AL MARGEN DE LA CRÓNICA

La revolución también tuvo sus pícaros

Las autoridades egipcias informaron del robo de varios objetos valiosos del Museo Egipcio, incluidas dos estatuas de madera del faraón Tutankamón, a causa de los actos de pillaje registrados durante las últimas protestas políticas contra el régimen de Hosni Mubarak.

El ministro de Estado para Asuntos de Antigüedades, el arqueólogo Zahi Hawas, dijo en un comunicado que la pérdida de esas piezas del Museo Egipcio, que contiene las antigüedades faraónicas más importantes, se conoció después de recibir el inventario que se pidió a raíz de que grupos de desconocidos hubieran irrumpido en el museo.

En un principio, el mismo Hawas había dicho que, durante los actos de vandalismo que se registraron el pasado 28 de enero por la noche, los daños se limitaron a 70 piezas que iban a ser reparadas, pero hoy confirmó la pérdida de objetos valiosos del patrimonio del museo.

Ninguno de estos objetos forma parte del tesoro de joyas funerarias de Tutankamón, el grupo de piezas más importante del museo, que se encuentra en una sala con especiales medidas de seguridad y a la que no accedieron los grupos que cometieron las acciones de pillaje.

Entre las piezas que faltan se encuentra una estatua de madera dorada de Tutankamón mientras es sujetado por una diosa, y otra, también de madera dorada, que representa a Tutankamón utilizando un arpón.

También faltan, entre otros objetos, el torso y los brazos de una estatua de caliza del faraón Akenatón mientras sujeta una mesa de ofrendas, una estatua de Nefertiti haciendo ofrendas, la cabeza de una estatua de arenisca de una princesa encontrada en el valle de Amarna, y once pequeñas estatuas del cortesano Yuya.

El comunicado dice que Hawas ha ordenado una investigación para buscar a los responsables de este robo de piezas arqueológicas.

La nota también informa de que el pasado viernes, el mismo día en que se conoció la renuncia del entonces presidente Hosni Mubarak, que estuvo en el poder desde 1981, se violó el acceso de una recámara de Dahshur, al sur de Gizeh, que contenía bloques de piedra y pequeños artefactos, pero el comunicado no dice si ha desaparecido algún objeto.