El buscado cayó en la aceitera

Detenido en San Lorenzo por el

secuestro y muerte de una mujer

Redacción de El Litoral

En la ciudad santafesina de San Lorenzo, más precisamente en el interior planta de la aceitera Vicentín, una comisión policial encabezada por el fiscal de Marcos Juarez Dr. Carlos Viramonte detuvo a uno de los dos implicados en la desaparición y muerte de una vecina de la localidad cordobesa de Saira.

Fuentes policiales santafesinas dijeron que el detenido por su presunta responsabilidad en la privación ilegítima de la libertad doblemente agravada por ser la víctima mayor de 70 años y por la supuesta participación de un menor de edad es un camionero que llegó a la Saira procedente del gran Buenos Aires para instalar allí un lavadero de autos.

Luego el detenido -Claudio Marcelo Rojas (43)-, fue llevado a la Comisaría de la ciudad de San Lorenzo y una vez allí se le hicieron conocer los cargos que pesaban sobre él en cuanto a la suerte corrida por Ana Suarez, una mujer, una mujer de 72 años cuya desaparición causó viva inquietud.

Para entonces un adolescente que forma en el grupo de familia de Claudio Rojas ya había sido arrestado por la policía cordobesa y éste señaló el sitio donde habían ocultado el cadáver de la mujer desaparecida un mes atrás y -al parecer-, se hizo cargo del crimen como único responsable.

Familiares, vecinos y allegados de “Anita” Suarez se manifestaron públicamente en una y otra oportunidad y hasta el propio intendente de Saira se interesó personalmente por el tema e hizo llegar un pedido de pronto esclarecimiento para la misteriosa e inquietante ausencia.

Para la mayoría de los vecinos de la localidad cordobesa todas las sospechas recaían entonces sobre los Rojas y apenas el auto de “Anita” apareció quemado en la zona rural el de 15 de junio una comisión policial allanó el domicilio, de los Rojas, pero entonces solo pudo secuestrar un arma de fuego, sus ocupantes habían desaparecido.

Luego, al profundizar la investigación la policía llegó hasta el joven cuyo relato de los hechos no convenció en cuanto -pensaron-, él solo no podría haber hecho todo, es decir que la sospecha alcanzó a también a Claudio Rojas y éste al saberse seriamente comprometido tras su captura, reveló a su vez el sitio exacto donde hallarían sepultado el cuerpo de la víctima.

El cadáver de Ana Suarez sería encontrado en los fondos del lavadero autos, enterrado bajo una pila de escombros y con una perforación en la cabeza compatible con una herida de arma de fuego. También se pudo saber que Suarez, clienta del lavadero, había trabado una estrecha amistad con Claudio Rojas.

La mujer desaparecida un mes atrás fue vista por última vez el 28 de mayo. Luego -ahora según fuentes informativas de la vecina provincia- el cadáver estaba enterrado a un metro y medio de profundidad, “bajo escombros y chapas, a unos 300 metros de su casa y cerca de la comisaría local -dice un despacho de la agencia DyN-, en la vivienda donde vivían los sospechosos”.

La misma agencia recuerda que la desaparición de “Anita” “causó gran conmoción en la pequeña localidad, por lo que el martes por la noche se movilizaron los vecinos”. Después de la desaparición de la mujer, apareció su vehículo totalmente incendiado en el departamento Colón, en el norte provincial, a 300 kilómetros de Saira.

El comisario mayor Omar Gallo, jefe de la Departamental Marcos Juárez, explicó que se estableció que la víctima “se encontraba enterrada en una especie de tinglado, debajo de unos escombros”.

Además, indicó que el cuerpo presentaba “una lesión craneal”, que pudo haber sido “producto de un disparo de arma de fuego”. El caso está a cargo del fiscal de Marcos Juárez Carlos Viramonte, que investiga si el homicidio fue cometido para robarle a la mujer.

Es muy comprometida la situación judicial de un hombre y un menor de su grupo de familia. El crimen causó viva conmoción en la provincia de Córdoba.

Detenido en San Lorenzo por el secuestro y muerte de una mujer

En el lavadero de autos que en Saira atendían los sospechosos, fue encontrado el cadáver de la víctima. Foto: Gentileza La Voz del Interior.