En la Sociedad Rural
Roban una yegua entrenada
para hacer equinoterapia
Morena es clave en el tratamiento de niños y adultos con discapacidades motrices. Las profesionales lamentan el atraso y el perjuicio que significa para los pacientes.
De la Redacción de El Litoral
Quince niños y adultos con distintas discapacidades no pudieron realizar su terapia semanal porque les robaron la yegua con la que hacían sus tratamientos. “Morena es una yegua especialmente entrenada para trabajar con personas con discapacidad, a través de terapias equinas. Ayer a las cinco y media de la tarde nos avisaron que la habían robado”, relató la psicomotricista Ana Piacenza, del grupo Equinoterapia Santa Fe, que funciona en la Sociedad Rural.
“La sacaron caminando por calle Francia y la vieron por la ciclovía de Pedro Vittori, yendo hacia el norte. Hicimos la denuncia en la comisaría 4a., pero hasta el momento no tuvimos ninguna novedad. Puede estar en la zona norte o en cualquier parte”, continuó.
La bronca y la impotencia se entrelazan ante este delito que deja sin respuestas a las profesionales que trabajan con personas con discapacidad. “¿Cómo les explicamos a chicos y a adultos que el animal no está y no sabemos si va a volver?”, preguntó la psicóloga Nanci Merlo.
No es la primera vez que al grupo de trabajo les roban un animal. “Esto ya había pasado en enero del año pasado, cuando nos robaron otra yegua. En ese caso, gracias a los medios de comunicación que hicieron pública la situación, apareció abandonada. Cuando cobró estado público, se le complicó a la gente que la tenía secuestrada y la dejó abandonada para no tener más problemas”, recordó Piacenza.
Pérdida emocional
“Morena” es una yegua de entre cuatro y seis años, de 1,65 de alzada (altura hasta la cruz, donde se junta el cogote y el lomo), de color castaño oscuro, con una mancha blanca en la cara y con “guantes” blancos en la mano izquierda y la pata derecha. “Es de un porte interesante, está gorda y bien brillosa”, detalló Merlo. Quien la reconozca puede avisar al 911 o al (0342) 154-760978.
Las personas que hacen terapia son las principales damnificadas: desde una beba de un año y medio hasta un adulto de 67 años con parálisis cerebral, que volvió a caminar gracias al caballo. “No se genera sólo una pérdida material, porque podríamos conseguir otro caballo y volver a entrenarlo; el problema es el vínculo tan fuerte que generan las personas con el animal. Chicos que están imposibilitados de expresarse, manifiestan la angustia dejando de comer, llorando o con la aparición de otros dolores. Entonces no sólo se cae el tratamiento terapéutico que veníamos haciendo, sino que, además, hay que empezar otro porque falta un ser amado”, explicó la psicóloga.
Desolados. Unos quince niños y adultos realizaban actividades terapéuticas con Morena, y formaron un vínculo afectivo muy fuerte con el animal.
Foto: Gentileza Equinoterapia Santa Fe
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