Al margen de la crónica

Google enfrenta a la censura china

Una vez más, Google se ha plantado frente al sofisticado aparato de censura del Gobierno de Pekín con un sistema que informa a los internautas cuándo introducen en su buscador un término que está “bloqueado” y les aconseja qué palabra utilizar para lograr su búsqueda.

“Hemos observado que la búsqueda de determinadas palabras clave en Google desde China a menudo conducen a una interrupción temporal del servicio”, así es como empieza a explicar en su página web el nuevo sistema que ha incorporado para su buscador, que opera desde Hong Kong donde se trasladó en 2010 para esquivar la censura comunista.

Con un breve mensaje, el gigante estadounidense alerta a los internautas chinos cuándo la palabra que están introduciendo en su buscador puede derivar en una “pérdida de conexión con Google”, frente a lo que se defiende: “Esta interrupción es ajena al control de Google”.

El nuevo sistema de Google aparece en un momento tenso para el régimen comunista, a cuatro meses de ser renovada su cúpula de dirigentes.

Además tras los escándalos del represaliado dirigente político Bo Xilai y la reciente fuga del disidente ciego Chen Guangcheng del arresto domiciliario en el que vivía y que acabó con su marcha a Estados Unidos, no sin antes poner en una encrucijada a la dos potencias mundiales.

De todo ello, la página no se hace eco, aunque sí de la cantidad de las quejas de usuarios chinos que han recibido durante los últimos dos años sobre los continuos errores de su buscador en China.

“Al motivar a la gente a revisar sus consultas, esperamos minimizar estas interrupciones y mejorar nuestra experiencia de los usuarios de China continental”, explica el vicepresidente de Google Alan Eustace, en su blog oficial.

Las opiniones de los usuarios sobre esta nueva herramienta son diversas, mientras que unos destacan lo obvio de las alertas del buscador, otros apuntan que éstas pueden generar un mayor interés, precisamente, en la información “bloqueada”.

“Todo el mundo sabe que hay censura. Especialmente aquellos que buscan Google, en lugar de otros buscadores chinos. Por eso, el sistema me es indiferente, lo único que Google pretende con este sistema es aclarar que no tiene nada que ver con los errores del sistema”, dijo Natalia Shao, una estudiante de Bellas Artes, quien reconoce que el sistema a veces es muy “inestable”.

El movimiento del gigante de internet puede tener represalias por parte del régimen comunista, un extremo que ya predicen algunos de los más de 500 millones de usuarios que tiene China.

“Esto va a provocar que haya más y más palabras censuradas, no menos. Google va a tener más limitaciones”, auguró Brook Lee, estudiante de Periodismo.

No obstante, y a pesar de que China cuente con uno de los aparatos de censura más sofisticados del planeta, los chinos tienen sus recursos: “Inventamos, buscamos sinónimos, para decir y buscar lo que queremos. Quien quiere saber, sabe”, sentencia una joven trabajadora bajo el pseudónimo de Yoyo.