Celebrando los 45 años de Canal 13

Las caras del éxito de Telefé

En el marco de los festejos por el aniversario de la señal santafesina, varias figuras de la televisión nacional visitaron la ciudad. Martín Seefeld, Ludovico Di Santo, Calu Rivero y Marley estuvieron en la fiesta y charlaron sobre su actualidad.

Ignacio Andrés Amarillo

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Aprovechando la visita de varias figuras de la pantalla de Telefé durante los festejos del 45º aniversario de Canal 13, El Litoral conversó con los actores que le ponen el cuerpo a “El elegido”, y con Alejandro “Marley” Wiebe, uno de los conductores estrella de la señal capitalina.

Sangre joven

En “El elegido”, Octavio Linares Calvo (Ludovico Di Santo) es abogado, es el más joven del estudio en el que trabaja Andrés (Pablo Echarri). Está casado con Erica (Calu Rivero), una mujer extremadamente ambiciosa, superficial e histérica.

El Litoral dialogó con los jóvenes actores para conocer su visión sobre el envío que estelarizan.

—¿Cómo viven el fenómeno de “El elegido”?

Calu: —Lo más lindo es ser parte de un producto que a mí me parece alucinante. Y estar con un elenco del que admiro a todos...

Ludovico: —Gracias (risas).

Calu: —Y eso es lo más divertido de todo. Después obviamente que a la gente le guste suma, pero lo más lindo es sentirse uno afortunado de ser parte, de poder generar algo lindo, un producto que tenga contenido.

—La ficción se está jugando un poco más...

Ludovico: —A una manera de narrar distinta, a una historia mucho más compleja; no todo está dicho en los primeros capítulos, tiene una vuelta, no sabés hasta qué punto son tan buenos o tan malos; hay como un suspenso en todo eso. Es muy atractivo el tiempo de narración, las luces, hay un cuidado estético en el programa.

—¿Sienten que sus personajes van creciendo, por el trabajo de los guionistas pero también por la respuesta de la gente?

Ludovico: —Sinceramente desconozco, no sé por qué van creciendo. Los personajes en un principio son un papel escrito, y después hay que ponerles el cuerpo y llevándolos ahí. Entonces es normal que las cosas adquieran dimensiones.

Calu: —Creo que tiene que ver mucho con cómo el actor se hace cargo del personaje, pero también tiene que ver con una historia que ya está un poco planteada, y también el hecho de que no esté todo dicho. Se abre esta puerta de “mirá por qué no puede pasar esto”, y eso es lo más lindo de todo: en un punto estamos todos en la misma.

—¿Cómo se logra eso en jornadas de grabación extensísimas durante meses?

Ludovico: —Con un gran trabajo en equipo, con un gran laburo autoral, de producción en todo sentido: en vestuario, iluminadores, de dirección, un gran equipo actoral. Hay actores que sostienen la historia con muchos recursos y (no sé si es la palabra) facilidad: con mucho oficio y entrega.

Calu: —También porque estamos todos contentos por lo que estamos haciendo, entonces cada uno pone lo mejor de lo que realmente sabe hacer y hace que el producto tenga esa calidad.

—¿Tienen idea cuánto más va a durar, como para planificar la carrera de ustedes?

Ludovico: —Eso es imposible de hacer. Se supone que durará más o menos hasta octubre.

—O sea que el año de ustedes va a estar centrado ahí.

Ludovico: —Sí, es como lo principal ahora. Después... la vida es incierta.

—¿Hay otros proyectos dando vuelta?

Ludovico: —Tengo para hacer teatro en la segunda mitad del año.

—¿Y podrás combinarlo?

Ludovico: —Sí, voy a poder (risas).

Calu: —Yo a nivel actoral no. Voy a sacar una línea de moda en Complot, que va a salir en mayo: algo que también me divierte muchísimo.

—Y algunos discos vas a pinchar entremedio...

Calu: —Sí, paso música, en eventos de L’Oreal. Estuve en Córdoba, estaría bueno que Santa Fe me traiga (risas), sería muy divertido.

—Estabas haciendo una tira de videos en la web...

Calu: —El que actuaba era Ema (Horvilleur, su novio) y yo los dirigía y los editaba. Quedaron ahí, en “Continuará...”. No puedo con todo.

Enamorado del proyecto

Martín Seefeld es, además de integrante del elenco de “El elegido” (donde interpreta al psiquiatra Santiago Mercado), ideólogo y responsable del programa, a través de la productora El Árbol (que fundó en sociedad con Pablo Echarri). Él también dialogó con El Litoral sobre este éxito.

—Vos participaste del fenómeno de un programa semanal, ¿cómo se vive el de una tira?

—Es un laburo distinto: la verdad es que hacer una tira es una tarea titánica y la estamos aprendiendo. Pero estamos felices con la responsabilidad que asumimos, contentos de lo que estamos haciendo y con muchísimas ganas de seguir dándole a la gente este tipo de productos. Y agradeciendo que la gente está ávida de que se los demos.

—Hablábamos con los chicos de cómo la disciplina de todas las áreas es lo que permite que todo esto pueda funcionar.

—Es titánico, pero somos actores, sabemos lo que hacemos, todos somos profesionales y laburamos mucho por suerte, como para saber cómo son las cosas. Pero por otro lado también creo que es un trabajo muy agradecido, muy placentero de hacer; a mí por ahí en este doble rol se me complican más los tiempos, pero la verdad es que el laburo que hacemos es maravilloso, con todo lo que tiene: es muy difícil, te genera una enorme inestabilidad por momentos; no te da paz, te da alegrías y te da pasión hacerlo. Uno quisiera tener permanentemente la tranquilidad laboral, y en esta profesión es muy difícil.

—¿Creés que pueden evolucionar los personajes en la tira?

—Sí, creo que todos los personajes van a ir evolucionando un montón y se van a ver seriamente transformados cuando termine la novela. Lo que tiene esta manera de contar y lo que tienen estos autores es eso.

—Hay un viraje de la ficción argentina, saliendo del costumbrismo hacia cosas más jugadas.

—Me parece que es la verdad de la vida: uno en la vida se enamora y la vez le pasan millones de cosas, hay enfermedades, desastres, muertes, pérdidas, nacen los hijos, hay separaciones...

—Hay conspiraciones...

—Sí, cuando tocamos el tema del poder todos queremos saber qué sucede realmente con eso, y la verdad es que estamos afuera. Hay cosas con las que uno se identifica y quisiera poder estar, eso es lo que la vuelve atractiva: que está identificada con la realidad, no es un cuento. Están los pecados capitales, uno u otro, siempre te han rozado por algo. Creo que en eso radica la diferencia.

—Hasta octubre esto te va ocupar el tiempo...

—Como diría un amigo, “Dios te escuche y yo lo vea”...

—¿Qué hay en vista en cuanto a proyectos?

—Estamos preparando proyectos nuevos, tenemos ganas de seguir produciendo, de seguir desarrollando, creando. Es un problema del tiempo: hay que preparar los proyectos y bueno, si no tenemos oportunidad seguiremos esperando y haciendo las cosas, porque la vida hoy es una calesita.

—¿Sentís que es difícil hoy en la televisión generar ideas?

—Muy difícil, hay muy poco espacio y cuando te lo dan lo tenés que aprovechar, porque son muy requeridos: Canal 9 no produce ficción; América muy poquito y nada; ahora produjo un par Canal 7; está el Trece que tiene un par de productoras básicas que son la de Adrián Suar, Pol-ka, e Ideas del Sur. Telefé está dando oportunidades a productoras independientes, en otro lugar no tenés para trabajar competitivamente hablando.

—¿Qué hace falta tener para ser productor?

—Mucha capacidad de trabajo, mucha paciencia y mucha contención a todos aquellos que están poniendo el alma en juego.

—¿Te gustaría volver a hacer un producto más cuidado (dicho entre comillas) como fue “Los Simuladores”?

—Creo que lo estamos haciendo con “El elegido” en tira: hacer algo como lo que estamos haciendo, con ese nivel de estética, con ese nivel de resolución y de historia me hace sentir tan orgulloso como cuando hicimos “Los Simuladores”.

—¿Qué te gustaría hacer en 2012?

—Seguir en la profesión, y poder tener la posibilidad de analizar algún proyecto que me vuelva loco y me genere la pasión que me generó “El elegido”. Poder ponerle el cuerpo, poder actuar.

—¿Hacer cine te gustaría?

—Me encanta, todos los géneros me gustan. Algunos te pueden salir mejor o peor, algunos hay que aprenderlos porque uno no los conoce tanto.

Para Seefeld, “El elegido” es una gran responsabilidad, ya que junto con Pablo Echarri son los impulsores y sostenedores del proyecto, a través de la productora El Árbol. Foto: Pablo Aguirre

Ludovico Di Santo y Calu Rivero como Octavio Linares Calvo y su esposa Erica, en una secuencia del programa. Foto: Archivo El Litoral