Confirmó la realización de la Copa Argentina y que se mira afuera para refuerzos...

“Los jugadores piden como si jugaran la Champions League”

El presidente de Colón, Germán Lerche, realizó además una convocatoria: el miércoles hay que armar una caravana para recibir a la selección de Messi.

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a La Plata)

Llegó al estadio Único acompañado por dos de sus vicepresidentes -Rubén Moncagatta y Juan Carlos Chemes- y por el presidente de la Liga, Carlos Lanzaro. Germán Lerche había estado la noche anterior disfrutando de una cena de bienvenida a las delegaciones y autoridades participantes en la Copa América, en un importante hotel de capital, donde no le faltaron oportunidades para establecer vínculos que, incluso, son de interés para su institución, para este Colón del cual Lerche no dejó temas sin tocar, más allá de que le asume un rol clave como principal impulsor de la llegada de la Copa América a nuestra ciudad y de una bienvenida especial que desea darle el martes a la selección.

—¿Contento por esta oportunidad histórica para Santa Fe, Germán?

—Muy contento, expectante, mirando todo para copiar lo bueno y solucionar los inconvenientes que pudieran presentarse y un poco asustado por todo lo que se genera alrededor de un torneo de esta envergadura. Todo esto lo tendremos en Santa Fe entre martes y miércoles y no quisiera dejar ningún detalle al azar.

—¿Cuándo llega la selección?

—A las 12.10 del martes... Y propongo que todos los santafesinos vayamos a esperar al equipo. Que nos congreguemos en la autopista y la ruta 19 y desde allí acompañemos a la selección hasta el hotel de Colón. Es una oportunidad irrepetible y hay que disfrutarla. Me encantaría que el micro deba ir a paso de hombre por la gran cantidad de gente y de autos acompañando al plantel. Sería hermoso, y por eso hago esta convocatoria. Además, la selección va a necesitar ese respaldo y calor popular.

—Y de Colón, ¿qué?

—Que hace un par de días que estoy en Buenos Aires, que estuvimos haciendo gestiones y averiguaciones, que concretamos lo de Prediger y también lo de Verdirame, que será un aporte muy bueno para el cuerpo técnico de Sciacqua. Lo de Prediger no fue fácil. Sebastián llegó a Santa Fe en un mal momento en enero, venía de no jugar y si no hubiese andado bien, seguramente se lo habría criticado mucho. Pero resulta que anduvo muy bien a pesar de esa inactividad competitiva que traía, pero lejos de ser beneficioso para su continuidad, se convirtió en un problema porque el Porto pretendía que volviera. Así que trabajamos mucho para que Sebastián siga y lo logramos. Hay que contarlo como un refuerzo más, porque el Porto tenía la posibilidad contractual de llevárselo.

—¿Damián Díaz?

—La idea es que se quede un año más con nosotros. No es de los puestos que tenemos como prioritarios para reforzar. Pero seguimos adelante para contratarlo.

—¿Hubo pedidos por Pozo o por Garcé?

—No, por ninguno de los dos.

—¿Y de los jugadores considerados prescindibles?

—Hubo una posibilidad para que Lucas Acosta se vaya a México, pero eso se enfrió. También hubo algunos pedidos por Caire que tampoco prosperaron por el momento.

—¿Javier Cámpora?

—Interesa, hablamos con él y como todavía tiene un año de contrato con Huracán no es fácil su salida del club. Cámpora es un buen delantero, pero todos lo quieren y eso hace que su cotización crezca. En pocas palabras, Cámpora se ha convertido en Batistuta para el fútbol argentino.

—¿Está difícil el mercado?

—Muy complicado... Lo charlamos entre los dirigentes y fíjense que no hay movimientos. Los jugadores piden fortunas. Parecen jugadores de la Champions League y no se pueden pagar las cifras que se solicitan. Nosotros no cometeremos locuras. Vamos a reforzar el equipo, pero siempre cuidando al extremo los intereses del club.

—¿Puede ser que se estén fijando en jugadores del exterior?

—Sí, claro. Hemos hablado mucho en este tiempo con el “Tata” Martino, por ejemplo, pidiendo algunas referencias de jugadores paraguayos o que están jugando allí. También miramos hacia Uruguay y Colombia.

—¿Se modifica el mapa económico con el descenso de River?

—En principio no, pero es un tema que se va a revisar. De todos modos, hay algo que está muy cerca de concretarse y de lo que tendrán novedades en los próximos días.

—¿De qué se trata?

—De la Copa Argentina. Arrancará ahora, en agosto. La primera etapa será para los clubes de los torneos Argentino y luego se irán sumando los de la B Nacional y por último los de Primera. Terminará en diciembre, será un torneo que se tomará como experiencia para luego perfeccionarlo, los clubes podrán arreglar sus contratos televisivos y se hará camino al andar con algo que, en principio, se iba a llevar a cabo el año que viene.

—¿Qué opinión tenés de lo que ha ocurrido en el fútbol argentino?

—¿Con los ascensos y descensos?

—Claro y con tantos clásicos que se pierden...

—Es verdad. Queda un solo clásico de ciudad, que será el nuestro. Banfield y Lanús son distintas ciudades, en tanto que Racing-Independiente es el clásico de Avellaneda pero sus hinchas trascienden la misma ciudad y se desparraman por todo Buenos Aires y el resto del país. No está el clásico rosarino, no está el clásico de La Plata y el fútbol de Primera se quedó sin Boca-River y sin Huracán-San Lorenzo. Esto no deja de ser un compromiso para todos. Es muy bueno lo que le está pasando a Santa Fe como plaza futbolera.