Lo ordenó el Ministerio de Defensa

Relevos militares por faltante

de armas en Fray Luis Beltrán

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Arturo Puricelli, ministro de Defensa

Foto: Archivo El Litoral

El hecho fue denunciado a la Justicia Federal y se investiga el “presunto suicidio” del jefe de la sección Armamento. Otros casos recientes.

 

De la redacción de El Litoral

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DyN/Efe

El Ejército detectó un faltante de armas en el Batallón de Arsenales 603, ubicado en Fray Luis Beltrán, Santa Fe, por lo que dispuso relevar a personal de la fuerza y denunciar el hecho a la Justicia Federal, que investiga el presunto suicidio de un sargento encargado de sección.

El Ministerio de Defensa consignó en un comunicado que el titular de la cartera, Arturo Puricelli, ordenó al jefe del Estado Mayor General del Ejército, teniente general Luis Pozzi, el “inmediato pase a disponibilidad de todo el personal que hubiera tenido responsabilidad en el cuidado del armamento”.

La cartera de Defensa declinó informar el material faltante, aunque sí destacó que se dio “inmediata intervención” al juez federal 4 de Rosario, Marcelo Bailaque, y que el viernes se produjo “el presunto suicidio” del sargento ayudante Mecánico Armero, Hernán Solís, jefe de la Sección Armamento de la Compañía de Abastecimiento del Batallón de Arsenales 603.

La novedad se conoció a 11 días de la asunción del coronel Enrique Battezzati como nuevo jefe del Batallón de Arsenales, cuyo nombre oficial es “Combate de San Lorenzo”. El día de su asunción, Battezzati, quien reemplazó al teniente coronel Alejandro Holm, dijo que lo hacía “con muchas ganas de cumplir” con su “deber de conducir esta unidad e integrarme rápidamente a las ciudades de la región con el objetivo de aportar a la grandeza del Ejército”.

Battezzati recordó entonces que el Batallón de Arsenales 603 tiene “una importante misión logística por medio del mantenimiento de armamento y vehículos, y la entrega de municiones a todas las reparticiones del Ejército argentino”.

La investigación por el robo quedó en manos del juez federal Bailaque, el mismo que tiene a su cargo, entre otras, la denominada causa “Díaz Bessone” (ex Feced), por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura.

Otros casos

El robo denunciado en el Batallón 603 se suma a otros recientes ocurridos en armas nacionales. El cinco de enero, se informó que la Justicia investiga el robo de unas 20 mil municiones de calibre 22 que se encontraban almacenadas para su destrucción, y que desaparecieron de las instalaciones de la I Brigada Aérea de la Fuerza Aérea, ubicada en la localidad bonaerense de El Palomar.

La noticia se conoció ese día y fue confirmada entonces por el secretario general de la Fuerza Aérea, brigadier Ernesto Paris, quien precisó que la institución militar abrió un sumario interno, mientras que el juez federal de Morón Juan Pablo Sala investiga penalmente el robo. Las autoridades militares subrayaron en su momento que las municiones eran “inutilizables” porque estuvieron bajo agua durante mucho tiempo.

En tanto, el 18 de agosto pasado, un grupo de desconocidos se llevó armas largas y cortas de dependencias del Grupo de Guerra Electrónica del Comando de Operaciones Aéreas, ubicado en el barrio porteño de Palermo. Otros hechos similares ocurrieron a lo largo de 2010 en unidades militares, principalmente del Ejército, hechos en los que estarían involucradas bandas delictivas que necesitan fusiles FAL para realizar asaltos a camiones blindados.


Puntos salientes

La investigación por el robo quedó en manos del juez federal 4 de Rosario, Marcelo Bailaque; el mismo que tiene a su cargo, entre otras, la denominada causa Díaz Bessone (ex Feced), por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura.

El relevo dispuesto por el Ejército rige para quienes estaban destinados al cuidado del material bélico que desapareció el viernes. La búsqueda de las armas desaparecidas continúa en la actualidad y se realiza de manera intensiva.

La novedad se conoció a 11 días de la asunción del coronel Enrique Battezzati como nuevo jefe del Batallón de Arsenales.

El caso se suma a otros dos registrados en los últimos meses en dependencias de las Fuerzas Armadas.