20 años de amor por los fierros

Regando de implementos a la región

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Producto insignia. El descompactador es uno de los implementos más importantes con que cuenta la firma de San Jerónimo Norte. Foto: Archivo

En San Jerónimo Norte la Firma Tecno-Campo, pionera en la región, apunta a crecer en un mercado donde la financiación y el acceso al crédito es cada día más complicado para las pymes metalmecánicas. El buen momento de la lechería le permitió pegar el salto de calidad.

 

José Zenclussen

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Aunque parezca raro en pleno departamento Las Colonias, se pueden encontrar una empresa metalmecánica, con años de crecimiento en el área de la maquinaria agrícola. La historia de la empresa Tecno-Campo, una de las primeras que se instalaron en la región, comienza en la década del 80º. “Había terminado de estudiar ingeniería y tenía dos opciones: me quedaba en San Jerónimo ó me iba a trabajar a Armstrong para Crucianelli y Erca, yo no me quería ir del pueblo. Empecé a dar clases, alquilé un galpón compre un par de herramientas y comencé a fabricar implementos”, comenta Germán Nanzer titular de la firma. Los primeros años eran a puro sacrificio y gracias a la ayuda de su padre y hermanos logró armar una estructura propia, que hoy es un ejemplo en la región.

Las maquinarias e implementos que fabrica Tecno-Campo cuenta con un mercado en una amplia zona de los departamentos La Capital, Las Colonias y Castellanos. La empresa absorbe un radio de unos 70 kilómetros que incluye las localidades de San Jerónimo Norte, Humboldt, Pilar, San Carlos, Felicia, Sarmiento, Progreso, Esperanza; Franck, San Agustín, Matilde, Recreo y Monte Vera.

“Uno de los atractivos más importantes que tiene Tecno-Campo es estar radicado cerca de la zona donde coloca su producción y cuando el productor tiene un inconveniente no debe recorrer muchos kilómetros para solucionar el problema”, apuntó Germán Nanzer.

Cierre de importaciones y falta de ayuda

La mayoría de los implementos de Tecno-Campo están destinados a la producción tambera y ganadera, que hoy están pasando un buen momento, pero a los que les falta estabilidad y seguridad en el largo plazo. “El freno a las importaciones hay elementos que no se encuentran en el mercado, por ejemplo el fabricante de ejes, que utiliza rodamientos ya no los consigue y es una situación muy preocupante”.

En cuanto a la fabricación de bulones que se utilizan en el país el 65 a 70% no se fabrican en la Argentina y hoy no se encuentran en el mercado. “Las firmas no pueden entregar una máquina porque le faltan bulones, a nosotros hace 30 días teníamos que entregar tres mixer y por una pieza que nos faltaba demoramos 15 días para entragarlos porque era imposible conseguirlos”, explicó Nanzer.

El crecimiento de las Pymes viene muy lento por las complicación de encontrar financiación a tasas bajas, que permitiría apuntalar la producción. “Hoy el industrial de maquinaria agrícola pequeño tiene acceso al crédito pero con tasas muy altas, en cambio los grandes tienen financiación el doble más barato que los chicos. Con esa ventaja pueden vender financiado cosa que nosotros no lo podemos”.

Las grandes metalmecánicas aprovechan la ventaja en la relación con sus proveedores. “Los chicos tenemos un plazo 30 a 50 días y los grandes hasta 180 días, no tenemos condiciones para lucharla en el aspecto financiero, pero sí en calidad. Solo necesitamos mayor financiación”, explicó.

Nanzer agregó que sería muy importante que los Gobiernos tanto provincial como nacional envíen una señal positiva para el sector y se comprometan a ofrecer financiamiento. “Las empresas chicas son las que más mano de obra generan y permiten que la gente de los pueblos no migre a las grandes ciudades. Se debería buscar algún instrumento que permita favorecer la radicación de empresas”, finalizó.

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Nuevo equipo. La estiercolera fue el último lanzamiento de la firma "valezana" en el mercado. Foto: Gentileza Tecno-Campo

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La más vendida. La pala frontal se convirtió en el implemento insignia de Tecno-Campo en 2010. Foto: Gentileza Tecno-Campo.

Estiercolera

En el año 2010 Tecno-Campo presentó su nuevo implemento, la estiercolera. Para evitar la corrosión que provoca la orina y materia fecal la estructura es de plástico con un espesor de hasta 35 milímetros, que evita estos problemas. “Cuenta con protección especial para rayos UV y en caso de que se rompan se puede soldar el plástico, lo ideal es usar la estiercolera cada 10 días para que la mosca no cumpla su ciclo y así ir eliminando ese problema”.

Nanzer agregó que si los productores usaran la estiercolera cada 8 ó 10 días, en meses pagarían la inversión realizada. “La zona, según estudios del INTA, tiene alrededor de 10 partes por millón de fósforo, usando la estiercolera durante dos años en ese potrero se lo puede llevar a casi 30 partes por millón, que sería lo ideal para una alfalfa”.

/// el dato

Pala frontal

Desde principios del año pasado gracias a los buenos precios de la carne y la leche la empresa logró vender y colocar unas 65 palas frontales. “Para cada tractor hay que hacer un sobre chasis especial; somos uno de pocos que hacemos este trabajo. Nuestras palas tienen la ventaja de poder sacarlas en muy poco tiempo”, apuntó Germán Nanzer.