Acusaciones mutuas de proselitismo

Otra visita de la presidenta que anticipa polémica con Binner

El gobernador, con quien compartirá el escenario, dijo que no es su intención generar tensiones. Pero advirtió que todas las semanas hay ministros nacionales “repartiendo cheques por los pueblos”. Dijo que se encendió una luz amarilla en la economía.

De la redacción de El Litoral

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En vísperas de una nueva visita presidencial a la provincia, el gobernador Hermes Binner aseguró que no habrá tensiones de su parte, pero alertó sobre una inusitada presencia de funcionarios nacionales en la provincia, en época de plena campaña electoral.

“De nuestra parte no tenemos tensiones. Lo que hacemos es demandar lo que le corresponde a Santa Fe y lo que creemos conveniente de acuerdo a la situación internacional que se vive”, dijo Hermes Binner ante la consulta de El Litoral. Pero a renglón seguido y consultado sobre las advertencias del kirchnerismo que lo acusan de utilizar los actos institucionales para hacer campaña, el mandatario disparó: “En realidad -dijo-, podríamos decir que es al revés. ¿Por qué vienen tantos ministros a entregar plata a la provincia ahora? -se preguntó-. Están recorriendo los ministros permanentemente; siempre hay tres ministros por lo menos en la provincia, de pueblo en pueblo, dejando cheques. Ojalá que vengan el 24 de octubre (después de las elecciones)”, deslizó.

Cristina Fernández presentará mañana el Plan Estratégico Industrial 2020 en la ciudad de Venado Tuerto (ver pág. 8). El acto se realizará en la empresa Corven Motors Argentina, donde además la presidenta dejará inaugurada la ampliación de la planta industrial de 14.400 metros cuadrados que funciona desde el año 2007 y que permitirá generar 128 nuevos puestos de trabajo. Binner y Fernández habían compartido un escenario también el pasado 19 de setiembre en la ciudad de Rosario, y la visita también estuvo precedida por polémica. Fue cuando el gobernador denunció vía twiter que llegaban camiones de Gendarmería con electrodomésticos a Rosario, a sólo horas del arribo de la presidenta.

Luz amarilla

Binner realizó esta mañana una recorrida por las obras del Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Santa Fe (Cemafe), que se está levantando en calle 27 de Febrero entre Mendoza y Salta de esta ciudad, y que ya presenta un nivel de ejecución del treinta por ciento.

En ese ámbito y en diálogo con la prensa, manifestó su preocupación por la situación financiera y económica a nivel nacional.

“Estamos preocupados por el país porque hay indicadores muy negativos. Esa doble balanza positiva que se tenía tanto en lo comercial como en lo fiscal, hoy tiene dificultades. Entonces, ojalá sea así de que Argentina está blindada, pero el hecho de que haya aumentado un 34% el riesgo país significa también que no hay posibilidades de poder colocar títulos o conseguir créditos para la Argentina. Es una situación compleja y si a esto le sumamos que disminuyó cien dólares la tonelada de soja en pocos días, más el déficit fiscal donde se ha hecho habitual que se recurra a la caja de la Anses para sacar dinero y dejar un pagaré; si le agregamos el dinero que se va del Banco Central para sostener el dólar, estamos ante una situación muy compleja”, insistió.

Para Binner, “hay una luz amarilla muy grande prendida en el país. No queremos ser agoreros ni nada de eso, al contrario, queremos que Argentina salga adelante y por eso nuestra propuesta es de utilizar las experiencias que existen, de que tengamos un diálogo franco, más allá de la pertenencia política”.

Telefonazo

Binner volvió a aludir hoy a un llamado particular que, según reveló este fin de semana, tuvo de parte del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. El gobernador reiteró que el funcionario lo llamó para pedirle que “bajara” los números del Ipec, que mensualmente elabora los índices de inflación a nivel provincial.

“Esto pasó el año pasado -aclaró hoy Binner-, así que no tiene nada de novedad. (Moreno) estaba molesto por los números del Ipec. Ustedes saben que este organismo tiene una seriedad que se la da el hecho de seguir trabajando con la misma metodología que tenía el Indec. Él quería que se bajaran los números de Santa Fe”.

El gobernador aclaró que no le dieron mayor relevancia al tema ni lo hicieron público en su momento, porque “lo tomamos como un hecho habitual de la forma de proceder que tiene este funcionario; siempre actúa en forma imperativa pero lo que no hemos perdido es la seriedad de demostrar que todos los números que otorga la provincia son verdaderos. A ese pedido respondimos con la realidad; que sigue siendo el Ipec el lugar más confiable por el cual llaman todos aquí; llaman empresarios, sindicalistas, gobernadores; es el teléfono más caliente del gobierno”.

Esta mañana y consultado sobre los dichos de Binner, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, rescató la figura del gobernador en términos personales pero aclaró: “No me van las estupideces”. Binner, ante la oportunidad de la réplica, se limitó a decir: “Está bien; es una opinión”.