Estudiantes le arrebató a Colón un triunfo que merecía...

El peor de los pinchazos

El equipo de Sensini jugó el mejor partido del torneo, ganaba y llegó el cabezazo de Boselli en el descuento para quitarle dos puntos y la ilusión de empezar a prenderse arriba.

El peor de los pinchazos

Marcos Díaz, el arquero que cumple. No tuvo nada que ver el “1” sabalero en los goles de Estudiantes. El primero fue un mano a mano y el otro un cabezazo inatajable. En esta maniobra, detiene con seguridad ante la entrada de Enzo Pérez. Foto: Gentileza El Día de La Plata

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a La Plata)

Uno no sabe si echarle la culpa a esas “cosas que tiene el fútbol”, si quedarse con la mera explicación de la “injusticia” o si decir que a Colón le faltó liquidarlo o no equivocarse justamente en esa última jugada. La verdad es que ninguno de los que estuvieron en el Único de La Plata pueden discutir dos conclusiones: 1) que el resultado castigó a Colón; 2) que el equipo jugó bien, fue superior a Estudiantes y debió quedarse con los tres puntos.

Es una lástima no sólo por eso, por haber jugado bien, sino por la manera en que se encaró el partido. Fue muy inteligente el planteo de Sensini, con un esquema que varió, que prácticamente se paró con línea de cuatro atrás más allá de la voluntad de Caire para subir unos metros cuando era necesario (¡buen partido el de Caire!) y lo de Mugni para meter diagonales pero con la obligación de recuperar posiciones por izquierda. Colón se paró con un 4-4-2 durante gran parte del encuentro, pero en este caso no resultó clave la táctica sino la estrategia.

¿Cómo le jugó Sensini a Estudiantes?, apretando en el medio, quitándole la pelota y cuidándole una vez que se la recuperó. En este aspecto, fueron vitales algunos jugadores que se encargaron de manejarla con precisión, como Moreno y Fabianesi, por ejemplo. Pero no fue el único, ya que Bastía, Mugni, Graciani e Higuaín siempre tuvieron en claro que no había que rifar la pelota. Mucha triangulación en el medio, buena llegada por derecha (Graciani le ganó casi toda la noche a Iberbia) pero falta de definición. Este último fue el único defecto que tuvo el equipo, al margen de la equivocación del Polaco Bastía al calcular mal un envío largo desde el fondo, “peinó” la pelota y lo dejó solo a Gastón Fernández para que defina por encima de Marcos Díaz.

Confiesa Sensini que el de ayer fue el partido en el que menos habló en el entretiempo. Es que había jugado bien y perdía injustamente. Bastaba con seguir así, agregándole contundencia en el arco de enfrente. Fueron suficientes 13 minutos para dar vuelta la historia. El arranque del segundo tiempo fue una continuidad de lo que se había logrado en el primero, pero acentuando ese dominio sobre el rival. Colón controló primero a Estudiantes, le quitó espacios a los volantes e impidió que jugadores de la talla de Enzo Pérez o de Leandro Benítez tuviesen gravitación para habilitar a dos delanteros tremendamente peligrosos como Gastón Fernández y Boselli. Y después, ya con la pelota en su poder, el equipo estuvo claro y preciso en el manejo.

Bajo estos argumentos, con solidez atrás (bien Alcoba en todo) y con confianza para manejar el trámite del partido a través de la tenencia de la pelota, Colón inclinó decididamente el trámite a su favor. Estudiantes sumó gente arriba, Sensini cambió primero a Chevantón por Fuertes para mantener una referencia concreta de ataque, mientras que el ingreso de Prediger le dio compañía a Bastía y el de Barraza, en el final, fue para cubrir defensivamente el sector que dejó libre un Graciani totalmente “fundido” después de tantos piques.

Era triunfo y justo, hasta que llegó el segundo minuto de descuento y ese cabezazo de Boselli que todo Colón se lamenta. ¿Error?, ¿infortunio?, ¿desatención?, ¿mérito del rival? Todo cabe a la hora de intentar explicar algo que viene de la mano del más puro formulismo futbolero. Y así como muchas veces se ganaron puntos en forma inmerecida o inesperada, ahora se dio vuelta el destino y ya van dos partidos de visitante donde la victoria parece sellada y se escapa en los minutos finales (anoche y el partido en San Juan).

ALCOBA (7)

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Muy bien en la marca y oportuno para estar en el lugar indicado para marcar el segundo gol. Se acomodó totalmente a la defensa. Le faltó un poco más de precisión para salir jugando.


MORENO Y FABIANESI (7)

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Importante en todo, no sólo para manejar la pelota con mucho criterio en el medio sino también para llegar otra vez al gol. Ya hizo 31 en Colón sobre 170 partidos. Es el artillero sabalero en este campeonato. Importante.

CAIRE (7)

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Gestor principal de la jugada del gol de Moreno, sin problemas de perfil, marcando bien, cuidándose de la subida de Mercado y sólo con alguna complicación cuando Enzo Pérez se tiró por su sector.

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Una sola vez se les escapó. Mauro Boselli no pudo superar casi nunca a Pellegrino y a Garcé. En el final, un centro fue conectado por el delantero y Estudiantes se quedó con un empate por el que hizo muy poco. Foto: Gentileza El Día de La Plata

Sensini le ha encontrado la vuelta a Colón. El funcionamiento defensivo es correcto, crecieron individualmente los tres (Garcé, Pellegrino y Alcoba), sigue respondiendo Bastía, es bueno el momento de Moreno y aparecen los pibes del club (Graciani y Mugni) con capacidad para desequilibrar y para juntarse con los dos jugadores de mayor presencia ofensiva: Higuaín-Chevantón.

Pero no sólo hay que hablar de que se encontró un equipo titular, sino también una forma de juego, un estilo. Colón aprieta en el medio, presiona, recupera con mayor eficacia la pelota y tiene variantes de ataque. Es bueno lo que hace el pibe Graciani, más allá de que le falte tranquilidad y confianza para definir y para terminar la jugada. Pero insiste, es agresivo y ya se muestra como una buena opción de llegada. Y así está Colón, más seguro, más firme y compacto para jugarle de igual a igual a cualquiera. Es bueno el camino, más allá de que se lamenten los puntos perdidos.

/// SÍNTESIS

Estudiantes 2

Colón 2

Cancha: Estadio Unico de La Plata (local Estudiantes).

Árbitro: Diego Abal.

Estudiantes: Andújar; Mercado, Cellay, Sarulyte e Iberbia; Mariano González, Braña, Leandro Benítez y Enzo Pérez; Gastón Fernández y Boselli. A.S.: Albil. Estuvieron en el banco: Modón, Tarabini y Coria. D.T.: Juan Manuel Azconzábal.

Colón: Marcos Díaz; Alcoba, Garcé y Pellegrino; Graciani, Bastía, Moreno y Fabianesi y Caire; Mugni; Higuaín y Chevantón. A.S.: Bailo. Estuvieron en el banco: Luque, Leandro González y Curuchet. D.T.: Roberto Néstor Sensini.

Goles: en el primer tiempo, a los 44 min. Gastón Fernández (E). En el complemento, a los 6 min. Moreno y Fabianesi (C), a los 13 min. Alcoba (C) y a los 47 min. Boselli (E).

Cambios: en el segundo tiempo, a los 23 min. Mauro Fernández (E) por Iberbia; a los 25 min. Fuertes (C) por Chevantón; a los 29 min. Gil Romero (E) por Braña; a los 34 min. Prediger (C) por Mugni; a los 29 min. Gil Romero (E) por Braña y a los 40 min. Barraza (C) por Graciani.

Amonestados: en Colón, Pellegrino.

El peor de los pinchazos

¿Cómo lo sacan a Caire? Volvió a jugar por izquierda, con la “cancha cambiada” y sin embargo cumplió un buen trabajo y fue clave en la jugada del gol de Moreno y Fabianesi. Si Urribarri está para jugar, ¿es justo que Caire deba salir en este momento? Foto: Télam

bajo la lupa

MARCOS DÍAZ (6).- Le tapó un mano a mano a la Gata Fernández en el primer tiempo, anduvo bien de arriba y poco que hacer en los goles.

GARCÉ (6).- Arriesgando a veces más de la cuenta para salir jugando, pero firme. Se acomodó bien y está rindiendo como en los buenos tiempos.

PELLEGRINO (6).- Otro que le da seguridad a la defensa. Fue muy pocas veces superado. Buen trabajo.

GRACIANI (6).- Si mejora en la definición de la jugada, está para grandes cosas. Es desequilibrante y trata de ser aplicado en la marca.

BASTÍA (6).- Se equivocó en la jugada del primer gol de Estudiantes, pero, como siempre, aportó un inclaudicable sacrificio.

MUGNI (5).- No pesó de la manera en que puede hacerlo por una cuestión de cualidades. Se paró por izquierda y participó del juego cuando Colón tuvo la pelota.

HIGUAÍN (5).- Con algunos altibajos, pero dando siempre la impresión de que cuando aparece se transforma en un elemento de desequilibrio. Definió sin estabilidad en una jugada muy clara en el segundo tiempo.

CHEVANTÓN (5).- Entró poco en juego y no tuvo situaciones para definir. Lo marcaron bien y esta vez no tuvo la incidencia de los últimos tres partidos.

FUERTES.- Colaboró en defensa en las jugadas de pelota quieta y tuvo una adentro del área donde se terminó cayendo sin poder resolver.

PREDIGER.- En un par de ocasiones tuvo la pelota en su poder y demoró en soltarla. No se acomodó bien, más allá de que la función fue sostener el trabajo de Bastía en el final.

BARRAZA.- El partido estaba en su parte final, se paró de “8” y debió saltar en el centro que terminó en gol de Boselli.