Al margen de la crónica

El referéndum de la marihuana

Estar al frente de un Municipio no es tarea fácil. Hace falta fortaleza para afrontar los reclamos directos de los ciudadanos, eficiencia y una transparencia minuciosa a la hora de administrar.

Esto se vuelve particularmente difícil cuando la situación económica general del país no acompaña. Y a veces se necesita recurrir a la imaginación o a medidas que pueden ser controversiales, pero que sin embargo pueden brindar un respiro en tiempos de crisis.

Esto fue lo que ocurrió esta semana en Rasquera, una localidad española cuya población de casi 1000 habitantes se vio dividida por una insólita propuesta del intendente.

El republicano Bernat Pellisa, pidió el apoyo del pueblo para aprobar una plantación de cannabis en siete hectáreas de terrenos municipales. Este proyecto, que cedería las plantas a la “Asociación Barcelonesa Cannábica de Autoconsumo” a cambio de un importante retorno económico, formaba parte de un paquete de medidas para sanear las cuentas municipales.

Bastaron pocos días para que se plantease la polémica. El alcalde prometió dimitir si el proyecto no recibía el 75% de los votos. La oposición se preguntó por qué no se sometía a votación exclusivamente la cuestión de la plantación, y la tensión política se disparó en todo el municipio.

En el medio, la población quedó enfrentada en torno a la consulta. Pero, pese a los acalorados debates, optó por la prudencia y esperó la respuesta de las urnas.

Este martes fue la hora de la verdad. Y los vecinos debieron pronunciarse mediante un referéndum no sólo sobre la plantación, sino sobre el conjunto de medidas que incluyó una suba de impuestos y la solicitud de un crédito de 500.000 euros para sanear las cuentas del Ayuntamiento.

El resultado fue tan llamativo como la propuesta. El 56,3% votó a favor del plan anticrisis y de la plantación de marihuana que permitiría al ayuntamiento ingresar 1,3 millones de euros en dos años.

El porcentaje no fue el esperado por el intendente y dejó patente la división existente en torno a la osada medida y a la gestión municipal en general. Pero la mayoría respaldó el plan y lo cierto es que el paisaje de la localidad, marcado por almendros y olivos, podría cambiar en los próximos meses.

Aclamado por los asistentes al recuento de votos, Pellisa señaló que estaba ‘orgulloso de ser alcalde‘, pero que pese a no haber obtenido el 75% de los votos, ‘dimitir sería una irresponsabilidad‘ de su parte.

“Éste es un proyecto pionero a nivel europeo y que creará precedente‘, remarcó el político catalán, que con esta plantación planea crear 40 puestos de trabajo, así como pagar en dos años las deudas del municipio, ahogado financieramente.

Todo esto se vivió en medio de una gran expectativa mediática, con la presencia de cámaras de todas las cadenas de televisión nacionales, y de otras internacionales pertenecientes a Al Jazzeera, a emisoras coreanas, a France 2, Europe 1, entre otras.