Belleza animal en Puerto Madryn

Durante la temporada invernal, muchas son las especies de animales marinos que pueden observarse en la zona de la Península de Valdés y el Golfo Nuevo, en la provincia de Chubut. Puerto Madryn, la capital nacional del buceo, está ubicada sobre la costa de la provincia y resulta ser, invierno tras invierno, el escenario elegido por las ballenas francas australes, los elefantes y lobos marinos, las orcas, los delfines, entre otras especies; para aparearse, alimentarse y mostrar todo su encanto y belleza a los visitantes que se acercan a contemplarlos.

LA VEDETTE DEL MAR PATAGÓNICO

Conocida en el mundo científico bajo el nombre de Eubalaena Australis, los mortales comunes la conocemos como la ballena franca austral, uno de los mamíferos más grandes e imponentes que existen en la faz de la tierra.

Este tipo de ballena o cetáceo tiene hábitos migratorios entre áreas de crías y de alimentación. Esta es la razón por la que año a año, se la ve merodear por las aguas del Golfo Nuevo y, por ende, por las costas de la ciudad de Puerto Madryn. La Península Valdés es el lugar que concentra la mayor cantidad de ballenas de esta especie en el hemisferio sur, por lo que el avistamiento está asegurado.

Si la intención del viajero es aventurarse en el mar, Puerto Pirámides es en el único lugar donde se realizan los avistajes embarcados de ballenas, mientras que en El Doradillo se hacen desde la costa (a 10 metros de distancia se las puede ver). También, se pueden observar desde la ciudad de Puerto Madryn y en el muelle. Se las puede encontrar desde junio hasta el mes de diciembre. Es importante llevar ropa bien abrigada, comer liviano y estar dispuesto a disfrutar de estas fantásticas criaturas.

EL REINO DEL ELEFANTE

Los elefantes marinos son mamíferos pinnípedos, similares a la foca. Los machos miden entre cuatro y cinco metros y pesan 40 toneladas, mientras que las hembras miden entre dos y tres metros, con un peso que va entre los 800 y 1000 kilogramos.

Aunque están todo el año, se los puede ver desde fines de julio hasta noviembre, periodo en el que empiezan a aparecer en las costas de la Península Valdés. Es en esta época cuando comienzan con la temporada de reproducción. Al menos 40 mil ejemplares se acercan cada año, convirtiéndose en la población continental más importante de esta especie.

CON LA MAREA BAJA

Los lobos marinos de un pelo son mamíferos pinnípedos, como los elefantes, pero más pequeños. Miden entre 1.8 y 2.3 metros, y su peso ronda entre los 140 y 300 kgs.

En Punta Loma, reserva provincial ubicada a pocos kilómetros de la ciudad, hay colonias estables durante todo el año así que su avistaje está asegurado. También, se los puede encontrar en Punta Norte y en Puerto Pirámides durante el verano.

Consejo: visitar estos lugares cuando la marea está baja, de esta forma el avistaje será mejor.

PRIVILEGIO DE POCOS

Las orcas, por su parte, pertenecen al orden de los cetáceos y dentro de él, a la familia de las ballenas dentadas, junto a los delfines. El grupo de ejemplares que se presenta en la Península de Valdés, se acerca sólo a la costa para alimentarse de crías de lobos y elefantes marinos. Este grupo ha desarrollado la técnica de captura denominada “varamiento intencional”: la orca nada velozmente hacia la costa, varando sobre ella casi dos tercios de su longitud, para así poder atrapar a un lobo o un elefante marino, y regresa al mar trasladando la presa viva para compartirla con los integrantes de su grupo. La Patagonia es el único lugar del mundo donde la orca tiene un comportamiento de este tipo.

Como son bastante impredecibles, se las puede encontrar de manera ocasional, en la costa de Punta Norte y Caleta Valdés, en épocas de reproducción de lobos y elefantes marinos.

NI TANTOS, NI TAN CONOCIDOS

Otra especie que puede verse durante la temporada invernal en Puerto Madryn, es la de los delfines oscuros. Estos mamíferos cetáceos odontocetos miden cerca de dos metros y pesan alrededor de 90 kgs.

Presentes durante los meses más cálidos del año, se los puede encontrar desde septiembre en adelante. Durante las actividades de alimentación, principalmente de anchoíta y algunas especies de calamares, llegan a concentrarse más de 400 ejemplares.

EN SU HÁBITAT NATURAL

Con características geográficas y un entorno natural único, Puerto Madryn ofrece la posibilidad de ver a estos grandiosos animales en su hábitat natural. Las condiciones de avistaje de ballenas y de lobos marinos son únicas en el mundo. Por estas razones, es necesario y fundamental viajar perfectamente equipado con abrigo, camperas impermeables, protector solar y anteojos; todo necesario para poder disfrutar de las vacaciones.

Aunque no hay horarios específicos ni días ideales para ver a estas especies, lo importante es recorrer los distintos puntos del Golfo Nuevo con calma, paciencia y tranquilidad. Los animales aparecerán, por lo que respetarlos, tanto a ellos como a su entorno, hará que toda la experiencia sea imborrable.

LA CIUDAD (*)

Puerto Madryn es el resultado de la evolución histórica de su comunidad. Fue fundada el 28 de julio de 1865, cuando arribaron a sus costas 150 galeses a bordo del Mimosa. Ellos denominaron a este puerto natural “Puerto Madryn”, en homenaje a Loves Jones Parry, quien era Barón de Madryn, en Gales. El poblamiento se hace efectivo a partir de 1886; inmigrantes galeses, españoles e italianos en su mayoría, construyeron la vía del ferrocarril que lo unía con Trelew. A partir de ese momento, la ciudad fue creciendo en forma paulatina alrededor de las actividades ferroviarias, portuarias y de servicios. Esta estructura se mantuvo activa hasta finales de los ‘50 y primeros años de los ‘60. En esa misma década se levantaron las franquicias aduaneras, desaparecieron las últimas empresas marítimas de cabotaje, al igual que la Compañía Mercantil de Chubut y el ferrocarril. La población decreció, pero la fisonomía urbana no cambió. La radicación de la planta productora de aluminio llevó a ubicar el área industrial al norte de la ciudad, a la vez que se construyó un muelle mineralero. Desde la década del ‘70 se produjo lo que se conoce como el crecimiento explosivo de Puerto Madryn: en menos de diez años se triplicó la población, se asentaron industrias y se extendió la urbe para albergar a familias de las más diversas procedencias. La ciudad adquirió en los últimos años un marcado carácter turístico, perfilándose como la cabecera de servicios de la región y acentuando su interés por el cuidado del medio ambiente.

(*) Fuente: Secretaria de Turismo de Puerto Madryn.

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EXCURSIONES

Los avistajes de ballenas embarcados rondan entre los $220 para los adultos, y $110 para los menores; la duración es de una hora y media, aproximadamente. El costo estimativo de las excursiones para visitar los elefantes marinos es de $220 para adultos y, para menores de 12 años, $110.