DEL CENTRO COMERCIAL

Ayuda para comercios afectados por protesta

b_aa.jpg

Una protesta callejera afectó a comerciantes de San Martín al 2800. Foto: Amancio Alem

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

El martes, una protesta con corte y quema de cubiertas en San Martín al 2800 provocó la reacción de comerciantes del lugar, quienes adujeron pérdidas de mercaderías y roturas en instalaciones.

El Centro Comercial siguió de cerca la situación y comunicó ayer que por “las graves consecuencias derivadas”, la Asociación Mutual pondrá a disposición de los comerciantes afectados una línea de ayuda económica para solventar los gastos ocasionados.

“En principio van a ser créditos a tasa subsidiada”, reveló Fabián Zanutigh, gerente de la entidad, y aseguró que las mismas serán bajas y razonables, aunque no precisó números. “Es una decisión que se tomó el viernes y queremos ir viéndolo”, explicó. Pero dejó en claro que serán de fácil acceso.

La iniciativa se dio a conocer en un comunicado donde el Centro Comercial expresa su preocupación por el corte de calle de los días martes y miércoles pasados y los inconvenientes derivados.

Daños y malestar

“Más allá del legítimo derecho a protestar, esta metodología se ha convertido en la primera medida para quien quiera hacerse escuchar y trascender a la opinión pública, generando inconvenientes a muchos ciudadanos que se ven perjudicados a pesar de ser totalmente ajenos al problema”, sostuvo la entidad.

Y agrega que, “la quema de cubiertas provoca no sólo daños materiales, sino también inconvenientes en la salud de quien debe soportar, por lapsos tan prolongados, la inhalación del humo”. A su vez, expresó su inquietud por el hecho de que los Bomberos deben aguardar la orden policial para actuar lo cual “provoca grandes pérdidas de tiempo”.

“La calle debe ser un espacio que organiza, ordena y tiene un tiempo de circulación y esto se ve coartado por la protesta además de generar un lógico malestar. Es bueno destacar que la apropiación privada de espacios públicos es materia de escasa discusión en la ciudad, donde la sociedad acepta los discursos de las autoridades casi sin crítica, aunque este aparente consenso dista mucho de legitimar las acciones de dichas autoridades”, finaliza.