Los Moyano apuntan a la Casa Rosada

Advertencia de Camioneros por cuentas pendientes del gobierno

El gremio que conduce el hijo del secretario general de la CGT, anunció movilizaciones porque el Estado “se queda con los aumentos” salariales mediante el impuesto a las ganancias. Pablo se sumó así a los reclamos de Hugo, aunque aclaró que, por ahora, no sacará los camiones a la calle.

 

De la Redacción de El Litoral

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El sindicato de Camioneros tiene previsto iniciar movilizaciones y asambleas en los próximos días para reclamar el aumento del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias correspondiente a la cuarta categoría.

Así lo anticipó el secretario general del sindicato, Pablo Moyano, quien se quejó de que los incrementos conseguidos por los trabajadores “se los queda el Estado” por la vía del impuesto al salario. “En el tema del mínimo no imponible somos de los primeros que vamos a salir a las calles a reclamar fuertemente”.

El dirigente sindical dijo que el “Estado se queda” con las mejoras obtenidas por los trabajadores en discusiones con las empresas, y que “da mucha bronca” tener que pagar el gravamen. Por lo pronto, Moyano descartó que las protestas lleguen a incluir camiones, lo cual constituiría un bloqueo al tránsito, pero adelantó que “va a haber movilizaciones y asambleas” como parte de las acciones previstas.

Moyano (hijo) aseguró que tanto el retraso del mínimo no imponible en Ganancias como la falta de sanción de la ley de reparto de utilidades empresarias entre los trabajadores, forman parte de las “cuentas pendientes” del gobierno.

Reclamo repetido

Si bien no es la primera vez que el sindicato advierte sobre su pedido de modificación del mínimo no imponible, en esta oportunidad tiene que ver con un caso concreto vinculado a la empresa La Serenísima.

Es que el sindicato logró un acuerdo con la mayor láctea de país para un incremento de los ingresos a partir de algunas bonificaciones y mejoras conseguidas luego de la paritaria sectorial. Hoy tributan los trabajadores solteros que en promedio superan por mes los 5.282 pesos, y en el caso de los casados es de 7.998, aunque el gravamen de la cuarta categoría se calcula por ingreso anual. Moyano consideró que “sería importante que la recaudación que genera ese impuesto lo paguen las grandes empresas”.

El pasado 6 de octubre fracasó una sesión del Congreso impulsada por los bloques de la oposición que pretendían subir el piso a partir del cual se paga el tributo a 16.900 pesos por mes. En esa oportunidad, se ausentaron los diputados del Frente para la Victoria y sus aliados provinciales y los opositores juntaron apenas 85 legisladores.

El secretario General de la CGT, Hugo Moyano, impulsó el tema nuevamente al hablar en el marco de los actos de recordación del primer aniversario del fallecimiento del ex presidente Néstor Kirchner.

Difícil

Héctor Recalde admitió que no se aprobaría este año la ley para el reparto de utilidades. “Este proyecto genera el derecho a la información”, pero “a algunos empresarios no les agrada que los trabajadores sepan cuál es el nivel de rentabilidad de las empresas, a pesar de que la Constitución lo dice”, apuntó el diputado nacional y abogado de la CGT. El secretario de Derechos Humanos de la central obrera, Julio Piumato, dijo que la iniciativa “le hace bien al gobierno y a todos, menos a algunos empresarios que tienen sus cuentas en negro”.

Renovadas disputas por las Ganancias

Hugo Moyano no sólo reclamó por Ganancias en el marco de los homenajes a Néstor Kirchner por el aniversario de su fallecimiento. También reclamó por el proyecto presentado por el diputado Héctor Recalde, para el reparto de ganancias empresarias entre los trabajadores.

El titular de los Camioneros sostuvo que “el tema del reparto, esperamos que con la nueva renovación del Congreso tomen esa bandera y que se pueda aprobar. Pero si no se aprueba, no creo que sea conspiración del gobierno, aunque vaya en contra de los trabajadores”, indicó el sindicalista. Pablo Moyano dijo que las empresas están “en condiciones de repartir parte de las ganancias” ya que, a su entender, es diferente el escenario del 2001, “cuando estaban todos quebrados”

Sin embargo, el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) Juan Carlos Sacco, consideró que el pedido es “desubicado”, tras las elecciones.

“Acabamos de tener una elección y no podemos salir con absurdos. No es para pedir nada ahora”, indicó el directivo de la central fabril, para quien “la única que puede exigir algo es la que se llevó el 54 por ciento del pueblo”, en un obvia referencia a la presidenta Cristina Fernández.

Por otro lado, Sacco consideró que Héctor Recalde, el diputado autor del proyecto de ley de reparto de ganancias, “hace tiempo que impulsa leyes antitrabajo, que asustan a las pymes y que generan empleo en negro”.

El empresario recordó que la posición “unánime” de los sectores de la UIA y del Grupo de los Seis es que el tema se debe resolver en el marco de las negociaciones paritarias que se llevan a cabo cada año.