Reto para América

La OEA debate cómo alimentar a

53 millones que padecen hambre

Los 53 millones de latinoamericanos y caribeños que padecen hambre crónica o están desnutridos son el objetivo de la 42a. Asamblea de la OEA, que debatirá desde hoy en Bolivia cómo garantizar alimentos para todos.

La OEA debate cómo alimentar a  53 millones que padecen hambre

El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, durante una de las actividades previas al plenario del martes.

Foto: Agencia EFE

 

Javier Aliaga

EFE

Los cancilleres o sus delegados en el foro de la Organización de Estados Americanos (OEA) comenzaron a llegar a la ciudad central de Cochabamba para discutir hasta el martes sobre “Seguridad Alimentaria con Soberanía en las Américas”, tema elegido por el país anfitrión.

En el mundo, 925 millones de personas “padecen de subnutrición o hambre crónica”, de las cuales aproximadamente 53 millones se encuentran en América Latina y el Caribe, el 9 % de su población continental, alerta el proyecto de Declaración de Cochabamba.

La malnutrición puede matar o causar obesidad, desnutrición, diabetes, hipertensión arterial y otras dolencias crónicas “que afectan de manera progresiva a la población de todos los países de las Américas”, añade el documento, que aún debe ser revisado por los cancilleres.

También reconoce las grandes diferencias que hay en la región sobre alimentación, pues algunos países han logrado importantes avances para resolver el hambre y la desnutrición, mientras en otros aún afectan a grandes sectores vulnerables.

Los ministros discutirán sobre estímulos a políticas agrícolas, volatilidad de los precios de los víveres y ayudas a pequeños productores, que producen el 60 % de los alimentos básicos de América.

Precios hacia arriba

La inflación en los alimentos es una de las preocupaciones porque en los últimos tres años, según la OEA, el costo del trigo, arroz y maíz ha aumentado más del 80 %.

Los ministros también discutirán el mismo concepto de “soberanía alimentaria”, entendido como “derecho de los pueblos a definir sus propias políticas y estrategias sustentables de producción, distribución y consumo de alimentos que garantizan el derecho a la alimentación para toda la población”, según el proyecto boliviano.

El secretario general de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, ha reconocido que ese concepto causa “alguna discusión”, porque su contenido lo ven distinto unos y otros gobiernos.

El presidente anfitrión, Evo Morales, achacó la ausencia en Cochabamba de la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, a discrepancias con este tema central del foro, pero Washington aclaró que no viene porque está de gira por siete países.

El mandatario boliviano dijo hoy que “por supuesto” va a haber diferencias, especialmente con Estados Unidos.

El gobierno de Morales considera que las crisis alimentaria, energética, financiera y climática son consecuencia de “los desequilibrios y desigualdades del modelo de desarrollo que ha implementado la sociedad occidental”, según ha explicado el canciller aimara David Choquehuanca.

Las primeras resoluciones concertadas del proyecto de declaración anuncian la decisión de promover el desarrollo agrícola para fortalecer la seguridad alimentaria y el “compromiso con el objetivo de erradicar el hambre y la malnutrición en las Américas”.

También la disposición de avanzar en una agenda común sobre seguridad alimentaria y nutricional, y el compromiso de fomentar la diversificación de la producción y de los productos en el mercado, así como la preservación de las tradiciones, variedades y culturas alimentarias locales.