Los “Ticos” de La Volpe llegaron ayer, mientras que los dirigidos por el “Checho” lo hacían hoy

Costa Rica ya duerme en Córdoba; Argentina prefiere el bajo perfil

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No quiere que se repita. El técnico de la Selección argentina ni siquiera reconocerá el estadio Kempes en Córdoba, luego del desborde popular que fue el entrenamiento previo al encuentro frente a Colombia en la cancha de Colón.

Foto: Pablo Aguirre

El arribo de la selección centroamericana se dio mientras se estaba disputando el primer encuentro de esta Copa en la “Docta”. En tanto, se comenta que Batista prefirió postergar el viaje de la delegación albiceleste para evitar que se repita el “acoso” del público que vivió en la previa del partido en Santa Fe.

 

Darío Pignata

(Córdoba / Enviado especial)

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Justo cuando comenzaba a jugarse Brasil-Paraguay en el Kempes, llegó la selección de Costa Rica a Córdoba para jugar mañana con Argentina. Procedente desde Jujuy, donde hizo cabecera de concentración durante diez días, los apodados “Ticos” se hospedaron en el Holiday Inn (cerca del Aeropuerto) y rápidamente se fueron a entrenar a las canchas de la Liga Cordobesa en un barrio conocido como Guiñazú. La prensa sólo pudo ver los primeros 20 minutos de la práctica.

Los dirigentes del fútbol de ese país llegaron al estadio en el entretiempo y dialogaron con El Litoral. Están conformes con La Volpe: “El profesor es un estudioso del fútbol y muy trabajador. Apareció el equipo contra Bolivia y tenemos fe para hacer un buen juego con Argentina. Todos preguntan por esos morenitos rápidos que vieron el otro día y son menores de 20 años. Es muy bueno que adquieran experiencia para las Eliminatorias en una Copa América”.

Con su estilo parco, La Volpe atendió a la prensa casi a las corridas. Dijo que “la presión que tiene Argentina por ser local es un verso, sólo un invento de ustedes, los periodistas”. Y encima que la charla venía mal, a los tumbos, se desbarrancó cuando un colega le recordó que siendo él técnico de Boca, Belgrano le ganó un partido clave en el Chateau que lo dejó casi sin chances. El final estaba cantado: se terminó el contacto del DT de Costa Rica con el periodismo.

En lo futbolístico, el ex arquero de la Selección Argentina no confirmó si meterá algún cambio para enfrentar mañana a Argentina, aunque los once serían: Moreira; Acosta, Salvatierra, Calvo; Duarte, Leal, Mora, Cubero y Madrigal; Martínez y Campbell.

En su momento, del tema Messi, La Volpe dijo: “No habrá cambio de esquema, pero cuando reciba, debe tener uno nuestro encima”. Si bien no será marcaje por toda la cancha, se cree que Francisco Calvo lo seguirá de cerca.

El efecto Colón de Santa Fe

Si bien nadie lo quiso confirmar oficialmente, El Litoral metió las narices para averiguar por qué la Selección Argentina llegará tan tarde y sobre el mismo día del partido de mañana a la noche contra Costa Rica en el Kempes.

Concretamente, primero se dijo que la indefinición estaba dada por las famosas cenizas, dependiendo de cómo hacer el viaje de Ezeiza a Córdoba si en micro o avión como se acostumbra.

El tema, en la intimidad del cuerpo técnico, es que se quiere evitar el desborde de la gente, como consecuencia de lo que fue el entrenamiento desvirtuado de la Selección Argentina en la cancha de Colón, donde el rubro “a puertas cerradas” se transformó en una práctica con 5.000 personas en el Cementerio de los Elefantes.

En consecuencia, la Selección Argentina llegará de noche a Córdoba, cerca de las 20 y el único que tiene pensado hablar es el “Checho” Batista.

Lo que está claro es que el efecto Colón de Santa Fe evitó el reconocimiento del campo en el Kempes y movimientos con pelotas en el ex Chateau. Directamente, esta vez, al hotel. Y mañana, del hotel a la cancha, sin ningún contacto con la gente.

El recuerdo “Checheno” y la cancha

Más allá de todo lo que se juega el fútbol argentino en el partido de mañana frente a Costa Rica, Córdoba espera con buen ánimo a la Selección de Sergio Batista. Incluso, el “Checho” es recordado aquí cuando haciendo las primeras armas como entrenador profesional, tomó la conducción de un Talleres en Primera que ya venía en caída libre con el promedio.

La anécdota que hoy revive de su archivo el diario colega La Voz del Interior se remonta a septiembre de 2002 cuando el “Checho” tomó la conducción de Talleres, después de la salida de Enzo Trossero y de un interinato de Coleoni-Arce. En la votación interna de la “T”, el actual entrenador de la Selección Argentina le había ganado al “Tata” Martino por 5 a 2.

Por ese entonces, el nombre de Batista como técnico generaba muchas dudas (cualquier parecido con la realidad...). Es que no tenía experiencia en el cargo, sólo el nombre como ex campeón del mundo en el ‘86. Después del primer entrenamiento y antes de jugar el domingo con Huracán, el “Checho” Batista se despachó con un pedido insólito: “Quiero achicar la cancha para el domingo para evitar el desgaste físico”. Así, el por entonces Chateau Carreras, redujo sus dimensiones: un metro y medio de cada lado. Conclusión: tres metros menos de ancho.

El humor futbolero cordobés explotó: los de Belgrano lo trataron de “cagón” por achicar la cancha. Sin embargo, el achique le dio resultado: el domingo goleó 5-0 a Huracán y los de Talleres festejaron.

Pasaron los años y ahora Sergio Batista vuelve a Córdoba como DT de una comprometida Selección Argentina. “El día que Batista achicó la cancha”, titulan hoy los colegas de La Voz del Interior, en la espera de un equipo que desespera.