Extienden la garantía horaria

Swift: queda sólo un 10 % de los empleados

En una reunión en el Ministerio de Trabajo de la provincia, la empresa JBS Friboi aceptó extender el régimen laboral y confirmó que no hay interesados en comprar la planta de Venado Tuerto. Se plegaron a retiros voluntarios 452 trabajadores.

 

De la Redacción de El Litoral

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Tras una audiencia realizada en la sede local del ministerio de Trabajo de Santa Fe los representantes del grupo brasileño JBS Friboi aceptaron extender el régimen de garantía horaria hasta el próximo 10 de abril. En la audiencia, la empresa confirmó que no recibió una sola oferta de ningún interesado en adquirir la planta del ex Cepa de Venado Tuerto. De esa manera, negaron la información que surgió de la Municipalidad de Venado Tuerto que decía que había cuatro interesados en quedarse con el frigorífico.

“Empezamos el conflicto con 517 trabajadores y ahora sólo quedan 65”, aseguró José Fantini, titular de la Federación de Trabajadores de la Industria de la Carne, en un impasse de la audiencia que se realizó ayer en el Ministerio de Trabajo de la provincia, donde retomaron las negociaciones el gremio y la empresa JBS-Friboi, el grupo brasileño que decidió bajar la persiana de la planta del ex Cepa en diciembre pasado para trasladar parte de la producción al frigorífico Swift, ubicado en la zona sur de Rosario.

La empresa se comprometió a extender un mes más el régimen de garantía horaria hasta el 10 de abril. Sin embargo, este “gesto” de la compañía no sirve de mucho, porque 452 empleados de la planta de Venado Tuerto ya se plegaron a los “retiros voluntarios”. La audiencia comenzó a las 11 de la mañana en la sede de la cartera laboral, de San Lorenzo y Ovidio Lagos, donde los protagonistas del conflicto laboral se volvieron a ver las caras para retomar las negociaciones. Esta reunión estaba prevista para la semana pasada, pero la empresa pidió con antelación posponer la audiencia.

El Swift de Venado Tuerto parado desde mediados de diciembre, luego de que el grupo brasileño decidiera bajar la persiana de esta industria para trasladar la producción a Villa Gobernador Gálvez.

La estrategia comercial del grupo brasileño apunta a centralizar la producción en la histórica planta de Swift del sur de Rosario, donde planea refugiarse en la elaboración de hamburguesas, salchichas y otros subproductos para contrarrestar la caída abrupta del consumo interno de carne que llegó en 2011 a 54 kilogramos por habitante, la cifra más baja en los últimos cincuenta años, según la estadística del Instituto de Promoción de Carne Vacuna (IPCV) y contrarrestar la baja de exportaciones. Pero JBS no está muy lejos de rozar una crisis. Es considerada actualmente la empresa más grande de Brasil y una de las más importantes del mundo, con 120 mil empleados tras haber comprado varias firmas y marcas, como Marfrig, Sadia y Perdigao (hoy Brasil Foods), y dos bancos. E incluso con la cuota Hilton no le fue nada mal. Según información publicada en el diario La Capital, Swift fue uno de los frigoríficos más favorecidos en el reparto de la cuota Hilton. Curiosamente, pese a que esta empresa cerró entre 2010 y 2011 la mayoría de sus plantas en la Argentina, y concentra la faena prácticamente sólo en el frigorífico de Villa Gobernador Gálvez, su alícuota Hilton es un tercio mayor que la del año pasado: sumó 2.730 toneladas, una décima parte del cupo argentino para frigoríficos.