Espacios duplicados

Las prácticas y confortables mesas extensibles se adaptan como un guante a las necesidades de cada casa. Duplique las posibilidades de su hogar y el número de sus invitados.

TEXTO. INMACULADA TAPIA. FOTOS. EFE REPORTAJES.

Como si se tratara de una goma de mascar, de un juego de niños, las mesas extensibles son una de las mejores soluciones para el hogar, independientemente de los metros de los que disponga en su vivienda.

Son una verdadera apuesta por el espacio sin renunciar a las visitas familiares y sociales. Diseños actuales, clásicos, en cristal o coloniales se rinden a la evidencia y apuestan por duplicar un tablero, esconderlo bajo el original para descubrirlo en la mejor ocasión o, simplemente, desplegarlo y transformar lo que parece una sencilla repisa en una verdadera mesa.

Redondas, rectangulares, cuadradas, de diferentes épocas y tamaños son una opción infalible de la decoración, un plus para el hogar sea cual fuera su número de ocupantes.

La cocina suele ser el lugar habitual donde la falta de espacio impone armarse de recursos para habilitar un sitio para comer. La firma sueca Ikea mantiene en sus stocks un clásico, la Norden, que con un fondo de 19 cm., mantiene dos tableros abatibles de forma que se puede utilizar según las necesidades. En ese mínimo ancho caben incluso seis cajones, tres a cada lado, de manera que se convierte en doblemente útil al servir también de lugar de almacenaje de cubiertos, servilletas o cualquier otro utensilio de cocina.

SENTIDO PRÁCTICO

La Oca, abundando en un sentido práctico fuera de lo común, propone una mínima tabla sujeta a la pared para dos comensales, que se pliega haciendo una perfecta línea recta cuando no se utiliza, y que en otro lugar de nuestro hogar, además, puede convertirse en una magnífica repisa para el ordenador o el teléfono.

Para el comedor, la serie Sornäs de Ikea le permite compartir un buen almuerzo con amigos y familiares extensos. De seis a diez comensales pueden reunirse en su casa, pues esta mesa de pino macizo teñido se desdobla para hacer que de manera holgada la casa se convierta en el mejor restaurante.

AUXILIARES

La Oca apuesta por un diseño elegante para el salón en el que mediante dos suaves aleteos una mesa de 45cm. se convierte en mucho más, ofreciendo capacidad para colocar sin pudor todo tipo de platos y aperitivos.

Las mesas de centro para el salón de Conforama permiten apilar libros y revistas en la parte inferior mientras que la superior sirve como mesa auxiliar, pero también como lugar donde comer o cenar con comodidad gracias a que se eleva hasta una altura que permite degustar cualquier plato sentado en el sofá.

Las minimesas múltiples son un claro ejemplo de cómo extenderse en el espacio sin ocupar mucho sitio. Apilables en el mejor de los casos, una sobre otra, llegado el momento se despliegan de manera que nos pueden servir de una utilidad mínima hasta la máxima. Una cena informal o un aperitivo tiene sobre su base una ocasión perfecta para darle buen uso.

Otra de las versiones de mayor éxito es la de una base común con una repisa central, bajo la que se despliegan a derecha e izquierda ejes bajo la zona principal y, como una mariposa, se despliegan dos alas inferiores que duplican su utilidad.