El presidente boliviano había solicitado no perder por muchos goles...

Raldes cumplió con el pedido de Evo Morales

El defensor de Colón jugó un buen partido, ganó y perdió en la misma medida con Messi y hasta se le animó en un cruce “cara a cara”. Fue un hombre clave en el gran partido de Bolivia.

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Se la bancó. El jugador de Colón Ronald Raldes es el capitán de la selección boliviana y ayer tuvo una de las pruebas más difíciles de su carrera debido a la enorme calidad de los delanteros argentinos. El defensor jugó muy bien, no cometió errores e incluso hizo enojar a Messi, que nunca pudo desbordarlo. Foto: EFE

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a La Plata)

Hubo dos episodios que marcaron la trayectoria de Ronald Raldes en este primer año que lleva jugando en Colón (le queda uno más de contrato). A principios de este año pretendía quedarse y no acudir a un convocatoria que le hizo el técnico de la selección boliviana, Gustavo Quinteros, para jugar un partido amistoso en Europa, más precisamente en Turquía y ante Letonia en enero. “Prefiero quedarme en la Argentina, terminar bien la pretemporada con Colón y arrancar el torneo”, dijo Raldes. Faltaba poco para el inicio del Clausura. El otro episodio se dio antes del encuentro ante Newell’s, cuando ya había comenzado la concentración de la selección boliviana y Raldes tenía que presentarse el viernes previo a ese cotejo en Rosario. “Voy a pedir permiso y me presentaré el lunes porque quiero jugar ante Newell’s”, señaló el defensor sabalero. Finalmente, cumplió con lo que establece la Fifa y viajó a Bolivia antes de ese último partido que terminó con derrota sabalera en el Parque.

El relato de estos episodios viene a colación porque Ronald Raldes es el capitán de la selección boliviana y anoche cumplió una buena actuación. Fue el primer marcador central en un equipo que se paró con un 4-4-1-1, que supo de qué manera se debía marcar a un jugador tan desequilibrante como Messi, que estuvo concentrado en todo momento y que mediaron sólo quince minutos para concretar una hazaña que hubiese hecho hablar al mundo entero, si es que Bolivia conseguía ganar el partido.

A los 18 minutos del primer tiempo, Raldes le cometió la primera infracción a Messi. No fue el único choque entre los dos, pues minutos más tarde, luego de una acción del rosarino en la que no alcanzó a llegar a una pelota dividida con el arquero Arias, Raldes y Messi quedaron cara a cara durante varios segundos y se dijeron de todo. El árbitro debió intervenir de inmediato, los llevó a un costado y los llamó al orden.

En el segundo tiempo, el defensor de Colón tuvo que intervenir en varias oportunidades ante un Di María que entró con muchas ganas de demostrar que quiere ganarse un lugar en la selección, más allá de que se haya pasado de revoluciones en varias jugadas. Allí, el boliviano tuvo que apelar a su experiencia para no quedar a mitad de camino ante la evidente superioridad en cuanto a velocidad que imponía el ex volante de Rosario Central, hoy en el Real Madrid.

Raldes tuvo, por último, otro duelo con Agüero. Fue en una jugada en la que quedó lastimado luego de un choque con el ex delantero de Independiente, aunque enseguida se recuperó.

Atentamente deben haber mirado Mario Sciacqua y sus colaboradores este rendimiento de Raldes, ya que más allá de que Colón busca un defensor, su presencia en el plantel está garantizada y seguramente peleará la titularidad con el que venga, tratando de ganarse un lugar en el equipo.

No se sabe hasta dónde podrá llegar Bolivia en esta Copa América. De hecho que el partido decisivo lo tendrá en la última fecha, cuando le toque enfrentarse a Colombia,


 

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Así es difícil. Los bolivianos cumplieron en forma excelente el plan táctico de su entrenador y con mucho orden y sacrificio lograron cortar el circuito de juego albiceleste. En la foto, una constante: Messi intenta avanzar pero ya está rodeado por rivales. Foto: EFE

 

más allá de que tampoco se pueden sacar muchas conclusiones de la suerte que correrá Costa Rica en este certamen. Lo cierto es que anoche sorprendieron, jugaron con mucho orden, impusieron fortaleza física en la marca, no se achicaron, no retrocedieron tanto en el terreno y plantearon un partido vigoroso. En ese marco, Ronald Raldes fue uno de los destacados y, además, se trata del capitán. Más allá de que fue frente a la Argentina, tanto Germán Lerche y el resto de los dirigentes, en la cancha, y Mario Sciacqua frente al televisor, habrán quedado muy conformes viendo la respuesta de Raldes.

El jugador de Colón había hecho declaraciones previas en las cuales mencionaba la posibilidad de la victoria y el objetivo de Bolivia de ir al Mundial de Brasil. “Esta Copa América servirá para eso, para ver si estamos en condiciones de pegar el salto”, dijo el boliviano, quien no jugó el último partido entre estas dos selecciones en Eliminatorias y que fue el recordado 1-6 en La Paz, cuando al equipo argentino lo dirigía Maradona y atajaba Carrizo, quien ayer fue silbado por el público presente en el estadio Único.

En definitiva, Raldes cumplió con el pedido que hizo su presidente Evo Morales: “Muchachos, si tenemos que perder, que no sea por muchos goles”.

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Hizo la diferencia. Frente a un Lavezzi que terminó mal todas las jugadas, un Tevez que no sintonizó con el resto de los delanteros, un Di María muy individualista y un Messi sin socios, Agüero entró y le dio el desequilibrio que necesitaba el ataque argentino. Encima, anotó un golazo. Foto: EFE