Diego Jara y Nicolás Correa fueron los responsables...

La pelota entró en la “redonda” y terminó explotando la “bomba”

Lo hecho por Unión, futbolísticamente en el clásico ante Colón, merecía lo que el delantero entrerriano y el defensor uruguayo le dieron al partido: justicia en el resultado.

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Los festejos en el 15 de Abril. La platea redonda fue testigo de los cuatro goles del clásico, pero sin dudas, fueron los 18.000 tatengues que coparon el 15 de Abril los que terminaron festejando un resultado que, luego del primer tiempo, parecía complicado alcanzar.

Fotos: Mauricio Garín y Pablo Aguirre

Alberto Sánchez

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Los dos convirtieron sus primeros goles en la máxima categoría del fútbol argentino, y debutaron en la red justamente en el cotejo más importante del campeonato: el clásico Unión-Colón. El delantero de Concordia (Entre Ríos), Diego Jara, y el zaguero uruguayo Nicolás Correa, con sus conquistas, le dieron al derby santafesino, la justicia que el trámite del juego requería, más que nada por la ventaja que el rojinegro había sacado en la primera etapa, mediante los tantos de Iván Moreno y Fabianesi, y la complicidad de la defensa unionista.

A los 17 minutos del complemento, el ex Patronato conectó de cabeza un centro perfecto de Velázquez, y batió la estirada de Pozo para poner el 1-2. Así lo contó Jara: “Jorge metió un centro espectacular, lo único que tuve que hacer es darle buena dirección y que se meta entre los tres palos, por suerte entró para darnos más fuerzas para empatar el partido, junto con la gente, que nos levantó el ánimo a nosotros y los achicó a ellos, eso fue fundamental, porque nos empujó para ir para adelante”.

También hizo referencia a una curiosidad ocurrida antes de ingresar: “Tanto Mauro (Ceruti, el preparador físico) como Sergio (Magnín, el kinesiólogo) me dijeron antes de entrar que yo iba a marcar los dos goles para empatar, no se equivocaron, hice dos, lástima que a uno no me lo cobraron”.

Su alegría era difícil de ignorar: “Estoy muy contento en lo personal por haber marcado mi primer gol en Primera División, y sobre todo porque fue en un clásico. Por más que no se me den las cosas, siempre trabajo y busco la oportunidad, para que cuando llegue no desaprovecharla, para eso tengo el respaldo de mis compañeros y el cuerpo técnico, y si me tengo que quedar en el banco, siempre apoyo a los muchachos”.

Y el tanto tuvo una destinatario especial: “Siempre que hago un gol se lo dedico a mi vieja, por eso miro hacia el cielo, ella está allá arriba. Luego le pedí a la gente que nos siga alentando como lo estaba haciendo para que nos de más ánimo, habíamos descontado y lo teníamos a un gol, fuimos enseguida en busca del segundo, lo empatamos y creo que merecimos el tercero porque fuimos superiores a Colón durante los 90 minutos”.

A puro candombe

El charrúa Nicolás Correa también hizo su bautismo en la red contraria con la casaca rojiblanca, cinco minutos después del descuento del entrerriano, marcó el empate: “Sin dudas, éste es el gol más importante de mi carrera profesional, hice un gol en el fútbol uruguayo que significó la clasificación a una copa internacional, pero por lo que me quiere la gente de Unión, no se compara con el que le hice a Colón. Muchos compañeros me dijeron que iba a hacer un gol, y la verdad es que yo estaba convencido de que se me podía dar, estoy muy contento por eso”.

El “Coto” explicó el saldo del 2-2 definitivo: “Es una sensación rara, porque estamos contentos por haber igualado un partido que venía mal para nosotros, pero a la vez nos quedamos con un sabor amargo porque sabemos que lo pudimos haber ganado. Obviamente que nos vamos contentos porque no se perdió, estamos invictos contra el clásico rival, y además jugamos muy bien, superando ampliamente a Colón, por eso nos vamos con la sensación de que pudimos haber ganado”.

“El clásico se vive de una manera especial. Ya lo habíamos vivido el año pasado, cuando en la previa, ellos contaban la cantidad de goles que nos iban a hacer, pero demostramos la personalidad que tiene este equipo, y esta vez pasó lo mismo, empatando un partido que estaba muy complicado en el resultado, pero sabiendo que si seguíamos jugando como lo estábamos haciendo, podíamos revertir la historia”, manifestó el pelado defensor.

la foto /// Otra vez fue figura

A Rosales sólo le faltó el gol

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El “Pichi” jugó un buen partido el domingo. Según un seguimiento realizado al cordobés, la pelota pasó por sus pies 40 veces, equivocándose sólo en nueve pases; fue víctima de seis infracciones, y cometió una; recuperó dos balones; provocó dos amarillas a jugadores rivales; ejecutó tres tiros de esquina; y recibió la quinta amonestación, por lo que no podrá jugar ante Rafaela el domingo. ¿Se viene un 4-4-2 con Jara y Magnín o Nuñez arriba? Es sólo una posibilidad.

Foto: Pablo Aguirre