Con la vista en la primaria del 14 de agosto
Binner descargó sus críticas contra el gobierno nacional
El gobernador y candidato presidencial del Frente Amplio Progresista lanzó duros cuestionamientos contra la gestión kirchnerista durante los festejos por el triunfo de Bonfatti. “Estuvimos todas las veces que nos convocaron y nunca mordimos la cicuta”, dijo, y agregó: “Nunca nos dieron ni un alfiler”.
El mensaje del gobernador con tono de campaña presidencial.
Foto: DyN
De la corresponsalía de Rosario
Hermes Binner prefirió no desperdiciar ni instante, y después del discurso de Antonio Bonfatti, gobernador electo del Frente Progresista, salió a delinear lo que será la campaña electoral rumbo a la presidencia. “Festejemos santafesinos”, repitió el gobernador cuando se ubicó en el atril de un escenario repleto de pantallas que mostraban a los jóvenes del Frente Progresista gritando: “Se siente, Binner presidente”, un cantito que copó el arsenal de festejo en el búnker del Patio de la Madera.
Binner prefirió ir al grano y apuntó todos los cañones contra el gobierno nacional. Fue el blanco elegido por el oficialismo provincial para descargar de manera inicial los argumentos para dotar de una explicación la “sorpresa” de la perfomance del candidato de Unión Pro Federal, Miguel Torres Del Sel.
Nunca de rodillas
“Estuvimos todas las veces que nos convocaron en el gobierno nacional y nunca mordimos la cicuta, porque creímos que había una dignidad que representaba el gobierno de Santa Fe. Eso hizo que sea la única provincia argentina que no se tiene que arrodillar en la Casa de Gobierno”, indicó el candidato presidencial al celebrar el triunfo de su hombre para la gobernación, Antonio Bonfatti.
Binner decidió calzarse el traje de candidato presidencial y dio un paso adelante en sus cuestionamientos contra la gestión de Cristina Kirchner. Desde el 20 de junio pasado, cuando el gobernador fue abucheado por agrupaciones kirchneristas en el acto del Día de la Bandera (y las críticas que lanzó luego la presidenta hacia la gestión del Frente Progresista en un acto en Puerto General San Martín), la tensión creció entre Binner y la jefa de Estado, algo que anoche interpretaban fue clave para el desplome de Agustín Rossi en las últimas cuatro semanas de la campaña.
El candidato presidencial del Frente Amplio Progresista remarcó también que en su gestión fue a la Rosada “a pedir por los derechos de Santa Fe” pero que “nunca nos dieron ni un alfiler”, por lo que a pesar de ello destacó los logros obtenidos en la provincia.
“Tal vez hubiéramos podido hacer mucho más si nos arrodillábamos como muchas otras provincias que siguieron ese camino. Y no hablo precisamente de las del mismo signo político que el poder gobernante”, indicó.
En su discurso, Binner dedicó una parte importante al sector agropecuario, que de acuerdo a las interpretaciones iniciales del Frente Progresista volcó masivamente su voto hacia Del Sel.
“Los argentinos somos grandecitos y los santafesinos tenemos derechos a exigir el federalismo. Y tenemos derecho a ser consultados cada vez que se hace un acto en territorio santafesino. No nos vamos a negar. Si se quiere hacer un país normal hay que respetar la Constitución y las leyes”, afirmó el gobernador y dijo que el Frente Progresista cree “en los planes estratégicos y no en el modelo, porque el modelo sólo sirve para hacer una torta”.
Visita sorpresa
Ricardo Alfonsín llegó a Rosario al filo de la medianoche, y en el búnker del Frente Progresista los ánimos no eran los apropiados para invitados “sorpresa”. Cuando el candidato a presidente de la UCR ingresó al Patio de la Madera y tomó contacto con la gran cantidad de medios de todo el país que seguían el escrutinio, algunos dirigentes socialistas se miraban atónitos, porque según confiaron “nadie los había llamado para confirmarles la visita de Alfonsín. Nos sentimos parte del Frente Progresista en la provincia de Santa Fe, más allá de que a nivel nacional vamos por caminos separados”, dijo.
Juan Carlos Zabalza, senador provincial, fue quien decidió enfrentarlo y recomendarle a Alfonsín, con la mayor educación, que no era un momento y el lugar apropiado para estar el domingo a la noche. Alfonsín aceptó la recomendación y partió inmediatamente.
