Cuádruple crimen de La Plata

Pericias para medio centenar de elementos secuestrados

Télam

El fiscal platense Alvaro Garganta, a cargo de la investigación del cuádruple asesinato, ordenó al laboratorio forense de la Suprema Corte bonaerense que realice análisis genéticos sobre medio centenar de elementos que estaban en la escena del crimen.

Concretamente, el fiscal pidió a los peritos de la Asesoría Pericial que busquen patrones genéticos en el picaporte de la casa y en elementos del baño donde presumen fue atacada Bárbara Santos, la ex novia del karateca Osvaldo Martínez, preso y procesado como partícipe necesario del múltiple crimen.

Precisamente, Martínez, en una segunda carta de seis carillas dada a conocer ayer, sostuvo: “Mi vida era perfecta, con mi casa, mi trabajo, mis estudios, y hoy no tengo nada de eso”. “Un monstruo me robó a la persona que amo, me robó nuestros sueños y nuestro futuro, pero fue la justicia la que me robó la libertad”, dijo.

Martínez está acusado de ser partícipe necesario de los homicidios de su novia Bárbara Santos (29), la madre de la joven Susana de Barttole (62), su hija Micaela Gaelle (11), y su amiga Marisol Pereyra (35), perpetrados en la noche del 28 de noviembre en la casa de La Loma donde vivían las tres primeras víctimas.

Fuentes judiciales revelaron que la próxima semana el juez de Garantías, Guillermo Atencio, resolverá sobre la apelación a la prisión preventiva planteada por su abogado defensor, Julio Beley.

La defensa sostiene que no hay pruebas contundentes contra Martínez, luego de que los estudios forenses establecieran que no es suyo el ADN masculino que se encontró sobre los dos cuchillos, el palo de amasar y las uñas de dos de las víctimas. La fiscalía, sin embargo, entendió que Martínez mató a su novia en un exceso de celos junto a otro hombre al que le abrió la puerta y luego asesinaron a las otras tres para quedar impunes.

“A veces parece que se olvidan de que yo era el novio de Barby -dijo Martínez en una nueva carta conocida hoy-, era el que la acompañaba, no el que la perseguía, yo la elegí a ella y ella me eligió a mí; no vivíamos bajo el mismo techo, no teníamos hijos en común, los dos éramos independientes y si algo nos mantenía unidos era el amor”.

Además, Martínez invitó a quienes conocían a su novia a que “busquen en su memoria alguna escena en que yo la haya maltratado o que cuenten si Barby les comentó que yo la haya insultado o lastimado o algo parecido”.

Tras reiterar que se siente secuestrado en vez de preso, Martínez disparó otra vez sobre el fiscal Garganta, a quien hizo “responsable” de lo que le pueda ocurrir a sus familiares.

“Hago responsable al fiscal por cualquier cosa que le pase a mi familia, en especial a mi mamá, que tal vez sin darse cuenta y con sus ineficientes acciones, no sólo que no encuentra al culpable y encerró a un inocente, sino que es el causante de todo el dolor que sufre mi familia”, aseguró.

Al finalizar la carta escrita de puño y letra, añadió: “Mientras todos lloran y se abrazan los unos a los otros para consolarse, yo paso mis penas sólo en un cubículo de dos por dos, abrazado a un colchón y en la mano una foto de Barby que saqué de un diario que me trajo mi hermano. Creo que confundir a una persona celosa con un cuádruple asesino es un gran error”.