Hablan las nuevas autoridades de la Unidad Regional I

“Buscamos resultados porque la sociedad no puede esperar”

Danilo Chiapello

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“No nos podemos dar el lujo de esperar. La demanda de requerimientos sociales necesita una respuesta inmediata. Eso es lo que procuramos hacer”.

La frase sirve como modo de presentación y resume el espíritu que los subdirectores de policía, Hugo Manuel Miñoz y Tomás Salomón (jefe y subjefe de la Unidad Regional I, respectivamente) pretenden darle a su gestión.

A poco menos de diez días de asumir, las flamantes autoridades de la jefatura local dieron a conocer una serie de lineamientos de trabajo, en la que se puede adivinar una fuerte orientación y supervisión del personal, para combatir y prevenir el delito.

Ser dinámicos

“En realidad nosotros tratamos de ser dinámicos, en términos de provocar ciertos resultados porque no nos podemos dar el lujo de esperar. Ante la demanda de requerimientos sociales lo que se busca es dar una respuesta inmediata. Es lo que procuramos hacer”, comenzó diciendo Miñoz en diálogo con El Liltoral.

“Como primera medida, hemos instado al personal a que tenga una actitud de sumo equilibrio, de sumo profesionalismo, que tenga capacidad de reacción. Para ello, es indispensable tener los elementos necesarios para que toda esa gente se sienta contenida, supervisada y guiada, y aleccionada también para que en su labor policial los resultados sean óptimos”.

Más adelante, Miñoz explicó que “de hecho a este momento hemos hecho un seguimiento respecto de lo que tiene que ver con secuestro de armas y pedidos de captura.

Los secuestros de armas superaron en un 20 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado. Y en lo que respecta a los pedidos de captura hemos aumentado un 304 por ciento.

En definitiva, no tenemos más que agradecer la labor del personal policial en el sentido que fue consecuente con el requerimiento que se le ha hecho en uno de los aspectos relacionados con la prevención general.

La prevención general no solamente afecta en lo que hace al policía uniformado que recorre, que patrulla, sino que también busca a aquellas personas que tienen pedido de captura y que están mezclados en la sociedad.

Mapa del delito

—¿Se tiene pensado algún plan para las zonas más conflictivas de la ciudad?

—Sí. En realidad estamos ante la necesidad de tener un diagnóstico real y concreto. Varios aspectos se pueden considerar para ese diagnóstico.

Por un lado, tener el mapa del delito real, que eso nos cuesta, porque de alguna manera hay un porcentaje elevadísimo de cifras que son como “cifras en negro”, que tienen que ver con los delitos no denunciados.

En ese sentido, la primera sugerencia que hacemos es que aquella persona que fuera víctima de un delito, debe denunciarlo y además debe pedir una certificación policial.Es lo que más se recomienda. A partir de ese panorama, nosotros aplicamos procedimientos de operativos en virtud de donde se va produciendo la tendencia en alza de los delitos.

Más allá de eso, hay trabajos relacionados con cuadrículas, planificadas. Hay un verdadero trabajo de planeamiento donde de alguna manera estudiamos la afectación del recurso humano (analizar el recurso humano con el que se cuenta); dinamizar el recurso material.

En suma, la gestión va a estar basada en un trabajo de supervisión, que es lo que de alguna manera va a orientar las tareas para arribar a un resultado exitoso.

Campañas de prevención

Más adelante el jefe de la URI reveló que “estamos casi en condiciones de largar toda una serie de lineamientos sobre campañas de prevención.

Históricamente, siempre se habla de la prevención del delito en cuanto a cómo debe trabajarse para que no se cometa, o a posteriori respecto de cómo se investiga cuando el delito ya está consumado.

Lo que nunca se hace son campañas para que la sociedad evite ser víctimas de delitos. Justamente vamos a ahondar en ese criterio. En analizar en qué ámbitos se van produciendo determinados delitos, donde la sociedad puede ser un tanto vulnerable, y atender justamente esa parte.

Convengamos que el delito no desaparece. Lo que hace es adaptar su modalidad a los lugares donde tanto la sociedad puede ser vulnerable como de alguna manera puede presumir que podemos ser vulnerables nosotros desde la fuerza policial.

Por último, y consultado sobre las próximas festividades de Navidad y Año Nuevo, el funcionario indicó que “en realidad estamos planificando desde que asumimos esta función y pensando mucho en las fiestas de fin de año. Nosotros, de alguna manera, debemos ser contundentes en términos de procurar un resultado eficiente para que la familia pueda festejar y divertirse. Nosotros desde la función policial debemos asegurar que la familia esté tranquila y no permitir el avance de situaciones cuestionables”, sentenció.