San Justo
Fue liberado el joven que apuñaló a su papá
La comisaría 2da. de la Unidad Regional XVI fue la primera en intervenir en el hecho.
Foto: Agencia San Justo
La víctima permanece internada en el hospital Cullen, sigue “estable” pero en terapia intensiva. Una discusión familiar habría desencadenado la pelea.
De la Redacción de El Litoral
Lisandro Bonalume, el joven de 21 años que pasó una semana preso por apuñalar a su padre Marcelo Bonalume en San Justo, recuperó la libertad este viernes por la tarde. Tras prestar declaración indagatoria esta semana y la testimonial de Ana María C., madre del imputado y esposa de la víctima, el juez de Instrucción Segunda, Nicolás Falkenberg, decidió concederle el beneficio de la libertad.
En tanto, la víctima de 49 años permanece internada en el hospital Dr. José María Cullen de Santa Fe, dado que el último parte médico arrojó que Bonalume se encuentra “estable”, pero “en terapia intensiva”, indicó hoy el subjefe de la Unidad Regional XVI, Néstor Ardisana.
El hecho se remonta al viernes 13 de mayo, cuando en horas de la noche el personal del Comando Radioléctrico y de la Comisaría 2da. debió intervenir en un conflicto familiar. Las unidades se dirigieron a una casa de calle Pedro Gaggero al 1700, en el barrio Barracas de San Justo, donde se encontraron con un cuadro dramático, puesto que el hijo había lesionado a su padre con un arma blanca.
Indagatoria
Ante la gravedad del caso, el mayor de los Bonalume fue trasladado de urgencia al Samco local y desde allí lo derivaron a Santa Fe, en horas de la madrugada. Por su parte, la policía puso bajo arresto al muchacho, ya que desde un primer momento se hizo cargo de lo ocurrido. En cuanto a la víctima, tenía una herida punzante de arma blanca, en la zona del pecho.
Esta semana, Lisandro Bonalume le dijo al juez Falkenberg que se metió a defender a su madre, porque su papá “una vez más” había intentado agredirla físicamente. También relató que el hombre se encontraba visiblemente alterado y que no dudó en desafiarlo en una pelea a mano limpia.
Además de los cruces verbales, los dos hombres de la casa intercambiaron algunos golpes dentro de la vivienda, hasta que la pelea se trasladó a la calle. Allí habrían seguido las agresiones, lo que derivó en la intervención de un vecino que se metió a separarlos. Cada uno por su cuenta regresó a la vivienda, donde se reanudó la contienda.
No tuvo intención
Enervados por la situación, la madre anunció que se iba y el muchacho optó por seguir sus pasos, pero antes se dirigió al interior de la vivienda para cambiar sus ropas, puesto que en la pelea terminó sucio y embarrado, producto de una caída.
Entonces, siempre según el relato del hijo, el padre amenazó con golpearlo con una jarra y fue en ese instante en el que tomó el cuchillo, con el sólo fin de ahuyentarlo. Pero nuevamente los cuerpos se trenzaron en lucha y en un momento dado el mayor de los dos cedió en sus fuerzas y la daga se incrustó en la carne provocándole la herida que ahora lo mantiene internado en Santa Fe.
El joven asegura que no tuvo intención de lastimar a su padre y que justo en el momento de la pelea se había cortado la luz en ese sector de la ciudad, por lo que la puñalada habría sido más producto del azar que de la intención de matar.
Al parecer, en el último tramo de la pelea no hubo testigos presenciales, ya que la madre había abandonado la vivienda minutos antes.
Como consecuencia de las actuaciones judiciales “ayer a las 18.30 se le otorgó la libertad por orden del juez de Instrucción Segunda” a Lisandro Bonalume, refirió el subjefe de la URXVI.
