A trabajadores y vecinos

Investigan agresiones

De la Redacción de El Litoral

Personal de la División Judicial de la Unidad Regional Uno llevaba tomadas ayer siete declaraciones a los testigos del violento episodio ocurrido el miércoles a la noche, en una de las entradas a la planta de Naranpol, y que tuvo como protagonistas a los dueños de la empresa, María, Lucas y Martín Galán.

La denuncia por “lesiones” que radicaron dos personas de 24 y 31 años que se encontraban en el portón de Pasaje Grandoli y Formosa, derivó en una causa penal que se tramita en el juzgado Correccional Nº 2, a cargo de la Dra. Jaquelina Balangione. Como primera medida, el 21 de diciembre a las 23, la jueza ordenó que las víctimas fueran vistas por el médico policial y que le tomaran declaración a los imputados.

Según consta en la denuncia policial una madre de 31 años relató que a las 21.45 una mujer al volante de una camioneta Volkswagen Tiguan pasó a toda velocidad por pasaje Grandoli y Formosa y que casi atropella a sus dos hijos de 2 años que estaban jugando en la vereda. Eso generó el repudio de algunos vecinos, que ante el reclamo habrían sido increpados por la mujer con gritos e insultos.

Luego hubo otro intercambio verbal con las personas que de manera pacífica estaban en la toma de la fábrica; asimismo María Galán pudo ingresar a su propiedad y detrás de ella entraron de a pie sus hermanos varones.

Pero los incidentes más graves ocurrieron minutos más tarde, cuando a la salida, luego de impactar varias veces contra el portón principal con el vehículo, dos personas resultaron lesionadas. El médico policial que atendió a las víctimas constató “lesiones leves”.

Para trabajar el caso, el jefe de la Unidad Regional Uno, Hugo Miñoz, dispuso cuatro sumariantes y un coordinador de la División Judicial que son los encargados del sumario prevencional.

De las primeras declaraciones surge que vecinos del barrio coinciden en la agresividad de la mujer que habría amenazado a todo aquel que se interponía en su camino.

Cabe destacar que en el mismo juzgado se tramita una denuncia por usurpación de la planta, que justamente radicaron los propietarios de Naranpol cuando recién comenzaba el conflicto.