El sábado hubo un tiroteo entre bandas

Preocupación en Ángel Gallardo

De la Redacción de El Litoral

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Vecinos de la localidad de Ángel Gallardo -ubicada a 11 kilómetros del centro de la capital provincial- se reunieron anoche con autoridades policiales y comunales en el Salón de Usos Múltiples de la escuela primaria de la jurisdicción. El motivo: los hechos delictivos que vienen sucediendo hace tiempo y truncó la tranquilidad de la zona. Un hecho ocurrido el sábado pasado “fue la gota que rebasó el vaso” y derivó en el encuentro.

Una vecina que por cuestiones de seguridad pidió reserva de identidad contó a El Litoral que el último sábado, pasadas las 18.30, hubo un tiroteo en la plaza principal de la localidad. A esa hora, unos 15 chicos -de entre 2 y 15 años- se entretenían en las hamacas y jugaban a la pelota cuando dos bandas, una de la zona y otra de Recreo, se enfrentaron. “Fue un hecho con suerte, porque podría haber sido una tragedia; a dos de los nenes que estaban jugando en la plaza las balas le rozaron la cabeza”, manifestó la mujer.

Según lo narrado por los vecinos, la banda de Ángel Gallardo que alteró la tranquilidad de los pobladores está integrada por cinco jóvenes y los actos de vandalismo que cometen son frecuentes y no tienen límites. “Hasta entraron a la parroquia del pueblo”, comentaron.

“El 7 de febrero ingresaron a la parroquia. La destrozaron. Se robaron ventiladores y el equipo de audio, que vendieron a los de la comunidad boliviana de acá. Por ese hecho, nos tuvimos que movilizar los vecinos. A las 24 horas, recuperamos las cosas robadas”, dijo la vecina que conversó con El Litoral. A ese hecho, sumó el ingreso a una casa quinta con fines delictivos y el robo de una moto.

Como resultado del encuentro de anoche, los vecinos consiguieron que las autoridades presentes se comprometieran a disponer un policía más para la zona y un móvil para realizar patrullajes. De todas formas, las acciones prometidas no es lo que más destacan. “Para nosotros, lo más importante de la reunión fue que todo el pueblo se hiciera presente. Éramos cerca de 200 personas, todas cansadas del accionar de cinco jóvenes”, remarcaron.