Editorial

La Nación evade compromisos previsionales

Una decisión administrativa del Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación, Aníbal Fernández, luego modificada por el director de la Oficina Nacional del Presupuesto, actualizó una de los tantos compromisos no cumplidos por el gobierno nacional para con la provincia de Santa Fe.

Se trata del acuerdo firmado en el momento en que la provincia decidió no transferir la Caja de Jubilaciones y Pensiones a la órbita nacional y por el cual la Nación asumió el compromiso de solventar el déficit de ese organismo, previa armonización de los sistemas.

Habrá que recordar que ese momento coincidió con la decisión de la Nación de permitir la participación del sector privado en el sistema previsional creando las administradoras de jubilaciones y pensiones (AFJP) y por el cual las provincias -pacto fiscal mediante- cedieron el 15% de la masa coparticipable para permitir la continuidad del pago a pasivos nacionales.

En su momento, Santa Fe fue adecuando su legislación previsional especialmente en materia de edad para ponerla en sintonía con el sistema nacional. Y el gobierno central, a través de Anses, cumplió hasta 2006 con las remesas correspondientes.

A partir de 2007, el giro de los fondos se cortó sin explicaciones pese a los reiterados reclamos de los gobiernos de Jorge Obeid y Hermes Binner. Es más, frente a la falta de respuesta, Santa Fe llevó su reclamo ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación a fin de que, debido al incumplimiento del gobierno central, se le deje de descontar de la masa coparticipable los recursos que le corresponden, tema que se encuentra a fallo del superior tribunal nacional.

La revelación periodística de la decisión administrativa del Jefe de Gabinete -que dispuso redireccionar a los sistemas previsionales de Santa Cruz y Misiones fondos que están previstos para la caja santafesina en el presupuesto 2010- dejó a la vista la omisión de la Nación para con la provincia.

La rectificación de la medida significó que los dineros para esas dos provincias no salieran de los fondos de Santa Fe sino de la caja de la Anses. Pero no se dispuso el envío de la partida correspondiente a nuestra provincia. Es decir, la Nación cumple con el reconocimiento de los déficit previsionales con aquellas provincias cuyos gobernadores están alineados con la gestión presidencial, pero castiga por omisión a quienes no son del palo.

La deuda con Santa Fe ya supera los 840 millones de pesos; la presidenta de la Nación vetó el año pasado la norma que llevaba al 82% móvil el haber mínimo nacional y en la Cámara de la Seguridad Social se acumulan más de 400.000 reclamos de pasivos que exigen la actualización del haber. Ante este cuadro, el Poder Ejecutivo volvió a tomar millonarios fondos de Anses, para tapar el déficit de las cuentas públicas. Este conjunto de hechos parece demostrar que la decisión del gobierno no es privilegiar la situación de la indefensa clase pasiva.