Hombres que hicieron historia en Pájaro Blanco

Jean Pierre Clement Tourn (Pedro) nació en el pueblo de Rorá, en el Piemonte italiano.

Hombres que hicieron historia en Pájaro Blanco

Un libro de reciente publicación refiere a la vida de aquellos pioneros que dejaron su trabajo o ideas para el progreso del paraje que naciera con el nombre de Alexandra Colony.

TEXTOS. MARIANA RIVERA. FOTOS. GENTILEZA GUIDO TOURN PAVILLON.

 

El Dr. Guido Tourn Pavillon, oriundo de la localidad de Alejandra, al norte de nuestra provincia, es un estudioso de la historia de la región de la Costa santafesina y no abandona su tarea. Recientemente publicó otro libro sobre aquellos primeros pobladores de su ciudad natal, inmigrantes de distinta nacionalidad, casi todos europeos, titulado “Historias de pioneros en el Pájaro Blanco del norte santafesino”.

Define a los pioneros como “aquellos hombres que llegaron a esta tierra para colonizarla y, a su vez permitir que otras personas pudieran luego asentarse en ella y lograr su propósito de vida: conseguir finalmente su tierra prometida”. Sin embargo, aclara que “hubo otros hombres que -sin haber participado de forma directa ni haber siquiera conocido el lugar- tuvieron una destacada actuación, colaborando para que naciera la Alexandra Colony, se desarrollara y fuera lo que hoy es”.

En relación al proceso de colonización, reseña que “existía una economía pastoril en el país que impedía -hasta ese momento- la formación de una clase media, pero los objetivos de progreso impuestos por la república liberal no se cumplirían sin su existencia. Por eso, la inmigración europea viene a llenar ese vacío. La Argentina y, especialmente nuestra provincia, eran el lugar mejor preparado para recibir a los inmigrantes -aunque en los hechos no resultara que fuera así-, según la amplia convocatoria que hacía el preámbulo de nuestra Constitución”.

Según el autor, uno de los sectores a colonizar en nuestra provincia era la tierra que estaba disponible para ser ocupada por los inmigrantes europeos. Se encontraba al norte de la reducción de indios mocovíes de San Javier, donde también estaba instalado un cantón con soldados que custodiaban la frontera norte de nuestra provincia.

A partir de 1867, esa zona fue conocida como el Pájaro Blanco y estaba destinada por ley a recibir la inmigración espontánea. Era un amplio territorio ubicado fuera de los límites de la frontera y aún bajo el dominio de aborígenes mocovíes, tobas y los tan temidos montaraces. Allí desarrollaron su actividad las personas y los protagonistas de esta historia.

PERSONAJES

El autor destaca que en Pájaro Blanco fueron surgiendo “personajes que van a adquirir esa condición al ser reconocidos por su accionar en la sociedad y por ser actores principales de todo el proceso colonizador”.

Respecto a esos pioneros, precisa que -de sur a norte- los primeros inmigrantes que arribaron fueron los de origen norteamericano que dieron nacimiento a la Colonia California. Luego se ubicaron los inmigrantes galeses, hombres y mujeres que se habían separado de los que habían llegado en la nave “La Mimosa” a la Patagonia y que -al cabo de dos años de fracasos en las cosechas- prefirieron colonizar las tierras del norte santafesino. La denominaron Colonia Galense o Galesa, comúnmente conocida como Inglesa.

A continuación -acota- sigue la Colonia Eloisa, formada por colonos franceses, en su mayoría hombres solteros, que tuvo una corta vida ya que fue abandonada por los empresarios Warnes, Hebert y Cía. Luego surgió la instalación de un gran establecimiento con aportes de capitales británicos importantes: la denominaron Alexandra Colony, conducida por Andrés Weguelin y un grupo de jóvenes ingleses. Fue poblada en su mayoría por inmigrantes italianos valdenses pero también había suizos, franceses y españoles, entre otros.

DESTACADOS

De los tantos nombres que incluye esta publicación -“todo tipo de personajes, desde los más importantes hombres que hicieron grandes obras hasta los más humildes, que también dejaron su huella”, aclara el autor-, Tourn Pavillon destaca -por ejemplo- a aquellos venidos de las Islas Británicas.

“Son ingleses e irlandeses. El actor principal es el joven Andrés Weguelin, hijo del socio principal del Banco J. Thomson T. Bonar & Cía. de Londres, empresa colonizadora de la Alexandra Colony; sus colaboradores y amigos, Arturo L. Powys y Percy Heurtley, quienes viajaron para colaborar en las tareas de instalación de la colonia”.

También menciona a Francisco Ignacio Rickard, militar e ingeniero en minas, amigo personal del presidente Sarmiento. Fue quien redactó el informe que contiene croquis y planos que fueron distribuidos en Europa y en el que analiza la ubicación y calidad de la tierra y las condiciones de la colonización.

Otro hombre de quien se da una biografía en la publicación es Charles Henry Webster, quien habría acompañado desde el puerto de Génova a los emigrantes italianos valdenses en la nave Ottavia Stella y, al arribar al puerto de Buenos Aires, debió realizar las gestiones para su ingreso al país y un posterior cambio de embarcación (el vapor “El Cisne”) que pudiera navegar por las aguas del río Paraná, hasta el improvisado puerto en el Guaycurú frente a la colonia.

Y no falta una referencia a quien fuera el “máximo promotor de la inmigración a la provincia de Santa Fe, el canadiense Guillermo Perkins” o a integrantes de la Iglesia Anglicana, “iglesia de los empresarios colonizadores, que tuvo -a través de sus pastores, como el Obispo Rev. Waite Stirling- una activa participación en todo este proceso”.

MÁS APORTES

Cabe agregar que también se menciona a un grupo de inmigrantes norteamericanos que tuvo destacada participación en la colonización de toda la región, fundando primero la Colonia California y luego colaborando con la instalación de la colonia británica: William Tandy Moore, dos de sus hijos, William Henry y Thomas Moisés y uno de sus yernos, James Riley Holman.

También nombra a los inmigrantes galeses que tras abandonar la colonia galesa de la Patagonia, fundaron la primera Colonia Galesa de Santa Fe, John Morgan y William Davies, y David Morgan, que luego viajó junto a su hermano Richard, para poblar esa colonia santafesina. A ellos se sumó Richard Griffiths.

Diccionario biográfico

El prólogo de este libro estuvo a cargo de la Prof. Graciela González, quien escribió que la investigación “resulta un diccionario biográfico, ya que se incluyen personas ya muertas; abierto, puesto que no sólo se podrán agregar más datos de los biografiados, sino también incluir a otros personajes relacionados con la colonización del Pájaro Blanco; contiene semblanzas de personas de nacionalidad inglesa, norteamericana y de unos pocos españoles, lo que muestra el origen nacional de la colonización en la zona; la tarea común, vertebradora: colonizadores del antiguo paraje sanjavierino”.

También destaca que “el Dr. Tourn, hijo de la Alexandra Colony, trabajó (este género) en forma objetiva y sólo imbuido del cariño a sus raíces, a los hacedores de su patria chica. Sobre la base de la tradición oral circulante en su pueblo confrontada con datos rescatados de archivos nacionales y británicos [...], esbozó las semblanzas de personajes tales como la princesa que dio nombre al pueblo; la del fundador de la Alexandra Colony; los primeros pobladores de la colonia; sus administradores, etc., mostrándolos en sus condiciones morales y en el análisis psicológico”.

Y concluye: “Este nuevo trabajo del Dr. Tourn [...] es el reconocimiento de un historiador localista que rescata, especialmente para las generaciones futuras de Alejandra, la vida de los hacedores de esa particular colonia costera, sus tensiones y procesos interiores en una particular etapa: la inicial que, sin lugar a dudas, se proyecta hasta la actualidad y la define”.

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Foto que ilustra la tapa del libro “Historias de pioneros en el Pájaro Blanco del norte santafesino”.

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Samuel William Charles Reynolds era un colono de origen irlandés.

Anónimos personajes cargados de esperanzas

En la investigación también se rescatan los nombres de algunos de aquellos hombres con menor protagonismo cuando se dieron los primeros pasos en el inicio de la colonización.

Al respecto, advierte que “todos los que emigraron a este lugar lo hicieron cargados de esperanzas, ya que se vieron obligados a dejar su tierra, abandonar sus familiares y afectos y en un largo y desastroso viaje que los trasladó, llenos de tristeza, dudas e incertidumbres, ante un destino que los llevaba a lo desconocido. Cada uno de ellos emigró, trayendo un caudal de tradiciones y costumbres del lugar que abandonaron.

Fueron ellos, estos casi anónimos personajes, los que -luchando contra la adversidad- se asentaron sobre esta tierra nueva, indómita y virgen y la hicieron suya. Era su tierra prometida”.

Algunos de ellos fueron Soechting, Salvagiot, Figueroa, Spence, Tourn, Rivoira, Beckley, Reynolds, Pavarin, y González Herrera, entre muchos otros, que desde la función pública o la actividad privada, fueron maestros, jueces de paz, comisario de policía, jefe de correo, o simples agricultores o ganaderos.