Carlos Borra (*)

El puente peatonal sobre la Av. Mar Argentino unirá dos realidades diferentes.

De un lado, el barrio Centenario, una zona urbanizada, organizada y que cuenta con servicios, más allá de la pobreza que se extiende en sus márgenes.

Del otro lado, Varadero Sarsotti, una especie de polígono poco conocido por la mayoría de los santafesinos en el que se expresan crudamente la pobreza y la indigencia de manera conmovedora.

Según el Censo 2001, en este sector vivían aproximadamente 2.600 personas (los datos del Censo 2010 no están aún disponibles), lo que representaba un incremento del ciento por ciento con relación al Censo de 1991. Mientras el resto de la ciudad había crecido poco más del 5%, la población de Varadero Sarsotti se había duplicado.

Sin embargo, alrededor del 50% de esos habitantes tenían menos de 14 años. Es decir que, los que pueden, abandonan el lugar y sólo quedan aquellos muy chicos o quienes no logran escapar de la miseria.

El barrio creció sobre el viejo lecho del río Salado, donde se construyeron terraplenes para proteger la estructura de encuentro entre la Av. Mar Argentino y el Puente Carretero. Estos terrenos fueron usurpados por gente que no tenía dónde vivir. Durante 2003, soportó la crecida del Salado y sólo se inundó durante algunos días por el agua de lluvia.

La zona necesita ser incluida y organizada desde lo urbanístico y desde lo sociocultural. Es imprescindible avanzar en la integración, porque esa gente se fue asentando en torno de la basura. El nuevo puente servirá de mucho.

(*) Actual secretario general de la UCSF. Siendo docente de la Facultad de Arquitectura, estudió en profundidad las características de Varadero Sarsotti.