En Villa Ocampo

Arrancó la zafra azucarera

El presidente del ingenio ocampense, Hernán Colussi, se mostró agradecido “porque estamos cumpliendo 10 años y agradezco a todos aquellos que hicieron posible nuestra estadía y permanencia en esta fábrica”.

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La familia Colussi durante el acto simbólico de lanzamiento de la zafra 2011 que se realizó ayer en el ingenio Inaza de Villa Ocampo.

Foto: Paralelo 28-Red de Medios

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Durante la jornada de ayer, el ingenio azucarero Inaza SA de Villa Ocampo, dio por iniciada la zafra cañera 2011. Además el establecimiento fabril adquirió nuevas cosechadoras con orugas.

En el acto conmemorativo del inicio de la zafra 2011 y 10º zafra azucarera de la empresa Inaza SA, estuvieron presentes el intendente Enrique Paduán, integrantes de su gabinete, concejales, productores y trabajadores.

Se procedió a izar la insignia patria, luego vino la bendición de inicio de zafra, para luego dirigir sus palabras el intendente municipal, quien dijo: “Esta zafra es el inicio de una industria que tiene toda una historia y debemos trabajar para potencializar esta economía regional como es la caña. Como todos saben, se está desarrollando un proyecto de riego para 10 mil hectáreas de caña de azúcar, proyecto que ha sido presentado y que este próximo jueves se hace la defensa y si todo va bien a principios o mediados del año que viene se licitará la obra. Esto será el mejoramiento a la industria y a toda la cadena de valor de la caña”, expresó.

El presidente de la firma Inaza, Hernán Colussi, también expresó: “Gracias por estar en este inicio de zafra, que además estamos cumpliendo 10 años y agradezco a todos aquellos que hicieron posible nuestra estadía y permanencia en esta fábrica. Queremos que nos sigan acompañando y felices zafras para todos”, sintetizó Colussi.

Además de algunas inversiones realizadas en el Ingenio Arno para el inicio de esta zafra 2011, la empresa Inaza adquirió dos cosechadoras mecánicas con orugas, únicas en el país, para garantizar la entrega de caña cuando los pisos se encuentran con elevada humedad.

Juan Carlos Colussi comentó que “estas máquinas con orugas son para acompañar la cosecha en los lotes que están muy bajos, que tardan mucho en secar después de una lluvia y se complica entrar con una máquina común; teniendo en cuenta que el 80% del abastecimiento del ingenio es con máquina, ya que cada vez menos fardos van entrando. Cuando estamos en zafra, después de una lluvia, siempre quedan lotes que tardan hasta cinco días más en secarse; entonces, con estas máquinas con orugas podemos entrar antes”.

Aclaró el empresario norteño que “son máquinas que las pudimos comprar con créditos prendarios, de marca John Deere brasileñas de última generación; son las únicas que vinieron con orugas en el país, las pedimos especialmente porque en la Argentina no hay con orugas. Tucumán tiene un clima, Salta y Jujuy tienen otro clima, y a nosotros siempre se nos complica con las lluvias; las tenemos que probar, pero creemos que deberían andar bien por la experiencia que tenemos con las otras cosechadoras y los tractores, otra alternativa no hay”.

También el industrial reveló que en las instalaciones del Ingenio Arno “el año pasado se hizo un decantador y este año un desfibrador, se están haciendo muchas inversiones. Para esta zafra tenemos cañaverales buenos, bien atendidos por los productores, ayudados por los buenos precios del azúcar; lo que pasa es que seguimos teniendo un área de siembra que va de 4.500 a 5.000 hectáreas, no podemos salir de eso porque sembrar una hectárea hoy cuesta $4.000, pero lentamente se van renovando todos los cañaverales”.


50 días de recolección

Por último, Colussi estimó que “la zafra se extenderá unos 50 días de zafra, menos que el año pasado cuando estuvimos solos. Este año va a moler los dos ingenios, se va a sembrar algo más que el año pasado, van a ser muy pocos días de zafra. Tendremos que seguir peleándola para que siga creciendo el área sembrada. Si acompaña el clima y el precio, todo eso va a ser para mejor; pero sin dudas, la obra de riego va a cambiar muchas cosas, va a ser un antes y un después, ya no va a ser más la media de 30 ó 35 toneladas de caña por hectárea, pasará a ser 70 toneladas, que con 5.000 hectáreas vamos a tener para moler los dos ingenios, que es lo que hace falta”, finalizó.